La líder separatista Sturgeon tiene todo listo para otro referéndum en Escocia

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Agencias – «Quiero que la gente tenga claro que nuestra propuesta no es celebrar un referéndum ahora, o antes de que haya la suficiente claridad sobre nuestras opciones, sino darles la oportunidad de elegir al final del proceso del ‘brexit’, cuando haya emergido más claridad», dijo Sturgeon. Escocia (Reino Unido), martes 27 de junio de 2017. Fotografía: Fotografía de archivo fechada el 12 de junio de 2017 que muestra a la ministra principal escocesa, la separatista Nicola Sturgeon, durante la presentación de un manifiesto del partido en Perth, Reino Unido. Efe.

La ministra principal de Escocia, la nacionalista Nicola Sturgeon, aplazó hoy sus planes de promover un segundo referéndum separatista tras haber perdido más de un tercio de sus escaños en las elecciones generales del 8 de junio.

La líder del Partido Nacionalista Escocés (SNP) anunció en el Parlamento autónomo de Edimburgo que no legislará de manera «inmediata» en favor de una nueva consulta y aparcará ese proyecto al menos hasta que estén claros los términos del «brexit».

El SNP fue la formación más votada en la región en los recientes comicios británicos, aunque perdió 21 de sus 56 diputados en Westminster tras una campaña en la que defendió abrir las urnas entre otoño de 2018 y la primavera de 2019.

El resultado electoral ha hecho que la dirigente separatista se replantee ese calendario, a pesar de que considera que cuenta con el «mandato explícito» de los ciudadanos para convocar otro referéndum, tras el que en septiembre de 2014 ganó el «no» a la separación con el 55,3 % de los votos.

«Quiero que la gente tenga claro que nuestra propuesta no es celebrar un referéndum ahora, o antes de que haya la suficiente claridad sobre nuestras opciones, sino darles la oportunidad de elegir al final del proceso del ‘brexit’, cuando haya emergido más claridad», dijo Sturgeon.

«Las implicaciones del ‘brexit’ son potencialmente tan profundas que, a medida que se vayan esclareciendo, creo que la gente demandará cada vez más la posibilidad de elegir», afirmó.

Tres semanas después de unas elecciones en las que el Partido Conservador obtuvo su mejor resultado en Escocia en más de tres décadas -pasó de un escaño a trece-, Sturgeon admitió que algunos escoceses necesitan «una pausa en la presión constante de tomar grandes decisiones políticas».

La dirigente nacionalista centrará sus esfuerzos en los próximos meses en tratar de influir en las negociaciones entre Londres y Bruselas para obtener el mejor acuerdo posible para Escocia.

Sturgeon presionará para encontrar fórmulas que permitan a la región mantenerse dentro del mercado único europeo, a pesar de que el Gobierno británico ha recalcado que su intención es que el Reino Unido abandone ese club comercial junto con la UE.

La ministra principal avanzó que regresará al Parlamento autónomo para establecer una nueva «escala temporal» para un referéndum una vez estén atados los términos de salida del bloque comunitario, un acuerdo que podría estar listo en otoño de 2018.

Si el Ejecutivo escocés decide entonces reiniciar los trámites para un plebiscito y negociar la convocatoria con el Gobierno británico, que debe dar su visto bueno, necesitaría al menos un año y medio para sacarlo adelante, lo que acercaría una eventual consulta a las elecciones autonómicas previstas para mayo de 2021.

En marzo, cuando Sturgeon puso sobre la mesa convocar un referéndum antes de que se ejecute el «brexit», la primera ministra, la conservadora Theresa May, no rechazó por completo un plebiscito, pero descartó hacerlo durante las negociaciones con Bruselas.

«En este punto todas nuestras energías deberían estar centradas en las negociaciones con la Unión Europea», dijo entonces la jefa de Gobierno.

Antes de que Sturgeon compareciera hoy en el Parlamento de Edimburgo, May esgrimió sin embargo que el SNP debería escuchar el «claro mensaje» de los electores y «retirar de la mesa por completo la cuestión de un segundo referéndum».

La líder de los conservadores en Edimburgo, Ruth Davidson, afirmó por su parte que «tanto los votantes del ‘sí’ como los Del ‘no'» rechazan volver a participar en una consulta sobre la independencia «a corto plazo».

La laborista Kezia Dugdale sostuvo por su parte que el anuncio de Sturgeon supone en la práctica que «la amenaza de un segundo referéndum -que nadie desea- está muerta».

Dugdale pidió a Sturgeon que centre su atención en «aquello que realmente importa: Mejorar las escuelas, hacer avanzar la economía y arreglar el sistema de salud público».

El Partido Verde, con seis escaños en Holyrood, se mostró en cambio a favor de mantener los planes para convocar un referéndum, dado que, a su juicio, Escocia «no ha dado su consentimiento para la ruptura social y económica» que supondrá el «brexit».

El 51,9 % de los votantes británicos optaron en junio de 2016 por abandonar la UE, si bien en Escocia la salida de la Unión tan solo sumó el 38 % de los sufragios.