Efe.- Madrid (España), martes 12 de julio de 2022. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado la creación de un impuesto temporal que gravará los beneficios extraordinarios de los bancos obtenidos por el aumento de los tipos de interés, así como la gratuidad de los abonos de cercanías y media distancia de Renfe de septiembre a diciembre.
El impuesto se aplicará sobre los ejercicios 2022 y 2023 a las entidades con ingresos superiores a 1.000 millones de euros y se estima que recaudará 1.500 millones por cada año, según ha avanzado el presidente este martes durante su intervención en el debate sobre el estado de la nación.
Este tributo se suma al ya anunciado el pasado 25 de junio para las grandes empresas energéticas (eléctricas, gasistas y petroleras), que en este caso gravará los beneficios extraordinarios derivados del alza de los precios de la energía.
Hoy se ha concretado que el impuesto a las energéticas también se aplicará sobre los ejercicios 2022 y 2023 a las empresas con ingresos de más de 1.000 millones, con una recaudación estimada de 2.000 millones por cada año.
La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha explicado que ambos impuestos se tramitarán en el Parlamento en septiembre a través de sendas proposiciones de ley de PSOE y Unidas Podemos, y que el Gobierno vigilará que las empresas no repercutan su coste a los clientes.
En total ambos impuestos ingresarán 7.000 millones en 2023 y 2024 con los que se podrán financiar las medidas de gasto puestas en marcha para aliviar el impacto de la guerra de Ucrania a los colectivos y sectores más vulnerables.
De forma más general, el presidente ha pedido a las grandes empresas que reviertan sus beneficios extraordinarios en trabajadores y consumidores, porque «es el momento de probar su compromiso social», de manera que lo ganado indirectamente por el alza de los precios «no engorde la cuenta de resultados ni los sueldos de los directivos».
ABONOS DE RENFE GRATIS Y COMPLEMENTO A LAS BECAS
Sánchez ha anunciado la gratuidad de los títulos multiviaje y abonos mensuales de los servicios ferroviarios de cercanías, rodalíes y media distancia prestados por Renfe para el período comprendido entre el 1 de septiembre y 31 de diciembre de este año.
También habrá una ayuda complementaria de 100 euros mensuales entre septiembre y diciembre para un millón de estudiantes mayores de 16 años que ya disfrutan de una beca «para que nadie abandone sus estudios por motivos económicos».
«El gran reto que tiene España es la inflación, una enfermedad económica grave que nos empobrece a todos», ha dicho Sánchez, que ha asegurado que el Gobierno es consciente de las dificultades que suponen unos precios cada vez más caros, que dificultan cuestiones que ya eran difíciles, como pagar la hipoteca o el alquiler, tener hijos, sacar adelante un negocio o intentar ahorrar.
Ha incidido en que la elevada inflación es un problema global, consecuencia de la guerra y de los problemas de escasez de suministros por el parón de actividad de la pandemia, frente al que el Gobierno aplica soluciones «realistas» y no las recetas «falsas, engañosas o injustas» que a veces se plantean desde la oposición.
El presidente ha reconocido que la economía española se comportará en los próximos trimestres peor a lo esperado, aunque todo dependerá de cómo evolucione la guerra y de si Rusia cierra completamente el suministro de gas a Europa.
Por ello ha considerado necesario favorecer el ahorro energético, con lo que desde el Ejecutivo se promoverá el teletrabajo y se recomendará rebajar la temperatura de la calefacción y subir la del aire acondicionado para un uso más eficiente de la energía.
En este sentido, ha anunciado que se desplegará el autoconsumo en edificios públicos con un plan dotado con 200 millones, en tanto que «en breve» se aprobará la ley de movilidad sostenible y una nueva ley de industria.
