Con el siguiente lema: Una plataforma de 32 separatistas excluyentes que apuestan por la fractura de España y Francia para construir ‘Los Países Catalanes (Països Catalans)’ exigen en manifiesto la liberación del asesino terrorista vasco Arnaldo Otegui que cumple, actualmente, su condena en la cárcel de Logroño (La Rioja). En este sentido, el simpatizante de Esquerra Republicana de Cataluña, (ERC) y músico catalanista, Lluís Llach; miembros de ERC como Joan Tardà; el líder del partido extremista catalán anti europeo, anti Francia y anti España, y actual presidente de la ‘Comisión de Investigación Sobre el Fraude y la Evasión Fiscales y Las Prácticas de Corrupción Política’ del Parlamento autonómico de Cataluña, David Fernández, entre otros seres humanos de la siguiente lista: «August Gil Matamala; Lluís Llach; Sergi López; Rita Marzoa; Narcís Comadira; David Fernández; Joan Tardà; Ricard Gomà; Víctor Terradellas; Jaume Asens; Arcadi Oliveras; Julià de Jòdar; Montserrat Carulla; Jaume Cabré; Armand de Fluvià; Aureli Argemí; Ricard Vilaregut; Carles Riera; Gabriela Serra; Jordi Muñoz; Joan Subirats;Jaume Botey; Eva Serra; Vicent Partal; Feliu Ventura; Jaume Mateu; Maria Suave; Margalida Ramis; Miquel Àngel Llauger; Míriam Acebillo; Mateu Morro; Tomeu Martí; Laia Climent; reclaman la liberación de Otegui con el apoyo de la entidad separatista ‘Centro Internacional Escarré para las Minorías Étnicas y las Naciones‘ (CIEMEN); entidad impulsora del manifiesto.
Con el siguiente lema escrito en lengua inglesa: ‘Manifiesto Internacional para la libertad e Arnaldo Otegui y para que vuelvan a casa los presos políticos vasco’, los firmantes piden «la libertad inmediata del hombre que supo arriesgar por la paz y la democracia, de quien apostó por la palabra cuando parecía que nadie lo haría. Su liberación y el fin de la política de alejamiento, como paso previo a la excarcelación pronto los presos vascos, son pasos necesarios para poder alcanzar una paz justa y duradera en la región», en su manifiesto que reproducimos íntegramente, a continuación.
«’Manifiesto Internacional para la libertad e Arnaldo Otegui y para que vuelvan a casa los presos políticos vasco’
Ya hace cinco años que el movimiento independentista vasco abrió un profundo debate sin precedentes que concluyó con una apuesta inequívoca por vías exclusivamente pacíficas y democráticas, renunciando a la violencia en su reclamación del respeto a la autodeterminación del País Vasco, y con una disposición nítida a cerrar totalmente, mediante la palabra y el diálogo, el largo conflicto violento que ha asolado la región desde hace décadas.
En octubre de 2011, ETA respondía positivamente a la llamada realizada desde la Conferencia Internacional de Aiete (San Sebastián) que le pedía el cese definitivo de su actividad armada de más de 50 años y la apertura de un proceso de diálogo. El Premio Nobel de la Paz Desmond Tutu señaló Arnaldo Otegi, en su día portavoz de Batasuna y hoy secretario general de Sortu, como «el líder de este proceso de paz». Efectivamente, Otegi fue el dirigente más destacado entre aquellos que propiciaron en las fuerzas independentistas el debate sobre la necesidad de apostar por la palabra para solucionar todo conflicto.
Su apuesta por vías exclusivamente pacíficas y democráticas fue respondida con su arresto, en octubre de 2009, y con su condena posterior a más de seis años y medio de prisión por pertenecer a la organización política Batasuna, ilegal legalizada previamente por el Gobierno español. Desgraciadamente, el fin de la actividad armada de ETA, que ha mostrado su disposición a un proceso de desarme y de diálogo y reconciliación que tenga en cuenta el dolor de todas las víctimas, no ha supuesto aún respuesta positiva por parte de la Estado español.
Arnaldo Otegi, cuyo caso ha sido recurrido ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, se encuentra en una prisión española alejado de sus familiares y amigos. Así están también cerca de 500 presos vascos relacionados con este conflicto. Dispersados en cárceles lejanas en el País Vasco, frecuentemente incomunicados, esta realidad provoca, además, un castigo añadido a sus familiares, abocados a recorrer largas distancias para poder visitarlos.
Frente a ello, pedimos la libertad inmediata del hombre que supo arriesgar por la paz y la democracia, de quien apostó por la palabra cuando parecía que nadie lo haría. Su liberación y el fin de la política de alejamiento, como paso previo a la excarcelación pronto los presos vascos, son pasos necesarios para poder alcanzar una paz justa y duradera en la región. Por humanidad. Por justicia. Porque creemos en una solución sin vencedores ni vencidos. Porque apostemos por la paz. Por eso pedimos libertad para Arnaldo Otegi y el traslado de los presos al País Vasco.
Listado de firmantes:
August Gil Matamala; Lluís Llach; Sergi López; Rita Marzoa; Narcís Comadira; David Fernández; Joan Tardà; Ricard Gomà; Víctor Terradellas; Jaume Asens; Arcadi Oliveras; Julià de Jòdar; Montserrat Carulla; Jaume Cabré; Armand de Fluvià; Aureli Argemí; Ricard Vilaregut; Carles Riera; Gabriela Serra; Jordi Muñoz; Joan Subirats;Jaume Botey; Eva Serra; Vicent Partal; Feliu Ventura; Jaume Mateu; Maria Suave; Margalida Ramis; Miquel Àngel Llauger; Míriam Acebillo; Mateu Morro; Tomeu Martí; Laia Climent.»
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