Iglesias saca su perfil institucional para desmontar a Rajoy y tantear a PSOE

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Madrid (España), 13 junio de 2017. (EFE)-. Debate moción de censura de Podemos contra el PP y su presidente de Gobierno Mariano Rajoy. El líder de Podemos, Pablo Iglesias, se ha presentado hoy como el candidato alternativo a la Presidencia con un perfil institucional para desmontar al Gobierno de Mariano Rajoy y ofrecer una alternativa; al tiempo que ha aprovechado para tender la mano al PSOE ofreciendo un pacto que excluya a Ciudadanos. En la primera jornada del debate de la moción de censura contra Rajoy, el candidato a la Presidencia por Unidos Podemos ha cedido además un papel principal a su portavoz, Irene Montero, para denunciar la corrupción del PP y sus consecuencias. El líder de Podemos, Pablo Iglesias, durante una de sus intervenciones en el debate, hoy en el pleno del Congreso, de la moción de censura de Unidos Podemos contra Mariano Rajoy, en la que él se presenta como candidato a presidente del Gobierno. Efe.

Lasvocesdelpueblo y Agencias – El líder ultra de la formación de extrema izquierda española (Podemos), Pablo Iglesias, se ha presentado hoy, martes 13 de junio de 2017, como el candidato alternativo a la Presidencia con un perfil institucional para desmontar al Gobierno de Mariano Rajoy y ofrecer una alternativa; al tiempo que ha aprovechado para tender la mano al PSOE ofreciendo un pacto que excluya a Ciudadanos. Madrid (España), martes 13 de junio de 2017. Fotografía: El líder de Podemos, Pablo Iglesias, durante una de sus intervenciones en el debate, hoy en el pleno del Congreso, de la moción de censura de Unidos Podemos contra Mariano Rajoy, en la que él se presenta como candidato a presidente del Gobierno. Efe.

En la primera jornada del debate de la moción de censura contra Rajoy, el candidato a la Presidencia por Unidos Podemos ha cedido además un papel principal a su portavoz, Irene Montero, para denunciar la corrupción del PP y sus consecuencias.

A Rajoy, Iglesias le ha advertido que va a pasar «a la historia como el presidente de la corrupción», igual que Adolfo Suárez fue el de la Transición, Felipe González el de la modernidad, José María Aznar el de la «guerra» y José Luis Rodríguez Zapatero el de la «crisis».

Le ha recordado también que «las leyes están para cumplirlas» y que España no puede permitirse que «las instituciones estén copadas por corruptos», y por eso -ha enfatizado- «hay que echar» al PP del Gobierno.

Y cuando Rajoy le ha dicho que «no aprueba ni de lejos como candidato» y que «no es de fiar», Iglesias le ha espetado que «va siendo hora» de que gobierne alguien que no tenga tantos «amigos en la cárcel».

«No sé si escraches, pero delincuentes amigos suyos tienen más que nadie», ha señalado Iglesias con un tono menos bronco que el que utiliza en otras ocasiones con el Gobierno e incluso con el PSOE.

Hoy se ha visto a un Iglesias más comedido.

Incluso los socialistas han agradecido esas nuevas formas del líder de Podemos, quien ha reconocido los «errores» que cometió tras las elecciones del 20D y ha vuelto a tender la mano al PSOE para buscar un pacto que logre echar al PP del Gobierno, pero que excluya a «la muleta naranja» de Ciudadanos (Cs).

«Ojalá nos pongamos de acuerdo para sacarlos (al PP) del Gobierno más temprano que tarde», ha indicado Iglesias, quien ha recalcado que está dispuesto al diálogo con el PSOE, sobre todo tras «la lección» que las bases socialistas han dado al «establishment» al elegir secretario general a quien fue «descabalgado», Pedro Sánchez.

El líder de Podemos ha presentado un programa alternativo en el que el reconocimiento de la plurinacionalidad tiene un lugar destacado, con una apuesta por un referéndum en Cataluña con garantías y reconocimiento; punto en el que Rajoy le ha exigido más «claridad» y menos «ambigüedad».

Iglesias, por su parte, ha avisado al jefe del Ejecutivo de que si trata de «tapar la corrupción usando a Cataluña y apelando a los peores instintos reaccionarios» les tendrá enfrente y ha confiado en que el PSOE se sitúe en esa misma posición.

En su proyecto ha incluido también 11 medidas anticorrupción, entre las que destacan el cambio del sistema de elección del fiscal general del Estado para reforzar la independencia judicial; una nueva ley de contratación pública y otra de financiación de partidos que limite el endeudamiento bancario y las donaciones.

Derogar la reforma que acortó los plazos de las investigaciones penales, una ley contra las puertas giratorias, acabar con el secreto bancario, endurecer las penas del delito fiscal y crear el de enriquecimiento ilícito, son otras propuestas que, según ha dicho, el PP no podría poner en marcha porque «a lo mejor, más gente de su partido terminaría en la cárcel».

En materia económica se ha inspirado en el modelo del Gobierno socialista portugués para proponer una subida del salario mínimo hasta los 950 euros durante la legislatura, la revalorización de las pensiones con el IPC, reducir la jornada laboral a 35 horas semanales y la educación infantil universal y gratuita desde los cero años.

Una reforma fiscal progresiva con la que obtener los 19.500 euros presupuestados para estas medidas y un impuesto a la banca para que devuelva a los contribuyentes el dinero del rescate bancario son otras de las medidas de su proyecto.

Iglesias ha hechos suyos además los «éxitos» de los llamados ‘Ayuntamientos del cambio’ -muchos de sus alcaldes le arropaban hoy desde la tribuna-, porque considera que son el aval que demuestra que ya gobiernan mejor que el PP y han devuelto la «dignidad a las instituciones».

Podemos se ha felicitado por la actuación de su candidato, creen que ha ofrecido una imagen «solvente» frente al nerviosismo de Rajoy y ensalza también a su portavoz, Irene Montero, que hoy llevaba el encargo de ser la más «rotunda» con la corrupción del PP.

Superada la sorpresa que ha causado en la formación morada que Rajoy haya respondido desde el primer momento a Montero, la portavoz de Unidos Podemos ha defendido que su moción de censura es «por España y contra el PP, que es quien está saqueando al país».

Ha advertido al presidente de que «España está harta de le roben» y de que «su tiempo ya ha acabado», y ha subrayado que «la corrupción tiene sede y es Génova 13», la calle de la sede de los ‘populares’.

Montero ha enumerado los 67 casos de corrupción en los que se ha visto implicado el PP, ha señalado a este partido como el primero «en la historia imputado por corrupción», le ha acusado de haber «mentido sistemáticamente», y ha comparado al Gobierno con la mafia por presionar a jueces, fiscales, periodistas, policías y guardias civiles.

Ha habido un claro reparto de papeles entre Montero e Iglesias, pero ambos, eso sí, han cerrado su discurso con la consigna que es la «marca» de Podemos: «Sí se puede».