18k Ronaldinho| Estafa con bitcoin

El exjugador del FC Barcelona, el Milán y otros clubes de Europa y América es sospechoso de haber participado en una estafa que se le atribuye a la empresa "18kRonaldinho", que ofrecía pingües y falsas ganancias superiores del 2 % diario a quienes invirtieran un mínimo de 30 dólares en monedas virtuales

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FOTOGRAFÍA. MADRID (ESPAÑA), 23.08.2022. Detalle de varios símbolo "B" de Bitcoin de las criptomonedas. Efe

Brasilia (Brasil), miércoles 23 de agosto de 2023 (Efe).- El exfutbolista Ronaldinho Gaúcho no se presentó este martes ante una comisión de la Cámara de Diputados de Brasil que investiga estafas con bitcoines mediante «pirámides financieras», asunto por el que también responde ante la Justicia.

Ronaldinho había sido citado para declarar sobre esos asuntos, pero se ausentó sin ofrecer explicaciones y a pesar de que sus abogados habían obtenido en la Corte Suprema una cautelar que le permitía mantenerse en silencio frente a los parlamentarios a fin de no incriminarse.

El diputado Aureo Ribeiro, presidente de la comisión, anunció que Ronaldinho ha sido convocado ahora para el próximo jueves y advirtió de que, en caso de una nueva ausencia, ordenará a la Policía que lo traslade mediante «el uso de la fuerza» hasta Brasilia para prestar declaración.

El exjugador del FC Barcelona, el Milán y otros clubes de Europa y América es sospechoso de haber participado en una estafa que se le atribuye a la empresa «18kRonaldinho», que ofrecía pingües y falsas ganancias superiores del 2 % diario a quienes invirtieran un mínimo de 30 dólares en monedas virtuales.

La empresa, en la que el exfutbolista aparecía como «embajador», nació originalmente como comercializadora de relojes y joyas, pero según el Ministerio Público se fue alejando de ese negocio y pasó a concentrarse en la pirámide financiera con criptomonedas.

La defensa de Ronaldinho ha alegado que su cliente ha sido en realidad una «víctima» de esa empresa, sobre la cual asegura que usó su imagen y su nombre en forma ilegal, sin su debida autorización.

El caso fue destapado por los clientes de la empresa, que en una acción civil colectiva han demandado 300 millones de reales (hoy unos 61,2 millones de dólares o 56,5 millones de euros) por daños morales y materiales.