El rey da tiempo a Sánchez tras su investidura fallida

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FOTOGRAFÍA. PALACIO REAL DE ESPAÑA (MADRID) ESPAÑA, 26.07.2019. El Rey recibe a la presidenta del Congreso de los Diputados, Meritxell Batet, tras la fallida investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno, este viernes en el Palacio de La Zarzuela. Efe.

Efe – El rey no iniciará «por el momento» nuevas consultas con los partidos tras la investidura fallida de Pedro Sánchez y les da tiempo para constatar si más adelante es posible proponer un candidato que cuente con los apoyos necesarios o, de lo contrario, se convocarían unas nuevas elecciones. Madrid (España), viernes 26 de julio de 2019.

Esta decisión del rey ha sido hecha pública en un comunicado de la casa real difundido tras la reunión que el jefe del Estado ha mantenido en el Palacio de la Zarzuela con la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, y en la que esta le ha comunicado oficialmente la investidura fallida de Pedro Sánchez.

Felipe VI ha trasladado a Batet que no iniciará ahora nuevas conversaciones con los representantes de los partidos «de manera que las formaciones políticas puedan llevar a cabo las actuaciones que consideren conveniente a los efectos de lo previsto en el artículo 99 de la Constitución», que es el que regula el procedimiento de elección del jefe del Gobierno.

El rey, que ha pedido a Batet que traslade esta decisión a los diversos partidos, mantendrá un contacto «regular y permanente» con la presidenta del Congreso en relación con el procedimiento que regula ese artículo constitucional a los efectos de convocar nuevas consultas.

Eso supone, según Zarzuela, que si se le trasladara que hay un candidato que podría contar con la mayoría necesaria, podría convocar esas consultas en cualquier momento.

«En todo caso y antes de que finalice el plazo constitucional de dos meses desde la primera votación de investidura, Su Majestad el Rey realizará nuevas consultas», añade el comunicado

Unas consultas con la finalidad de constatar si, de la disposición que le trasladen los representantes de los grupos políticos con representación parlamentaria, puede proponer un candidato que cuente con los apoyos necesarios o, de lo contrario, se convocarían nuevas elecciones.

El plazo límite para la elección de un presidente y, en consecuencia, evitar la convocatoria de unos nuevos comicios, es el 23 de septiembre, justo dos meses después de la primera votación de investidura fallida de Pedro Sánchez.

La próxima ronda que abra el rey con los partidos, bien sea para proponer un candidato o para constatar que las elecciones son inevitables, será la séptima que protagonice en sus cinco años de reinado.

Sus primeras elecciones generales como jefe del Estado se celebraron el 20 de diciembre de 2015, y la primera ronda de contactos se desarrolló entre el 18 y el 22 de enero de 2016.

Tras esas consultas, el entonces presidente del Gobierno en funciones y líder del PP, Mariano Rajoy, declinó la propuesta del rey de someterse a la investidura al no contar con los apoyos suficientes. En consecuencia, el jefe del Estado inició una segunda ronda que abarcó del 27 de enero al 2 de febrero.

Al final de la misma la designación en esta ocasión fue para Pedro Sánchez, quien se sometió a una sesión de investidura que concluyó el 4 de marzo sin lograr su objetivo.

De ahí que Felipe VI tuviera que convocar una nueva ronda, la tercera, el 25 y 26 de abril, en la que se evidenció que nadie concitaba el consenso necesario para ser elegido presidente. Esa situación llevó a la repetición de las elecciones el 26 de junio y a la apertura de la XII legislatura.

Pero tampoco fue fácil. El rey lo comprobó en la que fue su cuarta ronda de consultas, celebrada entre el 26 y el 28 de julio y tras la que en esta ocasión Rajoy sí aceptó someterse a la investidura.

Una sesión que concluyó el 2 de septiembre sin que lograra la mayoría necesaria para obtener la confianza del Congreso. Más de mes y medio dio el rey para que los partidos intentasen llegar a algún tipo de acuerdo.

Sólo se abrió la posibilidad de una investidura tras la crisis vivida por el PSOE que derivó en la salida de Pedro Sánchez como su secretario general ante las voces que defendían una abstención que permitiera a Rajoy renovar su mandato.

El 23 de octubre el Comité Federal socialista decidió esa abstención y, al día siguiente, el rey inició la quinta ronda de consultas, que duró dos días. Tras ella, Felipe VI propuso de nuevo a Rajoy para la investidura, que consiguió el 29 de octubre.

La sexta ronda de consultas, correspondiente a las elecciones generales del 28 de abril, la inició el pasado 5 de junio y concluyó con la propuesta de candidatura de Sánchez que este jueves ha resultado fallida.