Efe – El presidente del PP, Pablo Casado, ha asegurado este miércoles que se ha visto cómo al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, «se le ha caído la careta» al decir «rotundamente» que «nunca» se ha planteado «llegar a un pacto con el PP». San Sebastián (España), miércoles 8 de julio de 2020.
Casado se ha referido de esta manera a una entrevista concedida por Sánchez al periódico italiano Corriere de la Sera -en la que el presidente español sostiene que nunca pensó en pactar con el PP y recordó la desaparición de PASOK-, durante un acto electoral celebrado en San Sebastián junto al candidato de su partido a lehendakari, Carlos Iturgaiz.
El líder del PP ha asegurado que «al final el antipatriota» es Sánchez «porque habla mal de su país en una entrevista en Italia, al menos de la oposición que gobierna en seis autonomías y en miles de ayuntamientos y que supuestamente es la que tiene que remar a favor. Que es lo que estamos haciendo y él niega», ha remarcado.
«Muchos ya lo sabíamos, pero le agradecemos la sinceridad, aunque sea después de haber tenido que decirlo en un periódico extranjero», ha insistido Casado, quien ha respondido con un irónico «oído cocina» al reconocimiento de Sánchez de que «nunca se ha planteado ni una gran coalición ni ningún tipo de acuerdo» con el PP.
Tras pedir al presidente del Gobierno que «al menos, no mienta a la población española», Casado ha recalcado que «lo de decir aquí una cosa y luego hacer la contraria se llama hipocresía, en Italia y en España». «Y lo de intentar hacer responsables a los demás de las propias decisiones: en este caso de crispar, de confrontar y de no pactar es puro cinismo». «Y eso se dice aquí y en Italia», ha zanjado.
«Si usted no quiere llegar a acuerdos con el PP, dígalo, es legítimo, y si quiere justificar sus pactos con los nacionalistas y con la extrema izquierda de Podemos, es legítimo. Todo el mundo lo vio, incumplió sus promesas que hizo en el debate electoral. Pero al menos no nos acuse a los demás de hacer lo que está haciendo», ha insistido.
Frente a esta actitud, ha destacado la «responsabilidad» de su partido y el «apoyo» dado al Gobierno en las instituciones comunitarias para el fondo de reconstrucción europeo por el COVID-19 que se está negociando, al tiempo que se ha mostrado preocupado por la posibilidad de que Sánchez «dé un portazo sonoro en toda Europa a pactos económicos», ante la «recesión enorme» que auguran distintos organismo y que además «es mayor en España» donde se multiplica «por diez» la media del empleo destruido en la UE.
«Todos los indicadores internacionales dicen que en España se está haciendo peor», ha subrayado Casado, quien ha propuesto hacer «lo contrario» de lo que dice el Gobierno y se bajen impuestos, se aumente la liquidez a las empresas y se amplíen los Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) hasta «más allá de fin de año».
En este punto, se ha dirigido también al PNV para preguntarle «cómo puede explicar a sus votantes de centroderecha que está contento con que Pablo Iglesias sea vicepresidente de España» y «con que Alberto Garzón, un comunista declarado, sea el ministro de Consumo».
«Quien vote al PNV está depositando su papeleta en una urna que se comunica con la del Partido Socialista que se comunica -a su vez- con la de Podemos», ha dicho Casado, para quien «esto es el engaño de siempre de todas las elecciones».
Las urnas «son transparentes, pero ellos intentan poner una cortina o, al menos, poner conductos para que a partir del 12 de julio veamos pactos que los votantes de centroderecha no quieren», ha explicado.
«Los pactos del PNV son: que siga Pedro Sánchez con Pablo Iglesias subiendo los impuestos a nivel nacional y que siga Podemos, con sus vínculos con Bildu, mandando a nivel autonómico», ha señalado el líder del PP.
«Me preocupa mucho que mientras en las tres capitales vascas y en las tres diputaciones forales gobiernan el PSE con el PNV, luego quien manda en España son Podemos y EH Bildu, como se ha visto en la última negociación parlamentaria en la que impusieron la derogación de la reforma laboral y en la que Otegi dijo claramente que eran decisivos porque el Gobierno se lo debía a ellos», ha concluido.
