Barcelona (Cataluña) Reino de España, domingo 18 de marzo de 2025 (Javi Martínez Onsalo –@javionsalo-).- Cuando la exsecretaria general del Grupo Parlamentario de VOX en el Congreso de los Diputados y excandidata de VOX a la Junta de Andalucía, Macarena Olona Choclán, se fue de VOX, seguí admirándola pese a no estar entre nosotros, incluso fui a verla a una charla que hizo en Murcia dos meses después de su salida. Entendí que podía haber razones de su salida que se me escaparan y simplemente la seguí respetando.
Hasta que empezó a decir todo lo contrario de lo que defendía y se le empezó a ir la pinza, atacando al proyecto que la había llevado a la cima por soberanas chorradas y contradiciendo la línea argumental que había hecho que muchos la admiráramos. Fue la suma de todas estas contradicciones y la llegada de rumores que resultaron ser ciertos lo que hizo que muchos dejáramos de admirarla para decir que estaba majareta. Amen de su partido con logo de lupanar.
Algo parecido pasó con el portavoz del grupo Parlamentario de VOX en el Congreso de los Diputados, Iván Espinosa de los Monteros y de Simón, un tío que había sido excelente, de lo mejor que había pasado nunca por el Congreso de los Diputados, y que como os he contado alguna vez, llegó a ser mi favorito, sentía una admiración insuperable por él, por lo bien que hablaba, por la cantidad de datos que tenía en su privilegiada cabeza y por la oposición férrea que le hacía al bipartidismo.
A su salida, lo seguí admirando y seguí defendiéndolo en público, deseando que volviera y no entendiendo lo que había pasado. Pero pasó el tiempo y empezaron a venir las fotos raras, las pullitas, las omisiones misteriosas, los cambios de discurso y ya en los últimos tiempos los cambios totales de rumbo y de opinión, la traición a sus principios y los compadreos con el enemigo… unido todo esto a una serie de ridículos continuos que han manchado su figura y que han hecho que caiga muy bajo para los que hemos seguido su trayectoria. Por no hablar de la razón por la que salió, algo que cada vez conoce más gente y que a nadie que se entera, como fue mi caso, deja indiferente. Ahí empezaron mis reproches contra él, y no tardó en bloquearme. (Agradezco en eso al menos a Macarena, que por cierto parece estar recuperando aunque sea un 5% de su cordura, que nunca me quitara el follow).
Nunca he sido un sectario ni he señalado con el dedo a nadie a quién haya admirado previamente por el hecho de salir de VOX, si alguien me echa en cara que es que la gente que antes me caía bien me deja de resultar respetable en cuanto salen de mi partido, simplemente miente. Yo no soy así y los que me leéis lo sabéis. Respeto las razones personales que pueda llevar a cada uno a desvincularse total o parcialmente del proyecto en el que creo y no me ensaño con nadie que lo haga.
Soy el primero que sabe que también hay gente válida fuera de VOX (aunque esto no quiere decir que estén ni en el PP ni en el PSOE), y que ni yo ni nadie de aquí (ni de ningún lado) tiene la verdad absoluta.
En resumen, respeto las desavenencias que la gente tenga con VOX aunque yo sepa que es el único que puede cambiar España.
Ahora bien, dicho esto, lo que no he tolerado nunca ni voy a respetar (ni yo ni la mayoría de mis compañeros), es que la gente que sale de VOX demuestre con su salida que no eran lo que defendían, que cambien sus principios, que compadreen con el enemigo y que ataquen, de manera más verdulera como Macarena Olona Choclán, o más sibilina como Iván Espinosa de los Monteros y de Simón, al único proyecto que, objetivamente, sigue defendiendo las mismas cosas que esa gente defendía antes de pillar un berrinche personal, y gracias al cual esas personas son quienes son. Una cosa es no ser un sectario, y otra cosa es callarse ante las indecencias y ser un desleal.
Cuando Olona se fue de VOX, seguí admirándola pese a no estar entre nosotros, incluso fui a verla a una charla que hizo en Murcia dos meses después de su salida. Entendí que podía haber razones de su salida que se me escaparan y simplemente la seguí respetando.
Hasta que empezó… pic.twitter.com/u5vaVYp0SX
— Javi Martinez Onsalo (@javionsalo) March 17, 2025
