Redacción – «Pedimos a ambas formaciones políticas (Juntos el Sí y la CUP–CC) que sean muy conscientes de que en estos momentos el futuro de este país está en buena parte en sus manos y que por tanto sean dignos de la esperanza de este pueblo y de todas aquellas personas que a lo largo de la historia de este país han dejado la vida defendiendo su dignidad y la libertad». Así reclaman los dirigente cupistas en un comunicado con el título «Ni un paso atrás hacia la Independencia» de Cataluña, emitido anoche y ha menos de 72 horas de la asamblea extraordinaria de Candidatura de Unidad Popular (CUP) para valora y decidir sobre la propuesta de la coalición separatista catalana de Artur Mas Gavarró y Oriol Junqueras Vies. Barcelona, 25 de diciembre 2015. Fotografía: dirigente de CuP (Pueblo Libre) y simpatizantes durante una manifestación en Cataluña. lasvocesdelpueblo.
La asamblea de la CUP que tendrá lugar el próximo domingo 27 de diciembre 2015 en Sabadell (Barcelona) puede ser decisiva y ya se dibuja como el punto de no retorno para la separación de Cataluña del resto de España. Domingo, CUP puede poner fin a la carrera política de muchos en Cataluña como dar el pistoletazo de inicio de golpe de gracia. La Asamblea genera una gran expectativa mediática por la trascendencia del resultado que salga de la votación. De hecho, la formación anticapitalista separatista está divida y ya existe una clara tensión entre los partidarios de ‘Sí’ -se trata de los de organización cupista de Pueblo Libre- a la investidura de Artur Mas Gavarró para salvar el proceso separatista catalán y los partidarios al ‘NO’ -se trata de los de la organización cupista de Adelante-a Artur Mas y convocación de nuevas elecciones si JxSí no propone otra alternativa a Artur Mas Gavarró.
Ayer Pueblo Libre emitió un comunicado (aquí) en el cual apoyaba la investidura de Artur Mas Gavarró para salvar los muebles. Por otra parte los dirigente de la formación ya admiten públicamente la fracción interna y dejan claro que el próximo domingo pase lo que pase la formación puede quedar muy debilitada.
Centenares de concejales de CUP a favor de la investidura de Artur Mas
«Pedimos generosidad, flexibilidad y empatía. Pedimos mirar más allá de nosotros mismos y recordar a tantas y tantas personas que han protagonizado estos últimos años las manifestaciones más multitudinarias que se recuerdan. El apoyo social amplio a la independencia y en la República Catalana al que hemos llegado es un bien colectivo que debemos preservar y hacer crecer aún más; y que de ninguna manera se debería poner en peligro ni dilapidar por falta del esfuerzo político necesario», manifiestan los concejales de CUP en el comunicado que reproducimos íntegramente, a continuación.
«Ni un solo paso atrás hacia la independencia de Cataluña
Los y las representantes municipales abajo firmantes de la CUP-Pueblo Activo, tanto del mandato actual como de anteriores, ante las negociaciones que se han estado llevando a cabo de manera intensiva durante estos días, queremos hacer llegar al conjunto del independentismo, y al pueblo catalán en su conjunto, las valoraciones y consideraciones:
Tras las elecciones del 27 de septiembre de 2015 en la que se consiguió una mayoría independentista en el Parlamento de Cataluña, y después de que éste aprobara la Resolución I / XI del 9 de Noviembre donde se establecían los acuerdos de desconexión con el Estado español y el anexo con las medidas sociales más urgentes en coherencia con el mandato popular expresado en las urnas, se ha hecho evidente la urgencia de llegar a un acuerdo político sobre el Plan de Choque Social, el Plan de Ruptura Democrática y el Proceso constituyente. Un acuerdo que facilite la investidura y que permita la formación del gobierno de la Generalidad de Cataluña para poder iniciar la desconexión con el Estado español de manera inmediata.
Pedimos a ambas formaciones políticas (Juntos el Sí y la CUP-CC) que sean muy conscientes de que en estos momentos el futuro de este país está en buena parte en sus manos y que por tanto sean dignos de la esperanza de este pueblo y de todas aquellas personas que a lo largo de la historia de este país han dejado la vida defendiendo su dignidad y la libertad.
Pedimos generosidad, flexibilidad y empatía. Pedimos mirar más allá de nosotros mismos y recordar a tantas y tantas personas que han protagonizado estos últimos años las manifestaciones más multitudinarias que se recuerdan. El apoyo social amplio a la independencia y en la República Catalana al que hemos llegado es un bien colectivo que debemos preservar y hacer crecer aún más; y que de ninguna manera se debería poner en peligro ni dilapidar por falta del esfuerzo político necesario.
El proceso independentista es y ha sido oportunidad y motor de cambio. Sólo hay que ver la transformación del mapa político de estos años. Sabemos que el camino hacia la independencia comportará una profundización de la democracia y una posibilidad real de llevar a cabo conquistas sociales relevantes. Es el momento donde todo es posible y hay que hacer un esfuerzo máximo para que se pueda hacer efectiva esta oportunidad. Es necesario que el proceso no se detenga, hay que pasar pantallas y seguir avanzando. Hay que acompañar la acción institucional con la movilización y protagonismo populares.
Los resultados del 27S, además, han dado a la CUP-CC la oportunidad de tener un papel decisivo en la construcción de la República Catalana. Hay que aprovechar esta fuerza para introducir un alto contenido transformador de las estructuras sociales y económicas al servicio de las clases populares y respetuosas con el territorio. Hay que aprovechar este papel decisivo para garantizar firmeza en este proceso de liberación, que no habrá pasos atrás. Hay que aprovechar este papel para abordar las emergencias sociales y ambientales más acuciantes que padecemos y frenar las políticas de empobrecimiento de la mayoría. Y hay que aprovechar este papel decisivo para iniciar un proceso constituyente de base popular para conseguir la máxima implicación y participación democrática en la construcción de la nueva república.
Pedimos que este horizonte ilusionante, y la concreción de los pasos a realizar para avanzar, marquen el debate y no los ataques y la beligerancia a la que hemos asistido en esta etapa post 27S. Y es que esto sólo consigue fortalecer el enemigo político y debilita el proceso de construcción de la República Catalana independiente.
El mundo nos mira pero también el resto de los territorios que conforman los Países Catalanes. Partes de nuestra nación han emprendido movimientos importantes de recuperación democrática, nacional y social; siendo, evidentemente, sensibles a la evolución que tome el movimiento independentista en el Principado de Cataluña. No podemos decepcionarles.
A nivel local, estos días muchos ayuntamientos estamos aprobando mociones de apoyo a la declaración del Parlamento del pasado 9 de noviembre. Un apoyo que ya ha tenido respuesta en forma de amenazas y presiones por parte de la judicatura y otros poderes del Estado. No acabaríamos de entender el sentido de este compromiso municipal si esta declaración y el Parlamento que lo ha aprobado tuvieran fecha de caducidad para el próximo 10 de enero.
Rechazamos, por tanto, la posibilidad de tener que ir a unas elecciones adelantadas en el mes de marzo, una eventualidad que consideramos muy negativa por diferentes razones:
a) Las elecciones del mes de marzo como consecuencia de una falta de acuerdo político, representarían la anulación de las elecciones del 27 de septiembre, que fueron convocadas, como sabemos, con carácter plebiscitario y constituyente. Representarían también la anulación de las declaraciones y acuerdos del inicio de la legislatura y en consecuencia serían la expresión de la liquidación de la voluntad popular.
b) Representar, como consecuencia, el retorno al marco autonómico y la imposibilidad de construir la República Catalana, debido a que, del resultado de las nuevas elecciones, que serían evidentemente de carácter simplemente autonómico, difícilmente se sacarían consecuencias políticas que permitieran desarrollar una línea de trabajo clara de orientación independentista como consecuencia de un mandato popular formulado explícitamente, como lo fue el 27 de septiembre.
c) Ofrecen – gratuitamente – la oportunidad de reforzamiento del españolismo, una tendencia que saldría beneficiada fruto de la proximidad con las elecciones españolas precedentes.
d) Las elecciones del mes de marzo podrían, incluso, desestabilizar y debilitar el apoyo social y político a la opción independentista por su carácter estrictamente autonómico. Un hecho que abriría la posibilidad de una dispersión de alianzas fuera del independentismo y en el camino del reforzamiento de las «terceras vías», facilitando la representación dentro del arco parlamentario de fuerzas políticas de la derecha catalana más españolista, actualmente arrinconadas y extraparlamentarias, y de nuevos pactos con el Estado español.
Para los que ya no están por los luchadores y luchadoras incansables por nuestros hijos, nietos y nietas Ni Un Paso Atrás Hacia la Independencia» de Cataluña, sentencian los concejales de CUP.
Los firmantes del manifiesto