Redacción – El PP barcelonés asegura que «una vez más Colau cede al chantaje de la CUP al retirar a la Guardia Urbana de Hort de la Vila, ya que tras la marcha de la policía, más de 50 personas accedieron al edificio en obras para celebrar un acto político junto a concejales de la CUP». Barcelona (España), sábado 4 febrero 2017. Fotografía: El portavoz del PP en el Ayuntamiento de Barcelona, Alberto Fernandez, en declaraciones a la prensa, el pasado 2 de febrero de 2017. Lasvocesdelpueblo.
«Pide explicaciones al gobierno municipal para conocer que tipo de dispositivo policial había previsto y los motivos por los que a pesar de la presencia de Guardia Urbana, el inmueble pudo ser okupado». «Es una burla a la ley y al ayuntamiento ceder el chantaje de violentos, okupas y antisistema de la CUP».
Alberto Fernández, presidente del Grupo Popular en el Ayuntamiento de Barcelona, ha denunciado que «el gobierno municipal de Colau consiente la reokupación ilegal de Hort de la Vila».
Fernández recuerda que la finca fue okupada de forma ilegal el 10 de diciembre de 2015, el propio Gerardo Pisarello, en condición de regidor de Sarriá-Sant Gervasi, llegó a un acuerdo para permitir esta ocupación con la entrega de las llaves y la cesión de las fincas al colectivo okupa y posteriormente fue desalojada para realizar obras de mejora que permitiesen convertir este inmueble en un equipamiento de barrio para los vecinos».
El presidente Popular ha explicado, que «una vez más Colau cede al chantaje de la CUP al retirar a la Guardia Urbana de Hort de la Vila, ya que tras la marcha de la policía, más de 50 personas accedieron al edificio, celebrando un acto conjunto con concejales de la CUP que duró hasta la madrugada».
Alberto Fernández ha pedido explicaciones al Ayuntamiento para conocer «que tipo de dispositivo policial se había previsto» y «los motivos por los que a pesar de la presencia de la Guardia Urbana, finalmente el inmueble pudo ser okupado». En este sentido ha reclamado «concreción para saber si la Guardia Urbana actuó de motu proprio o seguía ordenes».
Para Fernández, «es una burla a la ley y al ayuntamiento la cesión ante el chantaje de violentos, okupas y antisistema de la CUP».
Fernández ha recordado que el edificio se encuentra en proceso de auditoría estructural, con catas en las paredes para determinar su estado de conservación.
«Es una irresponsabilidad del gobierno municipal de Colau permitir la reokupación de un edificio que conlleva un peligro, supone molestias a los vecinos y hasta los informes técnicos desaconsejan el uso de la finca por posibles desprendimientos».
Por último, Óscar Ramírez, consejero-portavoz del Grupo Popular en Sarrià- Sant Gervasi, ha explicado que «el PP logró aprobar por mayoría en el Pleno de Sarrià (2 marzo 2016) una propuesta que pedía desocupar este inmueble y precintarlo, ya que el estado de las fincas no garantiza la seguridad, ni su viabilidad, así como realizar una auditoria estructural y un proceso participativo para decidir los futuros usos del edificio».
