Efe – «Falsificación de actas», «fraude en las regiones anglófonas» e «intimidación de los observadores de la oposición» son algunas de las quejas formuladas por candidatos opositores, así como por líderes de la sociedad civil. Pese a todo, Paul Biya se alzó con una nueva victoria que le mantendrá en el poder durante otros siete años, hasta 2025, si le responde la salud. Yaoundé (Camerún), lunes 22 de octubre de 2018. Fotografía: YAOUNDÉ 8CAMERÚN), AÑO 2018. El presidente de Camerún, Paul Biya. Efe.
El presidente de Camerún, Paul Biya, ganó las elecciones del pasado 7 de octubre con el 71,28 % de los votos y prolonga así sus casi 36 años en el poder, anunció hoy el Tribunal Constitucional, pese a las acusaciones de fraude de la oposición.
Los resultados oficiales fueron proclamados por el presidente del Constitucional, Clement Atangana, en el Palacio de Congresos de Yaundé, tras una audiencia de más de cinco horas.
Biya, el gobernante más longevo de África, a sus 85 años, logró su séptimo mandato al frente de su partido, la Reagrupación Democrática del Pueblo Camerunés (RDPC).
En el continente africano, sólo un presidente lleva más tiempo que él en el poder: el mandatario de Guinea Ecuatorial, Teodoro Obiang, que dirige la excolonia española desde 1979, cuando derrocó a su tío, Francisco Macías, en un golpe de Estado.
Biya, que gobierna Camerún desde el 6 de noviembre de 1982, partía como favorito, de ahí que su rotunda victoria no haya sido una sorpresa.
El dirigente se impuso a ocho candidatos, entre ellos el segundo más votado, el opositor Maurice Kamto, de 64 años, quien aglutinó el 14,23 % de los sufragios para el Movimiento para el Renacimiento de Camerún (MRC).
La proclamación de estos resultados ocurrió bajo un fuerte despliegue de seguridad, con gendarmes y soldados aposentados desde primera hora de la mañana en las principales ciudades de Camerún -Yaundé y Duala- con el fin de evitar nuevas protestas.
También, ayer fueron arrestados en Duala dos periodistas, además de líderes políticos que se disponían a realizar una manifestación pacífica contra Biya, entre ellos, el director de campaña de Kamto.
El anuncio de la reelección de Biya no provocó demasiadas muestras de alegría en las calles de la capital de Yaundé, según pudo constatar Efe, más allá de unos pocos seguidores que lo celebraron haciendo ruido con sus motocicletas.
Tampoco hubo vítores en las dos regiones separatistas de habla inglesa del país, en las que Biya fue también el candidato más votado, pese a que acudieron a las urnas menos del 6 % en la región Noroeste y del 16 % en la región Suroeste.
La campaña electoral se vio afectada por la convulsa situación en las regiones anglófonas, que reclaman la independencia del llamado territorio de Ambazonia -casi el 20 % de la población de Camerún-, y donde murieron al menos tres personas por violencia el día de los comicios.
Con una participación del 53,85 %, muy inferior en comparación con el 87 % de 1997, estas elecciones se vieron marcadas por las sospechas de fraude y la denuncia de irregularidades.
«Falsificación de actas», «fraude en las regiones anglófonas» e «intimidación de los observadores de la oposición» son algunas de las quejas formuladas por candidatos opositores, así como por líderes de la sociedad civil.
Según medios locales, el falso reportaje -divulgado por la radiotelevisión pública de Camerún (CRTV)- según el cual supuestos observadores de la ONG Transparencia Internacional habrían monitorizado y aprobado los comicios ha alentado las sospechas.
El pasado 9 de octubre, esta organización mundial contra la corrupción afirmó no haber desplegado una misión de observación electoral en el país, y desmintió que las personas citadas en los medios fueran afiliadas suyas.
La oposición presentó la semana pasada 18 recursos ante Tribunal Constitucional, el único con potestad para anunciar resultados oficiales, solicitando «la anulación total o parcial de las elecciones», aunque estos fueron desestimados por falta de pruebas.
Además de la creciente violencia interna, el longevo mandatario afronta a partir de ahora otros problemas como un desempleo galopante, con una tasa juvenil que excede el 70 %, además de una economía resentida y una corrupción endémica en sus instituciones.
Pese a todo, Paul Biya se alzó con una nueva victoria que le mantendrá en el poder durante otros siete años, hasta 2025, si le responde la salud.
Tras publicarse los resultados, EEUU, por boca de la portavoz del Departamento de Estado, Heather Nauert, felicitó en un comunicado al «pueblo de Camerún por las elecciones en gran parte pacíficas», pero sin mencionar en ningún momento el nombre del mandatario camerunés.
Sí dio la enhorabuena directamente a Biya el presidente de Guinea Ecuatorial, Teodoro Obiang, quien el pasado día 19, sin esperar siquiera a que se divulgasen los resultados oficiales, le transmitió sus «más sinceras y efusivas felicitaciones».
