Efe.- Aranda de Duero (Burgos) España, sábado 5 de febrero de 2022. El ministro de Consumo y coordinador federal de Izquierda Unida, Alberto Garzón Espinosa, ha pedido esta tarde en Aranda de Duero (Burgos) el voto de izquierdas, para «blindar los servicios públicos» y defender la democracia.
Garzón, en campaña electoral de Castilla y León, ha apoyado al candidato de Unidas Podemos por Burgos, Juan Gascón, en un acto público en el que también han participado el vicepresidente segundo de la Generalidad Valenciana, Héctor Huesca, o la diputada de Unidas Podemos, Pilar Garrido.
El ministro de Consumo ha hecho una amplia defensa de servicios públicos como la educación, la sanidad y las infraestructuras, asegurando que los recortes en las mismas solo producen desigualdad.
«Yo no podría haber ido al instituto o la Universidad si no fuera por generaciones anteriores que luchasteis por una educación pública», ha manifestado, insistiendo en que la defensa de la democracia se realiza defendiendo los intereses de las clases trabajadoras y de las personas más vulnerables.
Se ha mostrado igualmente positivo sobre los resultados que aportan las últimas encuestas; «si seguimos subiendo arrebataremos escaños a las derechas«, ha afirmado, para añadir que de cumplirse estos pronósticos más optimistas, el candidato del PP, Alfonso Fernández Mañueco, «se va a llevar un susto». «Creo que es posible dar ese susto y cambiar este rumbo», ha rematado.
Tampoco ha evitado Alberto Garzón hablar de la polémica que se originó a raíz de sus declaraciones sobre las macrogranjas, y ha defendido una vez más las explotaciones ganaderas familiares, sociales y ecológicas: «Una verdad que seguiremos diciendo a pesar de los feroces ataques que se siguen haciendo contra mi».
Sobre estos ataques, Garzón ha insistido en que es una estrategia del Partido Popular de «trampas, bulos y mentiras», y de utilización de sus medios de comunicación afines «para intoxicar y atacarme a mi».
«Está deslegitimando la democracia porque esconde el debate real», ha manifestado, refiriéndose al candidato popular una vez más como «el candidato de las macrogranjas».
Ha asegurado que la misma estrategia ha sido utilizada por el PP tras el debate y aprobación de la reforma laboral, calificando la polémica de «una turbia operación».
«En las últimas décadas todas las reformas laborales han ido mutilando derechos laborales y ésta supone un punto de inflexión porque es la primera en décadas que empieza a recuperar derechos laborales», ha concluido.
