Maduro denuncia «la campaña de odio que hay contra Donald Trump»

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El jefe de Estado de Venezuela, Nicolás Maduro. Archivo Efe

Agencias – Maduro dice que Trump no puede ser «peor» que Obama y se mantiene expectante. «Hay que esperar, sobre el presidente Donald Trump los grandes medios internacionales han especulado mucho y nos sorprende la campaña de odio que hay contra Donald Trump, brutal, en el mundo entero, en el mundo occidental y en los Estados Unidos». Caracas (Venezuela), lunes 16 de enero de 2017. Fotografía: El jefe de Estado de Venezuela, Nicolás Maduro. Archivo Efe

El jefe de Estado de Venezuela, Nicolás Maduro, dijo hoy que «hay que esperar» a ver cómo se desenvuelve Donald Trump como gobernante de Estados Unidos y tras señalar que ha habido una «campaña de odio» en contra del presidente electo, añadió que no será «peor» que el saliente Barack Obama.

«Hay que esperar, sobre el presidente Donald Trump los grandes medios internacionales han especulado mucho y nos sorprende la campaña de odio que hay contra Donald Trump, brutal, en el mundo entero, en el mundo occidental y en los Estados Unidos», dijo Maduro a periodistas desde el palacio presidencial de Miraflores.

«No nos adelantemos a los sucesos, en ese sentido yo quiero ser prudente y decir, esperemos, peor que Obama no será», agregó.

El presidente insistió en que hay que esperar a ver el comportamiento de Trump «tanto en la política interna de los Estados Unidos como en la política internacional» al tiempo que «ratificó» que quiere tener «relaciones de respeto, comunicación y cooperación» con Washington.

«Esperemos, vienen grandes cambios en la política mundial, uno de los cambios seguramente que será muy importante será lo que llaman ‘la era Trump’, yo creo que los cambios de la geopolítica mundial van a estar marcados por la pluripolaridad y el multicentrismo, la época del mundo unipolar se acabó y venezuela está en la ola de esos cambios», agregó.

Dijo que Obama deja un legado «de guerras» en África y Asia, «deja al mundo plagado de terrorismo, y en América Latina tres golpes de Estado lo recordarán», dijo al comentar la salida de los presidentes de Honduras, Manuel Zelaya en 2009, de Fernando Lugo en Paraguay en 2012, y de Dilma Rousseff en Brasil en 2016.

También atribuyó a Obama, «intentos de golpes contra (Evo (Morales, de Bolivia), las campañas de cerco contra Nicaragua, los intentos de golpe y de magnicidio contra Rafael Correa en Ecuador y todo lo que le ha hecho al pueblo venezolano, la guerra económica, el bloqueo financiero».

Indicó que «la única cosa que podía reconocer» de Obama como algo positivo es «lo que ha intentado hacer con Cuba» al «intentar» aligerar «los mecanismos del bloqueo», aunque aclaró que «lo hace porque creen que es la vía por la que pueden reconquistar a Cuba y recolonizarla».

Ayer Maduro hizo un llamado a conformar «un gran movimiento nacional de rechazo y repudio» contra la orden ejecutiva de Obama que prorrogó el viernes pasado, por un año más, la «emergencia nacional» sobre el país caribeño.

Maduro señaló que la decisión del presidente saliente de EE.UU. de renovar «la brutal orden ejecutiva» en la que «declara a Venezuela una amenaza inusual y extraordinaria» es una «expresión de odio lamentable».

Obama ordenó la continuidad de un año de la «emergencia nacional» declarada en 2015 sobre Venezuela, donde, según indicó, «la situación no ha mejorado» y «el Gobierno continúa erosionando las garantías de los derechos humanos».

Maduro asegura que ha cumplido los acuerdos en el diálogo y llama a la oposición a sentarse

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aseguró hoy que su Gobierno sí ha cumplido los compromisos adquiridos en el diálogo político y llamó a la oposición a sentarse esta semana en las mesas de conversaciones a las que «está obligada» a asistir por la paz del país.

«Nosotros hemos cumplido, y lo puedo demostrar, en privado y en público con el texto en la mano», dijo Maduro a periodistas desde el palacio presidencial de Miraflores y agregó: «Yo aspiro que la mesa de diálogo, que continúa sus funciones esta semana, reciba en su seno a los delegados de la oposición, y la oposición cumpla la letra firmada».

El presidente señaló que es la oposición representada en la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) la que no ha cumplido los acuerdos entre los que se cuenta, señaló, «acatar la sentencia del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) y regularizar la Asamblea Nacional (AN, Parlamento)» que asegura se mantiene «en desacato».

Insistió en que los actos del Parlamento, de contundente mayoría opositora, son nulos por el hecho de que su directiva no acató la orden del TSJ de desistir en la incorporación de tres diputados indígenas cuya elección fue señalada como fraudulenta por parte del chavismo.

«Por culpa de ellos, de su desacato, han autodisuelto la Asamblea y hoy la Asamblea es menos que un punto muerto del país ¿o no? quien respeta la Asamblea en este país hoy por hoy», dijo.

Aseveró que «la MUD está obligada a sentarse a conversar» y a buscar junto al oficialismo «caminos para la paz del país» mientras respeta al TSJ, a la Constitución «y a respetar y a reconocer al presidente constitucional y legítimo de este país».

El secretario ejecutivo de la MUD, Jesús Torrealba, ha dicho que no retomará el diálogo hasta tanto el Gobierno de Maduro no cumpla con los acuerdos que se han establecido en estas reuniones y que no ve condiciones óptimas para restablecer las conversaciones al tiempo que señaló que este proceso debe tener un nuevo formato.

Torrealba celebró la visita que, se espera, harán a Venezuela esta semana el secretario general de Unasur, el expresidente colombiano Ernesto Samper, y el enviado del Vaticano para que «verifiquen el no cumplimiento de los acuerdos» y para que diseñen «juntos» un nuevo formato de diálogo más «transparente».

El miércoles pasado Torrealba recordó que el secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolín, envió una carta a los representantes del Gobierno y de la oposición venezolana a principios de diciembre pasado en la que instaba al cumplimiento de los acuerdos establecidos en esas conversaciones.

Señaló que los cuatro acuerdos abarcan «cuatro áreas muy claras» que son «la libertad de los presos políticos, respeto al Parlamento de mayoría opositora, atención a las víctimas de la crisis humanitaria y por supuesto el acuerdo en torno a un calendario electoral» que permita un cambio de Gobierno.