Agencias – Las primeras autoridades navarras, representantes de los partidos, víctimas del terrorismo y ciudadanos se han reunido esta mañana en Pamplona para rendir un homenaje al que concejal del PP en San Sebastián Gregorio Ordóñez, asesinado por los terroristas de la banda asesina vasca ETA hace 21 años. Pamplona, 24 enero 2016. Fotografía: Las primeras autoridades navarras, representantes de los partidos, víctimas del terrorismo y ciudadanos se han reunido esta mañana en Pamplona para reunir un homenaje al que concejal del PP en San Sebastián Gregorio Ordóñez, asesinado por ETA hace 21 años. Efe.
El acto en el Monumento a las Víctimas del Terrorismo ha sido convocado por el PP de Navarra, y al mismo han asistido, entre otros, las presidentas del Gobierno y el Parlamento foral, Uxue Barkos y Ainhoa Aznárez; el presidente de UPN, Javier Esparza; el portavoz parlamentario de Geroa Bai, Koldo Martínez; la secretaria general de Podemos, Laura Pérez; y el presidente del PSN, Fabricio Potestad.
Junto a ellos han asistido y protagonizado la ofrenda floral la viuda de Julián Embid y la abuela de Diego Salvá, policías nacionales asesinados por ETA en Navarra (2003) y Mallorca (2009); un nieto de Alberto Toca, director de la Mutua Asepeyo al que la banda terrorista mató en Pamplona en 1982; y Paz Prieto, hija del que fuera jefe de la Policía Foral asesinado en 1981.
A todos ellos ha agradecido su presencia el presidente del PP en Navarra, Pablo Zalba, una asistencia, ha dicho, «que dice mucho de ellos y a nosotros nos emociona». Tras comentar, en declaraciones a los periodistas, que la viuda de Ordóñez le ha escrito una carta excusando su presencia física en el acto aunque «están hoy aquí», Zalba ha recordado que el concejal popular fue «un activista de la democracia, un defensor de la libertad y un defensor de los derechos humanos» y «precisamente por eso lo asesinaron de forma vil y cobarde».
Una figura que «hoy más que nunca hay que reivindicar» ante un contexto político «difícil, en el que hacen falta más políticos con esa garra y esa gallardía que tenía Goyo», ha señalado, y ha añadido que éste era también «un homenaje a todas las víctimas de ETA» puesto que todas permanecen «vivas en la memoria».
La presidenta de Navarra, Uxue Barkos, ha comentado por su parte que en «la búsqueda de la paz, la convivencia y la reconciliación hay que mantener viva la llama de la memoria» y por ello el Gobierno, a través de ellas y del director general de Paz y Convivencia, «ha querido sumarse» a este «encuentro de instituciones, familiares y ciudadanos».
En la misma línea, la presidenta del Parlamento, Ainhoa Aznárez, ha valorado los homenajes y reconocimientos a personas que «han trabajado desde sus ideas para seguir avanzado en el país», por lo que ha precisado que éste era un momento de «reconocimiento y cercanía», de «reparación y memoria para así avanzar en la convivencia que tanto deseamos».
