DANA VALENCIA: Bomberos: «Es una zona de guerra»; «No estamos preparados para ello» ante «una corriente salvaje y brutal; agujeros y puentes caídos»

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FOTOGRAFÍA. CATARROJA (VALENCIA) COMUNIDAD VALENCIANA (REINO DE ESPAÑA, 31 DE OCTUBRE DE 2024. Vista general de varios vehículos dañados en Catarroja, tras las fuertes lluvias causadas por la DANA. Las redes, de nuevo más sociales que nunca; son otra vez el espejo de la desesperación y el sufrimiento, también de la solidaridad, que están desencadenando las lluvias torrenciales durante las últimas horas en varias comunidades autónomas. "07:28 horas. Hay un hombre muerto en mi casa. Necesito ayuda. Orba 10-19 de Benetússer. Estoy con dos niños y dos personas mayores. Una de ellas sin movilidad". Es el grito desesperado de una mujer que refleja la angustia que se vive en muchos lugares; el vídeo que acompaña su clamor muestra unas calles completamente arrasadas por el paso del agua. Pero el hilo que se sucede a continuación rebosa palabras de ánimo y de solidaridad. "No estáis solos"; "la ayuda va en camino"; "ánimo, mantened la calma"; responden los ciudadanos, que hasta se ofrecen y piden el teléfono para poder hablar y trasladar verbalmente esos mensajes de apoyo mientras llega la ayuda a decenas de lugares. Una Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA) tras fuertes lluvias torrenciales y golpear muy fuertemente al reino de España, con epicentro en la provincia de Valencia (Comunidad Valenciana) donde se ha registrado al 92 muertos y con menos dureza en la provincia de Málaga (Andalucía) y en la región de Castilla-La Mancha. La devastación de los efectos de la dana que arrasó este martes la provincia de Valencia deja decenas de personas fallecidas -70 contabilizadas hasta las 16.00 horas-, la angustia de quienes no pueden contactar con sus familiares desde ayer e imágenes desoladoras de la destrucción que han dejado a su paso las inundaciones. En medio de la tragedia, que ha llevado a activar el protocolo de Múltiples Víctimas para identificar a los fallecidos, las autoridades combaten este miércoles un "nuevo enemigo": los bulos que alertan de supuestas evacuaciones, desbordamientos o la caída del 112, que interrumpen la labor de los servicios de emergencias. La ciudadanía de la provincia ha recibido a primera hora de esta mañana de nuevo en sus móviles un mensaje del sistema Es-Alert para evitar cualquier tipo de desplazamiento por las carreteras de la provincia, muchas de cuales permanecen cortadas e impiden todavía acceder a las zonas más afectadas. Efe
FOTOGRAFÍA. CATARROJA (VALENCIA) COMUNIDAD VALENCIANA (REINO DE ESPAÑA, 31 DE OCTUBRE DE 2024. Vista general de varios vehículos dañados en Catarroja, tras las fuertes lluvias causadas por la DANA. Las redes, de nuevo más sociales que nunca; son otra vez el espejo de la desesperación y el sufrimiento, también de la solidaridad, que están desencadenando las lluvias torrenciales durante las últimas horas en varias comunidades autónomas. "07:28 horas. Hay un hombre muerto en mi casa. Necesito ayuda. Orba 10-19 de Benetússer. Estoy con dos niños y dos personas mayores. Una de ellas sin movilidad". Es el grito desesperado de una mujer que refleja la angustia que se vive en muchos lugares; el vídeo que acompaña su clamor muestra unas calles completamente arrasadas por el paso del agua. Pero el hilo que se sucede a continuación rebosa palabras de ánimo y de solidaridad. "No estáis solos"; "la ayuda va en camino"; "ánimo, mantened la calma"; responden los ciudadanos, que hasta se ofrecen y piden el teléfono para poder hablar y trasladar verbalmente esos mensajes de apoyo mientras llega la ayuda a decenas de lugares. Una Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA) tras fuertes lluvias torrenciales y golpear muy fuertemente al reino de España, con epicentro en la provincia de Valencia (Comunidad Valenciana) donde se ha registrado al 92 muertos y con menos dureza en la provincia de Málaga (Andalucía) y en la región de Castilla-La Mancha. La devastación de los efectos de la dana que arrasó este martes la provincia de Valencia deja decenas de personas fallecidas -70 contabilizadas hasta las 16.00 horas-, la angustia de quienes no pueden contactar con sus familiares desde ayer e imágenes desoladoras de la destrucción que han dejado a su paso las inundaciones. En medio de la tragedia, que ha llevado a activar el protocolo de Múltiples Víctimas para identificar a los fallecidos, las autoridades combaten este miércoles un "nuevo enemigo": los bulos que alertan de supuestas evacuaciones, desbordamientos o la caída del 112, que interrumpen la labor de los servicios de emergencias. La ciudadanía de la provincia ha recibido a primera hora de esta mañana de nuevo en sus móviles un mensaje del sistema Es-Alert para evitar cualquier tipo de desplazamiento por las carreteras de la provincia, muchas de cuales permanecen cortadas e impiden todavía acceder a las zonas más afectadas. Efe

Castellón (Comunidad Valenciana) Reino de España, jueves 31 de octubre de 2024 (Efe).- DANA VALENCIA | El sargento del Consorcio Provincial de Bomberos de València y jefe de intervención de la primera operación activada en Utiel, Juan Vicente Nadal, ha calificado el escenario en las carretas tras las graves inundaciones: «Nadie había vivido algo así en 50 años»; «no se esperaba nadie»; «no estamos preparados para ello»; «son unas zonas de guerra» con «agujeros, pavimento dañado, puentes caídos» y ha relatado la dificultad de los múltiples rescates ante una corriente «salvaje y brutal».

En declaraciones a Efe, Juan Vicente Nadal, que está destinado en el parque de Requena, ha pedido encarecidamente que no se hagan desplazamientos por carretera hacia Valencia «que no sean de vida o muerte».

El sargento ha podido regresar hoy a Faura, su municipio natal, con muchas dificultades y después de permanecer en la zona cero de las inundaciones desde el martes cuando saltó la emergencia.

Estaba de guardia y comenzaron a recibir avisos «uno detrás de otro». Se desplazaron hacia Utiel donde peligraban especialmente las casas situadas junto al río Magro, en las que vive sobre todo gente mayor, mucha de la cual perdió la vida. Los bomberos rescataron sus cuerpos dentro de sus domicilios.

Los rescates se realizaban «conforme podíamos» porque la corriente «era salvaje y brutal». «A los que estaban en primeras plantas les decíamos que se quedaran ahí, que era donde mejor estaban», relata.

Con la colaboración altruista de vecinos se pudo ir rescatando a gente con palas excavadoras, con las que se iba «cuadriculando calles» en busca de gente en peligro, pero «había muchos puntos a los que no se podía acceder ni quiera con estos vehículos pesados por la fuerza del agua» y «en ningún caso se podía poner en peligro la vida de más gente».

La gente del pueblo, relata, «estaba muy nerviosa, pedían a gritos que se les rescatara». Poco a poco fueron desplazando a los rescatados hasta el restaurante el Tollo, que dejó sus instalaciones para que se acomodaran y les proporcionaron agua, mantas y comida.

«Hicimos lo que pudimos», dentro de la extrema gravedad, asegura. Los equipos de rescate se vieron «totalmente desbordados» con «gente chillando pidiendo auxilio» ante el miedo de que el nivel del agua, que ya había alcanzado al primer piso, siguiera subiendo.

Sin embargo, por suerte, el agua subió muy rápido pero también descendió con gran velocidad ya que circuló por una rambla, su salida natural, de manera desbordada.

La situación, añade, «es apocalíptica, muy grave» «nadie había vivido algo así en 50 años». Ocurrió algo que «no se esperaba nadie» y, lamenta, «no estamos preparados para ello».

Sobre las carreteras afectadas, especialmente la A3 y tramos de la AP7, el sargento asegura que son una «zona de guerra», con «agujeros, pavimento dañado, puentes caídos»… Y por ello pide que solo se realicen los desplazamientos estrictamente necesarios porque «la gente puede quedarse atrapada en esas carreteras y se necesita que estén libres para la circulación de los servicios de emergencia» y además «no se debe ocasionar ningún rescate más por estos desplazamientos».

La situación, añade, «es apocalíptica, muy grave», por todos lados. «Hay vehículos averiados» por doquier y la situación no volverá a ser medianamente normal en semanas, apunta.

Actualmente hay numerosos efectivos de la UME, ha explicado, que continúan buscando desaparecidos y que se afanan en limpiar viales, especialmente para hacerlos útiles para el acceso de los servicios de emergencias.

Y recuerda que en Utiel y en Requena «no funciona nada», ni teléfono ni internet, apunta, por lo que pide que solo se desplace la gente en esa zona para buscar comida o comprobar el estado de familiares que no estén localizados.