Lasvocesdelpueblo y Agencias – El expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero (PSOE): «Decir diálogo es decir alivio». «Hay que desjudicializar la política» porque, en su opinión, cuanto mejor pretende ser una democracia, más «reducida» tiene que ser la intervención penal. «Ojalá en cada esquina de Cataluña tengamos una mesa de diálogo reflejo de esa mesa de diálogo que va a haber entre el Gobierno de España y Cataluña. Una mesa de diálogo en cada esquina, en cada barrio», ha exclamado. Barcelona (España), jueves 13 de febrero de 2020.
El expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero ha aprovechado su fugaz visita a Barcelona para cerrar filas con la estrategia del diálogo que promueve el Gobierno para resolver el conflicto catalán y para reivindicar que la ciudad catalana «ya es» cocapital de España, aunque no lo diga ninguna ley.
«Decir diálogo es decir alivio», ha asegurado durante el pregón que ha pronunciado en el gremio de restauradores de Barcelona, ante un auditorio lleno de representantes del mundo político, económico y cultural de Cataluña.
El que fuera jefe del Ejecutivo entre 2004 y 2011 ha sostenido que, en tanto que el diálogo está detrás de «los mejores resultados a lo largo de la historia política», también será el catalizador de una solución para «el conflicto catalán», que ha recalcado que es «político», no «deportivo» o «floral».
En este sentido, ha defendido que «hay que desjudicializar la política» porque, en su opinión, cuanto mejor pretende ser una democracia, más «reducida» tiene que ser la intervención penal.
Y ha avalado la mesa de gobiernos que se tiene que constituir este mes como herramienta para llegar al acuerdo.
«Ojalá en cada esquina de Cataluña tengamos una mesa de diálogo reflejo de esa mesa de diálogo que va a haber entre el Gobierno de España y Cataluña. Una mesa de diálogo en cada esquina, en cada barrio», ha exclamado.
El expresidente ha llamado a sumar al conjunto de la sociedad catalana y española a este nuevo tiempo, porque ha advertido de que sin el empuje de los ciudadanos será imposible el «reencuentro».
Para conseguirlo, ha continuado, habrá que «superar los prejuicios» cruzados que se han instalado estos últimos años, y ha confiado en que «tarde o temprano todos los implicados en este conflicto político -no es un conflicto floral», ha ironizado- «puedan formar parte de la solución, incluido el PP».
Entre los asistentes al pregón de Zapatero había muchos representantes de la política local barcelonesa, como los exalcaldes Xavier Trias y Jordi Hereu, los concejales Laia Bonet (PSC), Elsa Artadi (JxCat) y Paco Sierra, y el exportavoz de los populares en el consistorio Alejandro Fernández Díaz.
Antes de dar el concurrido pregón, Zapatero ha intervenido en el acto «Las capitalidades de Barcelona», en el que ha compartido escenario con el expresidente de la Generalitat José Montilla y el líder del PSC en el ayuntamiento barcelonés, Jaume Collboni.
Ahí, el expresidente del Gobierno ha expuesto que el gobierno de coalición entre PSOE y Unidas Podemos ha abierto una nueva etapa de «calma» y «sosiego» que tiene que permitir que, por primera vez en una década, vuelvan a ser protagonistas «los grandes temas» relacionados con la «justicia social».
«Quiero recordar aquella vieja conferencia de (José) Ortega y Gasset cuando decía ‘¡a las cosas!'», ha exclamado, parafraseando uno de los discursos que el filósofo dio en Buenos Aires en 1939, en el que pedía a los asistentes que se dejaran «de cuestiones previas personales, de suspicacias, de narcisismos».
En este sentido, el expresidente ha animado a aprovechar la nueva coyuntura para promover a Barcelona como capital mundial «de la paz, la convivencia y la no violencia».
Una Barcelona que, ha recalcado, debe recuperar la autoestima y creerse que «ya es» cocapital sin necesidad de que nadie se lo diga: «Una cosa es tener autoridad y otra ser autoridad, y Barcelona tiene autoridad por si misma, no porque se lo imponga nadie», ha resuelto.