Poderes muy fácticos| ¿Quiénes se libran?

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FOTOGRAFÍA. CIUDAD DE MÉXICO (MÉXICO), 16.08.2021. Un grupo de mujeres mexicanas protestó este lunes frente al Ángel de la Independencia, en Ciudad de México, al cumplirse dos años de la gran manifestación en la que pintaron este emblemático monumento con centenares de consignas feministas. Efe

Redacción.- Barcelona (España), jueves 11 d emayo de 2023. Asociación Internacional de Lesbianas y Gays (ILGA), es uno de los poderosos brazos del medio-mundial colectivo LGTBIQP+ que dispone de «mando en plaza» en todo el Occidente; o sea, medio-mundial. ILGA se queja de que están oprimidos. Si quienes mandan e imperan en Occidente es el lobby de colectivos LGTBIQP+, se deduce que los opresores son ellos mismos. Cierto, y opresores de todos nosotros. Antes de proseguir debo aclarar que siempre en mi vida y profesión he compartido, cooperado, ayudado, respetado e incluso admirado a personas L y G. Muchos son excelentes personas, buenos estudiantes, grandes profesionales, cabales ciudadanos y tan responsables y respetables como el que más. Pero esos no están en el lobby o colectivo, esos se mantienen como individuos sociales en su medio y con su dignidad.

El lobby, o mejor, los lobbies han sido creados por el poder político en España y muy bien untados, subvencionados, comprados por los grandes plutócratas mundiales, o sea, americanos y británicos en el resto de Occidente y, muy especialmente por la Open Society de Soros, la fundación Ford y demás. Así han llegado a tener amplios poderes en la Organización de Naciones Unidas (ONU), en la Unión Europea (UE), en todos los gobiernos y todas las instituciones de todos los países de Occidente. Tienen dominio, poder, influencia en todos ellos. Controlan órganos consultivos en la ONU, están infiltrados y con mando en todos los organismos de la Unión Europea y en la mayoría de gobiernos. Exhiben sus banderas y sus signos allí donde quieren y también imponen y someten a muchos que no quieren. Son poderes fácticos a todos los niveles en todo Occidente. ¿Oprimidos? Sí, ellos se oprimen unos a otros. De momento difuminan a la mujer y convierten en guiñapos a muchos hombres; pero no es opresión es autoelección, es sometimiento, es ideología y es fluir, fluir de poco a menos género. Ellos, con femineras extremistas pergeñaron la ideología de género que hoy impera en Occidente como el gran progreso en desgracia social. La ONU, pero sobre todo la UE (totalmente desvirtuada de sus funciones y podrida hasta la médula) se desviven en favorecer y promocionar la ideología; la integran, la imponen, la soban, la resabian, es algo como su alimento base, sustancia indispensable de toda la Unión Europea degenerada. Bueno, de toda no, hay algunos países más cuerdos que soslayan todo lo que pueden.

EEUU, Canadá, España son avanzadillas donde todos los que están o han sido estupidificados (estupere = estar aturdido) abrazan la ideología aturdidos como bobos. Bueno, muchos como rebaño, otros muchos por imposición y como pensamiento único políticamente establecido y ministerialmente empicotado. LLegados al culmen de la estupere, el lobby se alza con el derecho a cancelar o suprimir derechos de todos los demás. Todos los que no piensan como ellos son antiderechos, por lo tanto no tienen derechos. Su temor visceral a toda idea diferente a las suyas es decretada como ODIO y, como tal, es punible, con ley al canto, o sea, gobierno protegiéndoles castiga al resto de los ciudadanos. Hoy existen universidades totalmente compradas. Financieros plutócratas (ya mencionados) compran a profesores, políticos (pregunten a un tal P.S.), directivos, incluso rectores y sindicatos enteros, más legiones de estudiantes estupere. Con esos dineros y su prensa, sus medios comprados, establecen censura y ¡pobre del que ose….! es cancelado de raíz. Liberticidas como son, censuran y cancelan a base de mentiras y de su colección de derechos torcidos. Eso sí, acumulan derechos prohibidos al resto de los mortales; derecho de expresión, de acción, de adoctrinamiento para la destrucción de niños, de elección, de puestos encumbrados, de imposición incluso al Tribunal Constitucional de sus perspectivas «generosas». Todo y solo para el lobby LGTBIQP+ y sus derivaciones feminazis. Dueños de Occidente. Su gran apoyo, soporte y seguridad, es «la corrección política»; o sea, llamar odio a toda disensión, castigar ese odio como el delito supremo en la cultura canceladora por no someterse a ella. Infinitos chiringuitos controlan todo y a todos para que nadie se desvíe. El miedo rige y por ello mucha gente se auto-cancela ya que todo el ambiente está impregnado de ese temor.

¿Y quiénes se libran? Pues los no miedosos, los que no tenemos nada que perder, los pocos que siguen denunciando el atropello; denuncias inútiles por escasas, de poca difusión ya que la mayoría de medios comprados no se atreven a hablar. El poder y los lobbies nos califican de bulos y nos censuran (muy democrático). Hoy solo circula la «irrealidad construía, inventada, pergeñada». Las denuncias que son verdad, realidad objetiva y hechos, esas quedan fuera de toda circulación porque tienen la valentía de ser inactuales para la piltrafa de gobierno que, como en todo, sabe que son verdad y le asustan porque también sabe que su gobernar no es para el bien común, que está sometido a sus jefes foráneos y al lobby LGTBI correspondiente. Aunque el gobierno estupere obra sometido, sin embargo sabe que un puñado de valientes hacen mayor bien y mejor sociedad que todas sus fantasmagóricas leyes o panfletos sin sustancia, sin verdad ni belleza y mucho menos bondad y justicia. Por ello se lanza a comprar votos a la desesperada, con mi y tu dinero.

La ideología canceladora ha cerrado = cancelado el diálogo, ni cabe ni es aceptable, lo imposibilitan; es ideología absolutista, nada fuera de ella es válido. El diálogo, el contraste de ideas, los juicios críticos les resultan imposibles. Los colectivos LGTBIQP+ y otros que cultiva y promociona la ministra de igualdad, Irene Montero Gil, tales como los trans, los feminazi, los animaleros, etc. están consiguiendo que —según palabras de la ministra— «en España siguen existiendo numerosos obstáculos que impiden que la igualdad legal se convierta en igualdad real y efectiva», ¡Cuánta razón tiene la ministra! Si lo sabrá ella que lo fabrica… Los delitos de odio que expresan y muestran esos colectivos crean un clima de total desigualdad, ya que ellos tienen muchos más derechos (por ley), más dinero nuestro que les regala el gobierno, más chiringuitos para su ocio, para vivir del cuento y además un mes entero bien subvencionado para sus festivales, sus desmadres y etc. etc.. Y la ministra de Igualdad quiere «reforzar ese valor de riqueza, solidaridad colectivizada y de apertura» (sus palabras). Sin duda el arcoiris establece más diferencias que sus colores indican y tanta dis-socialidad como su ministerio predica.

ILGA, lobbies LGTBIQP+, ministerio de igualdad, Open Society, ONU, plutócratas, Unión Europea, Gobierno de coalición de España y muchos (muchísimos) estupere repartidos por todo Occidente; todos a una elaborando derechos para unos pocos a costa de todos los demás, inventando derechos para limitar los de todos los demás, montando chiringuitos y desguazando a los niños de todos los demás… Pues, de verdad, me quedo con unos pocos líderes africanos y algún que otro idem occidental para oponernos total, absoluta y diametralmente a tanta fuerza avasalladora que nos impone diferencias, exclusión, maldad y cancelación; todo porque están obsesionados con el sexo. Nosotros seguiremos nuestra fe, esperanza y caridad dando prioridad al seso.

Isidro García Getino