Redacción – Éstas son las declaraciones del primer ministro francés Manuel Valls hoy: «Las playas, como cualquier espacio público deben preservarse de las afirmaciones religiosas. El burkini —bañador islámico para mujeres islamistas— no es una nueva gama de trajes de baño sino es la traducción de un proyecto político –islamista– para la ingeniería social, basada especialmente en el sometimiento de la mujer –europea–. Algunos tratan de presentar las mujeres que lo usan como víctimas, como si estábamos poniendo en tela de juicio la libertad… pero esto no es una libertad sino un intento de esclavizar a las mujeres –europeas–«. París (Francia), miércoles 17 de agosto de 2016. Fotografía: El primer ministro francés Manuel Valls saliendo de la presidencia de la República francesa, tras una reunión con el presidente François Hollande. Archivo Reuters.
«Por eso he votado a favor de la ley de 2004 que prohíbe los símbolos religiosos en las escuelas, o también de 2010, sobre el velo integral islámico en los espacios públicos de Francia. No acepto esta visión arcaica. Existe la idea –en el mundo islámico– de que por naturaleza, las mujeres son prostitutas, impuras, deben estar completamente cubiertas». Ésta es la respuesta del jefe del gobierno del presidente de la República francesa, François Hollande, este miércoles a la pregunta «¿Este verano en Francia, la cuestión del Bañador islámico (burkini) inflama los espíritus en Francia. Que cuenta usted hacer; lo va a prohibir o permitir?» del diario francés ‘La Provence’.
«No es compatible con los valores de Francia y de la República francesa. Frente a las provocaciones, la República francesa debe defenderse. Hoy en día, los musulmanes en Francia son tomados como rehenes por estos grupos, estas asociaciones, estas personas que abogan por el uso de burkini y quieren hacer creer que la República francesa y el Islam son incompatibles. Estas organizaciones islámicas crispan el ambiente y fomentan la confrontación en Francia». «Así que son los propios musulmanes de Francia desde: sus autoridades, sus familias, su compromiso personal, profesional o social, quienes deben rechazar esta visión mortal del Islam».
«En este momento muy especial cuando nos enfrentamos a los ataques terroristas yihadistas en nombre de un Islam pervertida, cada ciudadano debe asumir la responsabilidad»
Manuel Valls: «Si queremos construir un Islam de Francia compatible con nuestros valores, nuestras libertades, la igualdad de género (entre mujeres y hombres), es necesario que el Islam, como otras religiones han hecho, acepte la discrecionalidad en la manifestación de las creencias religiosas –ésta se impone a todos los ciudadanos francés (hombres y mujeres) de la misma manera en el espacio público, con los mismos derechos y los mismos deberes. En este momento muy especial cuando nos enfrentamos a los ataques terroristas yihadistas en nombre de un Islam pervertida, cada ciudadano debe asumir la responsabilidad».
Manuel Valls: «Siempre volver a los fundamentos de la República y el laicismo. La laicidad no es la negación de la religión. Esto es para proteger la libertad de todos los ciudadanos que creyentes y no creyentes». Ha dicho Manuel Valls en respuesta a la reacción del líder de la Fundación Para El Islam en Francia, Jean-Pierre Chevènement, quien llamó a la discreción de los musulmanes ante las prohibiciones del bañador islámico en las playas de Cannes (Francia) y en algunas localidades francesas este verano».
Manuel Valls: «También fui testigo de la falta de cumplimiento de la ley sobre el burka islámico (el velo integral que tapa todo el cuerpo de la mujer islámica). Sin embargo, esta Ley está apoyada por la inmensa mayoría de los ciudadanos. Y que la prohibición de símbolos religiosos en las escuelas francesas se aplica con firmeza. Si no se aplica el texto, en gran medida votada por el Parlamento francés (Asamblea Nacional), los ciudadanos pierden la confianza en la capacidad del Estado para vivir con nuestros valores. Antes de pensar en legislar, vamos a aplicar la ley que prohíbe el burka islámico en el espacio público».
Manuel Valls: «¿Por qué estos predicadores –islamistas–, siguen aún en Francia? En primer lugar, porque algunos son franceses. En cuanto a aquellos que son inmigrantes» se les hemos «expulsado»
» Recordamos, con el Ministro del Interior, diputaciones y fuerzas de seguridad. Las imanes, asociaciones musulmanas también deben condenar el burka, condenar los actos de provocación que crea las condiciones para una confrontación en Francia». Dijo al ser preguntado sobre si no había llegado el momento de aplicar la ley ta como fue sobre el cumplimento de la ley de prohibición del burka en Francia.
Manuel Valls: «¿Por qué estos predicadores –islamistas–, siguen aún en Francia? En primer lugar, porque algunos son franceses. En cuanto a aquellos que son inmigrantes y mantengan el discurso del odio punible con arreglo a la ley, deben ser inmediatamente expulsado de Francia; ya se ha hecho, ya se ha expulsado un total de 82 imanes extremistas que fermentaban el discurso de odio en Francia».
Manuel Valls: «Todos aquellos que abogan por discursos que no tienen nada que ver con nuestros valores deben ser perseguidos. Él debe gastar ningún compromiso con aquellos que cuestionan el modelo republicano. Necesitamos imanes de habla francesa, formado en nuestros valores».
«Pero más allá de eso es el Islam de Francia y sus instituciones tienen que reaccionar. Tengo que añadir, a la atención de nuestros compatriotas musulmanes, que también será implacable contra aquellos que tomaría el chivo expiatorio y ver el Islam como un culpable ideal de los actos de terrorismo – sino también todos males de nuestra sociedad. Nunca transigerai en este punto. Ellos siempre van a encontrar el estado de su lado para protegerlos». Valls ha respondido así a la pregunta «¿Es la financiación que convierte el islam incompatible con los valores de la República francesa o es el discurso del odio predicado por imanes radicales en las mezquitas en Francia?».
El jefe de gobierno del presidente francés François Hollande ha respondido, en medio de otra polémica islamista y a menos de 1 año de la campaña electoral (20179, a las preguntas de 3 profesionales del diario ‘La Provence’, Frédéric Cheutin, Jean-Michel Marcoul et Denis Trossero, hoy. Valls ha dejado claro, Francia rechaza el Burka islámico que accepta el presidente autonómico del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) en Castilla -La Mancha, García Page; y deja claro que el bañador islámico (burkini) es una tortura islamista de la mujer: No acepto esta visión arcaica. Existe la idea –en el mundo islámico– de que por naturaleza, las mujeres son prostitutas, impuras, deben estar completamente cubiertas», sentenció Manuel Valls.