Lasvocesdelpueblo y Agencias.- Barcelona (España), miércoles 4 de mayo de 2022. El presidente del Gobierno separatista de la Generalidad de Cataluña, Pere Aragonès García, ha acusado al presidente del Gobierno de coalición socialcomunista de España, Pedro Sánchez Pérez Castejón, de «dinamitar» la vía del diálogo del Procés con su gestión del presunto espionaje a unos 64 golpistas y aliados en Cataluña y en la Comunidad autónomas del País Vasco, por lo que le ha urgido a marcar un «punto de inflexión» y aclarar «sospechas» y «depurar» responsabilidades: dimisiones.
Aragonès ha inaugurado la XXXVII Reunión del Círculo de Economía, en plena polémica por el espionaje con el programa Pegasus a una sesentena de separatistas y al propio presidente del Gobierno socialcomunista de España, y la ministra de Defensa, María Margarita Robles Fernández.
Precisamente Sánchez y Aragonés coincidirán el viernes en estas jornadas económicas, en la entrega del Premio a la Construcción Europea a la presidente de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, en la que será la primera vez en que Sánchez y Aragonés se vean cara a cara desde que estalló el caso Pegasus.
A falta de saber si esa visita de Sánchez a Barcelona para clausurar las jornadas del Círculo de Economía también servirá para que ambos mandatarios se reúnan y aborden este asunto, como reclama el Gobierno separatista desde hace semanas, Aragonès ha aprovechado su intervención para lanzar un mensaje al jefe del Ejecutivo central socialcomunista.
ARAGONÈS RETA A SÁNCHEZ A DEMOSTRAR VOLUNTAD «REAL»
Aragonès ha reivindicado que su compromiso con la negociación del Procés es «granítico», una voluntad que «no es correspondida» por parte de la Moncloa y de Sánchez, lo que le provoca «decepción», «preocupación», «frustración» e incluso «dolor».
Ante el empresariado catalán, el dirigente de la ultraizquierda separatista ERC ha advertido de que Sánchez está «dinamitando la vía del diálogo» del Procés con su gestión del caso de espionaje a los golpistas y aliados durante el Procés, por lo que ha hecho un «llamamiento a un imprescindible punto de inflexión» para poder «reconstruir» la confianza entre ambos Gobiernos.
El extremista Aragonés ha denunciado la «desprotección» de la que él y otros dirigentes separatistas se sienten «víctimas», y ha reprochado al Gobierno que «no puede ser que haya un espionaje bueno y justificable y uno malo e injustificable», algo «inaceptable».
Por ello, ha retado a Sánchez a demostrar si su voluntad de diálogo es «real» y, para ello, ha considerado imprescindible que «se aclaren todas las sospechas sobre quién ha ordenado ese espionaje, con qué finalidad y quién ha accedido a esa información. Si Sánchez se cree el diálogo (del Procés), hay que depurar y asumir responsabilidades».
Porque si bien Aragonès ha reconocido ser consciente de «cuál es la alternativa» al Ejecutivo socialcomunista actual de PSOE y Podemos apoyado en separatistas y bilduetarras, ha avisado de que eso no significa «aceptar cosas inaceptables» y garantizar la estabilidad del Gobierno al precio que sea. «La estabilidad parlamentaria se ha de cuidar», ha señalado.
DEJAR ATRÁS DISCURSOS «DERROTISTAS»
En clave económica, Aragonès ha reivindicado la «necesidad de dejar atrás discursos derrotistas o catastrofistas» sobre la evolución de la economía catalana que «no responden a la realidad», después de que el presidente del Círculo, Javier Faus, alertara minutos antes de que Cataluña presenta «riesgo de estancamiento» y de que otras comunidades están creciendo más.
Aragonés, en cambio, le ha rebatido que Cataluña «lidera» en términos de Producto Interior Bruto (PIB), al crecer «por encima de la media de España», y también en exportaciones, en captación de inversiones extranjeras y en creación de empleo; y tras quejarse del «dumping fiscal» que practica la Comunidad de Madrid, ha reivindicado fijar una base mínima para todas las comunidades en impuestos como el de Patrimonio.
Pero el turno de preguntas de los asistentes ha vuelto a evidenciar la preocupación de los empresarios por la actualidad política, con casi todas las preguntas centradas en las dudas respecto al proyecto separatista de la Generalidad de Cataluña.
Precisamente ante los retos económicos, Aragonès ha defendido la independencia, ya que, a su juicio, el «techo autonómico es insuficiente para la ambición y potencial de Cataluña» y ésta necesita todas las «herramientas».
Y ha dejado claro a los empresarios que el Gobierno separatista trabaja también para garantizar el bienestar y progreso de cualquier ciudadano, sea separatista o no. «Todo el que haya tratado conmigo no encontrará ni un gramo de sectarismo», ha sentenciado.
Al finalizar su intervención y abandonar la sala, Aragonès se ha cruzado con la vicepresidente tercera y ministra de Transición Ecológica del Gobierno socialcomunista de España, Teresa Ribera Rodríguez, aunque el encuentro se ha limitado a un breve y cordial saludo ante cámaras y fotógrafos.
