Lasvocesdelpueblo y Agencias.- Madrid (España), miércoles 12 de enero de 2022. El ex comisario de Policia Nacional, José Manuel Villarejo, ha asegurado que tiene «pruebas sobre el papel del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) en los atentados terroristas yihadistas del pasado 17 de agosto de 2017 (17A) en Cataluña».
En declaraciones a los medios, aseguró que estas «pruebas» están en sus «archivos y notas», que afirmó que están «bajo secreto» y por eso pidió que se pueda acceder a ellos y sean públicos.
«La prueba más evidente de todo es que no me quieren dar todos mis archivos», ha manifestado.
Por otra parte, insistió en la implicación del CNI en el 17-A, asegurando que cuando dice que se quiso dar un susto no significa que se quisiera provocar un atentado como el que tuvo lugar, pero sí «dar el apariencia de riesgo» para que los catalanes «sentiera la necesidad de protección» del resto de España ante la amenaza del golpe de estado separatista del 1 de octubre de 2017 (1-O), a un mes y medio de los atentados yihadistas.
Villarejo criticó el «mantra» sobre que no aporta pruebas y insistió en que tiene, pero que no puede acceder a ellas.
«Si quieren pruebas, vayan a mis archivos y notas informativas, miren lo que tengo», ha reiterado el excomisario del Cuerpo Nacional de Policía de España.
En este sentido, ha llamado a dejar de tratar a la ciudadanía como «menor de edad» y de utilizar la ley de secretos, una norma «franquista y obsoleta».
El excomisario volvió a plantear las dudas sobre el papel del imán de Ripoll, de quien recordó que fue detenido por tráfico de drogas y tuvo el teléfono pinchado en relación al atentado del 11-M.
En este sentido, ha afirmado que él ya había alertado sobre esta situación.
Sobre el papel del CNI, ha dicho que muchas veces ha provocado «comandos ficticios» y ha añadido que «en absoluto» la intención sería la de provocar un atentado como el del 17 de agosto del 2017 sino dar un «susto», como ya dijo este martes.
Ha añadido que esto «se le fue de las manos» cuando murió el imán de Ripoll y los «pequeños juguetes», en alusión a los jóvenes que cometieron el atentado, no supieron «cómo reaccionar».
El excomisario afirmó también que la verdad judicial muchas veces «no es la verdad».
