Barcelona (Cataluña) Reino de España, jueves 16 de octubre de 2025 (Lasvocesdelpueblo).- 10 años de prisión e inhabilitación de 20 años a la Manada de Rubí; la Audiencia de Barcelona condena a seis acusados por una agresión sexual grupal. La sentencia ha sido dictada en «conformidad», es decir, los depredadores sexuales, que llevaron a la víctima en una nave industrial abandonada «con ánimo de satisfacer sus deseos sexuales», han aceptado voluntariamente los hechos imputados y la pena propuesta por la acusación; un acuerdo procesal que finaliza el juicio de forma anticipada, implicando una reducción de la pena o algún beneficio para estos atacantes sexuales.
La sección 6ª de la Audiencia de Barcelona ha dictado sentencia de «conformidad», después del «acuerdo» entre las partes, «a penas de 2, 9 y 10 años de prisión los seis acusados» de la Manada de Rubí por una «agresión sexual grupal» por unos hechos ocurridos a Rubí, en la provincia de Barcelona), en 2022, de acuerdo con la sentencia que Lasvocesdelpueblo ha tenido acceso.
Además, la Audiencia recoge también, «la prohibición de comunicación y comunicación con la víctima por un periodo de 10 años superior a la pena, así como la inhabilitación para trabajos que conlleven contacto con menores por 20 años superior a la libertad vigilada, que se establece en 5 y 10 años según los acusados».
Víctima «diagnosticada con una discapacidad psíquica»
Los hechos se remontan a diciembre del año 2022 cuando la víctima, «diagnosticada con una discapacidad psíquica», quedó con uno de los procesados para fumar y beber. Cuando este la recogió en su domicilio, la trasladó con el coche hasta una nave industrial abandonada y alejada del casco urbano donde, de forma sorpresiva, se encontró con los otros procesados».
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Añade el auto: «Todo y la negativa de la víctima a mantener relaciones sexuales con ellos, estos, con ánimo de satisfacer sus deseos sexuales, la agredieron sexualmente.
Dice la Audiencia de Barcelona: «La Sra. […] en ningún momento prestó consentimiento a las prácticas sexuales descritas, sin que pudiera evitarlas dada la situación de miedo y angustia en que se encontraba, rodeada de seis varones, en una nave industrial abandonada y alejada del núcleo urbano. Sufre, además, desde los hechos, síndrome de estrés postraumático con ideas de muerte y de autolisis».
