Lasvocesdelpueblo y Agencias – Las cárceles regionales, que dependen todas del Gobierno nacionalsocialista de la Generalidad de Cataluña de WERC y JxCAT, donde cumplen condena los presos golpistas del Proceso Separatista en la Comunidad autónoma de Cataluña, el llamado Procés, han enviado ya al Tribunal Supremo sus preceptivos informes de evaluación penitenciaria de los internos, que constatan una «evolución favorable y adecuada a retomar la vida en libertad», que ya tramitó el Gobierno socioseparatista y socioetarra del presidente Pedro Sánchez y vicepresidente Pablo Iglesias a espera de este informe y de la decisión del Supremo. Barcelona (España), sábado 21 de noviembre de 2020.
Según han informado fuentes vinculadas al expediente de indulto que tramita el Ministerio de Justicia del Gobierno socioseparatista y socioetarra del presidente Pedro Sánchez y vicepresidente Pablo Iglesias, los equipos técnicos de las prisiones de Els Lledoners, Puig de les Basses y Wad Ras, donde cumplen condena los golpistas del «Procés», enviaron sus informes al Tribunal Supremo entre los días 27 y 28 de octubre pasados.
Los informes, remitidos por los técnicos penitenciarios sin la supervisión de la Secretaría de Medidas Penales de la Generalidad de Cataluña -dirigida por un cargo de designación política-, habían sido solicitados por el Tribunal Supremo, como es preceptivo, para conocer cuál es la evolución de los reclusos, en cuestiones clave para la concesión de cualquier indulto, como son el arrepentimiento o la capacidad de reinserción.
El Tribunal evaluará esos informes y, una vez disponga de los de la Fiscalía -todavía pendientes-, emitirá un dictamen sobre su posición ante el indulto, que no vincula la decisión que pueda adoptar el Gobierno.
En sus informes remitidos al alto tribunal, los equipos multidisciplinares de las cárceles insisten en los argumentos que han expuesto anteriormente para demostrar la evolución favorable de los presos de cara a la concesión de permisos, del artículo 100.2 que permitió su flexibilización penitenciaria y, más recientemente, del tercer grado.
En esos dictámenes, los técnicos han destacado repetidamente la buena conducta de los golpistas del Procés, su bajo índice de reincidencia, las altas posibilidades de reinserción y sus muestras de arrepentimiento, dado que en las entrevistas con los especialistas de la cárcel han hecho autocrítica sobre su actuación en el Procés.
Esos argumentos han sido considerados insuficientes por la Fiscalía, que se ha opuesto de forma sistemática tanto a las salidas laborales que el Departamento de Justicia concedió a los presos del Procés a los meses de ser condenados como al régimen de semilibertad que se les otorgó el pasado mes de julio.
En estos momentos, los nueve presos tienen avalado el régimen abierto por el juzgado de vigilancia penitenciaria, aunque a líder de ERC y exvicepresidente de la Generalidad, Oriol Junqueras, los exconsejeros Raül Romeva, Joaquim Forn, Jordi Turull, Josep Rull y los Jordis se les ha suspendido a la espera de que el Supremo resuelva los recursos de Fiscalía.
El Ministerio de Justicia anunció a finales del pasado mes de septiembre que iniciaba la tramitación de las peticiones de indultos de los golpistas condenados, un proceso que suele prolongarse entre ocho y diez meses.