Efe – Médicos y enfermeras jubilados en los dos últimos años, MIR y estudiantes de último año de Medicina, en un número conjunto no determinado por el momento, son la ayuda que la consellera de Salud, Alva Vergés, espera que sirva para mitigar la saturación del sistema sanitario público de Cataluña. Madrid (España), jueves 19 de marzo de 2020.
La consellera de Salud ha dado a conocer hoy jueves que su departamento se ha puesto en contacto con rectores de universidades con facultades de medicina y colegios profesionales de médicos y enfermeras para que faciliten el contacto con estas personas, y preguntarles si quieren colaborar a aliviar esta crisis sanitaria.
Vergés ha explicado este plan en la rueda de prensa diaria para dar cuenta de la situación sanitaria en Cataluña a causa del coronavirus, junto con los consellers de Presidencia, Meritxell Budó, y de Interior, Miquel Buch.
Aunque el departamento ha empezado esta acción esta semana, el Colegio de Médicos de Barcelona y el sindicato Metges de Catalunya ya sugirieron la semana pasada que recurrir a recién jubilados y a médicos MIR era una opción que se debía valorar.
La consellera Budó ha alertado hoy de que el sistema sanitario público catalán entrará en «estrés máximo» ya este fin de semana y puede «colapsar» la próxima, si no se adoptan «medidas drásticas como el confinamiento total».
«Nos estamos preparando muchísimo», ha asegurado Vergés, ante la previsión de que «el número de casos irá creciendo y hemos de tener profesionales» para atender a los enfermos en los próximos días.
Ha informado de que Cataluña ha recibido unas 200.000 mascarillas si bien ha insistido de que muchas empresas y hospitales le han comunicado que se han parado los pedidos, una situación que el Govern atribuye a la intervención del Gobierno del Estado.
Según los datos facilitados hoy por la consellera, los médicos MIR que podrían incorporarse al sistema de salud catalán podrían ascender a unos 400, mientras que los jubilados hace menos de dos años y menores de 70 años ascienden a unos 1.500 y las enfermeras en la misma situación a casi un millar.
Los estudiantes de último año de Medicina y Enfermería suman unos 2.600 efectivos, con los que se ha empezado a contactar esta misma semana.
En cuanto a la situación de las residencias de ancianos en Cataluña, en una de las cuales, situada en la población de Capellades (Barcelona), han fallecido seis personas mayores, Vergés ha asegurado que «irá llegando material» de protección para los profesionales que atienden a estos usuarios.
Ha admitido «diferentes positivos y muertos» en estos centros pero no ha precisado cuántos ni dónde, a pesar de que ha asegurado que las residencias de mayores «tienen el mismo nivel de prioridad» que los hospitales.
También ha anunciado que se deben «sectorializar bien» a los posibles infectados en las residencias de ancianos, aunque en muchas no existe espacio para hacerlo o sólo hay una habitación para aislar a estos enfermos.
Respecto al Hospital de Igualada (Barcelona), donde se originó un brote de coronavirus, ha dicho que hacen y harán «muchas actuaciones» para reforzar el centro, pero que primero se ha reducido la presión asistencial derivando a parte de los enfermos a otros centros.
Los hospitales de Bellvitge, de l’Hospitalet de Llobregat (Barcelona), y Arnau de Vilanova, de Lleida, han sido los destinos de varios enfermos que se encontraban ingresados en el centro de Igualada, en un número del que tampoco se ha informado.
El departamento de Salud «no descarta nada», ha dicho la consellera, para ubicar enfermos en espacios como la Fira de Barcelona o los hoteles que han ofrecido empresarios del sector.
