Efe.- Sevilla (España), domingo 12 de febrero de 2023. Alauda Ruiz de Azúa y Laia Costa, dos de los Goyas de esta noche -mejor directora novel y mejor actriz protagonista- han señalado nada más recoger sus premios que se sienten «muy felices» y han destacado la casualidad de que hoy se cumpla justo un año de su estreno en el Festival de Berlín.
«Es como un ciclo perfecto», ha manifestado la directora vasca, que ya ha pasado página y «se encuentra en otras, preparando otros proyectos», mientras a su lado, Laia Costa confesaba que ella es «muy de señales, de indicios».
«Me uní a Alauda por un golpe de intuición brutal, me dejo llevar un poco, pero me hace especial ilusión que este reconocimiento sea con ella, porque era su primera película y hoy justo hace un año que estrenamos en Berlín, que era su primera proyección internacional»
Ambas defienden el «cambio que se vio en las nominaciones» respecto al número de opciones de mujeres y, aunque no ha sido un palmarés muy femenino, a las dos les «vale» porque «el cambio que hemos visto es esperanzador», ha considerado Costa.
«Se me escapa lo que pueda pasar en una votación, si cayó una nominada por un voto, o dos, aunque es cierto que es cierto que ha sido una pena lo de ‘Alcarrás’», ha señalado Ruiz de Azúa sobre el vacío de premios para una película con once nominaciones.
La directora vasca se ha emocionado con «el premio de Telmo (Irureta)», protagonista de «La consagración de la primavera», actor revelación de este año con parálisis cerebral. «Ha sido muy bonito, emocionante y necesario».
Y ha añadido que le hubiera gustado que Ramón Barea se hubiera llevado su premio.
Ruiz de Azúa no sabe qué hará con su «cabezón» de color marrón oscuro y más ligero que la estatuilla de otros años, ya que ha sido confeccionado con materiales reciclados. «Le preguntaré a mi hijo dónde lo ponemos, porque mi casa es muy pequeña», ha dicho. Costa lo tiene más fácil: «Todos los premios que ganó los tienen mis padres».
