Lasvocesdelpueblo y Agencias – El portavoz del Gobierno de la Nación, Íñigo Méndez de Vigo, ha afirmado este viernes que la cumbre por el referéndum antiespañol que el presidente del gobierno autonómico español en Cataluña, Carles Puigdemont Casamajó, ha convocado para el próximo 23 de diciembre 2016 es un «síntoma de unilateralidad» fruto de una exigencia los «radicales de CUP. Fotografía: Presidencia del Gobierno de España, La Moncloa, Madrid – 09.12.2016. El ministro de Educación, Cultura y Deportes y portavoz del Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo, durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. Lasvocesdelpueblo.
Según Méndez de Vigo, a pesar de esta decisión del presidente secesionista, los ciudadanos catalanes valorarán «quién está por el diálogo y que está sentado en la unilateralidad».
En este marco, reiteró la petición para Puigdemont asista a la cumbre de Presidentes que Rajoy convocará para principios de año. «Al gobierno se le hace muy raro que el presidente de una comunidad autónoma –española–, la que sea, no acuda», dijo, porque «parece como si no le interesaran los problemas de la gente corriente».
Méndez de Vigo ha hecho estas manifestaciones en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros después de que Puigdemont haya convocado en encuentro que reunirá a los partidos separatistas y colectivos antiespañoles catalanistas miembros de la plataforma xenófoba Pacto Nacional por el Derecho a Decidir y de que el vicepresidente del gobierno autonómico, Oriol Junqueras Vies, haya advertido que la fecha del referéndum se puede avanzar si el gobierno español «precipita decisiones en contra de las instituciones de Cataluña».
El portavoz del Gobierno ha evitado el choque con el gobierno separatista en Cataluña y ha apuntado que la convocatoria de la cumbre es fruto de una exigencia de la CUP y contrasta con «la actitud de mano tendida» que el gobierno español ha demostrado en los últimos días «con todas las fuerzas catalanas», en referencia a las reuniones que la vicepresidenta del gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha mantenido esta semana con Miquel Iceta y Inés Arrimadas en Barcelona.
«Espero que los catalanes vean quién está por el diálogo y quién está sentado por la unilateralidad, pero el gobierno continuará sentado en esta política de diálogo, que es lo que importa», dijo Méndez de Vigo.
Según el ministro, más allá del referéndum hay una «amplio campo de diálogo» para abordar con la Generalitat, como por ejemplo los presupuestos y el Estado, el FLA, la financiación autonómica o las inversiones, así como «la idea de pedir el gobierno (catalán) que no apruebe leyes que son manifiestamente inconstitucionales».
La Presidencia de la patria ve difícil que las reuniones se puedan celebrar antes de la Navidad
El ministro explicó también que a lo largo de la reunión del Consejo de Ministros de este viernes la vicepresidenta española ha pedido a todos los miembros del gobierno de Rajoy que intensifiquen sus contactos con los partidos políticos en Cataluña.
Asimismo, fuentes del Gobierno de la Nación ven ya difícil que las reuniones previstas entre Mariano Rajoy y Carles Puigdemont, por un lado, y Soraya Sáenz de Santamaría y Oriol Junqueras, por otro, se puedan celebrar antes de Navidad.
Ausencia de Puigdemont en la cumbre de presidentes
Para Méndez de Vigo, Mariano Rajoy ya ha iniciado los contactos con algunos presidentes autonómicos para la Conferencia de Presidentes que quiere celebrar a principios de año en el Senado, y en la que el presidente del gobierno separatista, Carles Puigdemont, ya ha dicho que no asistirá.
Méndez de Vigo ha criticado esta decisión claramente separatista que segrega al resto de catalanes contrarios al odio de Juntos Por El Sí JxSí y la CUP.
«Todos están invitados y al gobierno le gustaría que Puigdemont asistiera porque se abordarán temas que preocupan a la gente», apuntó.
En este sentido ha insistido en que su Ejecutivo «se le hace muy raro que el presidente de una comunidad autónoma –española–, la que sea, no acuda, porque hay temas educativos, la tarjeta sanitaria, muchas cosas que preocupan a la gente, y parece extraño que un presidente no acuda esta cita».
«Parece como si no le interesaran los problemas de la gente corriente», sentenció el portavoz del Gobierno del Reino de España.
