Javi Guerra y Kevin López brillan en la jornada inaugural Mundial de Pekin

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EFE – El segoviano Javi Guerra, decimotercero en el maratón, y el sevillano Kevin López, por primera vez en las semifinales de 800, brillaron en la primera jornada de los Mundiales, oscurecida por el presunto nuevo positivo de la vallista Josephine Onyia, que no viajará a Pekín.

De confirmarse, el positivo apartará definitivamente del atletismo a la atleta de origen nigeriano, que ya había sido cazada tres veces en controles de dopaje y ha estado cuatro años suspendida por ese motivo.

Guerra y López pusieron la nota positiva en el equipo español, que alineaba a nueve atletas en la jornada inaugural.

Saliendo con un exceso de precaución, según confesó al final, el segoviano, temeroso del calor (26 grados) y la humedad de Pekín (78 por ciento), sólo apretó mediada la carrera y aún así mejoró dos puestos con respecto a su notable resultado de Moscú 2013: decimotercero con un tiempo de 2h16:59.

«El objetivo está cumplido una vez más, que era quedar entre los 15 primeros y ser el primer español, así que ya tengo el pasaporte para Río», comentó Javi Guerra tras la carrera.

Su compañero el barcelonés Carles Castillejo reconoció que pasó un verdadero «calvario» antes de abandonar por el km 25. «Llevo dos campeonatos en verano, los Juegos y aquí, que los avituallamientos me caen mal, no sé por qué. En invierno no me pasa. Ha sido un calvario», explicó en declaraciones a Efe.

López, plusmarquista español de 800, se clasificó por primera vez para las semifinales de unos Mundiales al terminar tercero, echando mano de su esprint, en la cuarta serie con un tiempo de 1:46.06.

El sevillano estaba tercero al toque de campana. Luego cedió dos puestos en la última curva, pero sacó a relucir su buen remate para ganar plaza directa en semifinales, a las que accedían los tres primeros de cada serie. En sus dos experiencias anteriores (Daegu 2011 y Moscú 2013), había caído en primera ronda, igual que en su única experiencia olímpica (Londres 2012).

Los tres obstaculistas se despidieron en las series. El jiennense Sebastián Martos, campeón de España, el leonés Roberto Alaiz -lesionado en el tendón de aquiles- y el madrileño Fernando Carro dejaron a España, quinta potencia mundial de la especialidad por sus resultados en Mundiales, fuera de la final.

Martos fue octavo con 8:0.20 en la primera serie, el puesto teórico que le tocaba por marcas de la temporada; Carro también retrocedió al final de su serie (séptimo con 8:38.05, más rápido que el vencedor de la primera, pero sin opción de repesca) y Alaiz abandonó -dijo- por problemas en el tendón de aquiles.

Los dos lanzadores también se despidieron. En peso, la murciana Úrsula Ruiz admitió que «la pesadilla continúa». Su marca de 16,36 metros la dejó muy lejos de la final. «Estoy en buena forma física, pero los problemas técnicos arruinan los resultados», explicó.

En martillo el extremeño Javier Cienfuegos corrió igual suerte. El de Montijo, que hace dos años llegó a lanzar 76,71, corrió la misma suerte que en los tres Mundiales anteriores: en ninguno ha podido meterse en la final. Empezó con 69,38 metros, continuó con 68,37 y se despidió del torneo con su mejor lanzamiento, 70,96, que le situó vigésimo noveno.

El pamplonés Adrián Valles, en busca de la final de pértiga, completará en la sesión vespertina la actuación española en la primera jornada de los Mundiales.