El perfil de los delincuentes viales en España: «Español, soltero de entre 18 y 45 años, con estudios de Primaria y baja capacidad económica»

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FOTOGRAFÍA. KM 17 DE A376 ULTRERA (SEVILLA) ESPAÑA, Imagen que muestra el vehículo en el que viajaba el futbolista Antonio Reyes. Efe
FOTOGRAFÍA. KM 17 DE A376 ULTRERA (SEVILLA) ESPAÑA, Imagen que muestra el vehículo en el que viajaba el futbolista Antonio Reyes tras el accidente mortal que ha sufrido este sábado en el kilómetro 17 de la A376, en la provincia de Sevilla. Efe

Efe – Español, soltero, de entre 18 y 45 años, con estudios de Primaria y baja capacidad económica. Es el perfil de los delincuentes viales, que, en su mayoría, han perdido todos los puntos del carné por ponerse al volante tras haber consumido drogas y que alguna vez han sufrido accidentes de tráfico. Madrid (España), jueves 15 de abril de 2021.

Un perfil que este jueves han explicado la profesora de la Universidad Europea de Valencia Cristina Escamilla, dentro de las jornadas que comenzaron el martes sobre el tratamiento penitenciario organizadas por la Universidad Pontificia de Comillas y la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias.

Para hacer este estudio, su autores han analizado a los condenados a penas alternativas a la prisión por delitos con la seguridad del tráfico, que el año pasado alcanzaron una cifra superior a los 28.000.

Mientras, según fuentes penitenciarias, algo más de 1.300 presos cumplen condena en las cárceles por este tipo de delitos, de los que casi 1.100 están internos en prisiones dependientes de la administración central y el resto en Cataluña.

Y en ese perfil de los condenados a penas alternativas a la cárcel, el informe destaca que tres de cada cuatro conduce a diario, pero el 25 por ciento no tiene carné.

La mayoría conducía un turismo en el momento de ser detenido y más de la mitad (un 53 por ciento) había sufrido más de un accidente con anterioridad al delito perpetrado.

Aún así, resalta el estudio, casi todos se consideran buenos conductores, incluso respetuosos con el tráfico, y no creen que deban mejorar su estilo de conducción.

No lo consideran así pese a que a casi la mitad de los condenados a esas penas alternativas a la cárcel ya le habían detraído puntos de su permiso previamente a cometer el delito, y casi un tercio (un 31 %) había perdido la vigencia del carné por la detracción total de los puntos.

La mitad de los puntos que perdieron fue por haberse puesto al volante bajo los efectos de las drogas.

Un tercio eran reincidentes en delitos viales y un 11 por ciento tenía condenas previas por violencia doméstica, mientras que a un 35 por ciento se las habían impuesto por otras tipologías delictivas.

Según el estudio, y en relación al consumo de sustancias tóxicas, cuatro de cada diez detenidos por delitos contra la seguridad vial presentan consumos problemáticos de alcohol y un 28 por ciento consumos nocivos de otras drogas.

El estudio hace referencia también al perfil psicológico y concluye que los delincuentes viales tiene una baja percepción de miedo ante situaciones de riesgo y sus posibles consecuencias, tanto para sí mismos como para terceras personas.

Respecto a la motivación para delinquir, los que tienen condenas más cortas apuntan de forma mayoritaria a esa escasa percepción de riesgo. Los que tienen penas más largas, por su parte, señalan como principal motivación la sensación de impunidad.

Una de las conclusiones del estudio afecta al trabajo que se realiza en el ámbito de las penas y medidas alternativas a la prisión con este tipo de delincuentes.

De ese modo, el estudio pone de manifiesto que la reincidencia es mucho menor cuando los penados se someten a los programas de reinserción o talleres que cuando su condena son trabajos en beneficio de la comunidad.

En el caso del taller –que se comparó con penados a menos de 60 jornadas de trabajos en beneficio de la comunidad- la reincidencia es dos puntos menor.

La última de las tres jornadas sobre el tratamiento penitenciario ha analizado el programa SerMujer.es, destinado al empoderamiento femenino, por el que ya han pasado cerca de 2.000 internas.

Gracias a la evaluación del programa, según han indicado el profesor de Sociología de la UNED Antonio Viedma y Paloma Martín, de la cárcel de Mujeres de Alcalá, se descubrió que más del 75 por ciento de las mujeres que llegan a un centro penitenciario reconoce que ha sido víctima de violencia machista.

Además, el 30 por ciento de ellas cree que todavía es acosada aun en la cárcel, y el 68 por ciento reconoce que ha sufrido violencia sexual.