Efe – El juicio al mayor de los Mossos d’Esquadra Josep Lluís Trapero por la actuación de este cuerpo policial de cara al referéndum del 1-O ha comenzado este lunes en la Audiencia Nacional con la incógnita de hasta cuándo mantendrá la Fiscalía el delito de rebelión del que le acusa. San Fernando de Henares (Madrid) España, lunes 20 de enero de 2020.
A las 10.27 horas, la secretaria judicial de la sección primera de la Sala de lo Penal ha abierto, leyendo el escrito de acusación de la Fiscalía, la sesión de este primer día de juicio que se celebra en la sede de la Audiencia Nacional en San Fernando de Henares, ubicada en un polígono industrial a las afueras de Madrid.
Junto a Trapero se sientan en el banquillo sus dos inmediatos superiores, el exdirector de los Mossos Pere Soler y el exsecretario general de Interior César Puig, segundo del exconseller Joaquim Forn (condenado por el Supremo a 10 años y medio de cárcel por sedición).
Una cuarta acusada, la intendente de los Mossos Teresa Laplana, se enfrenta a 4 años de cárcel por un delito de sedición por su presunta pasividad el 20 de septiembre de 2017 ante el cerco independentista a la Consellería de Economía durante un registro judicial para frenar los preparativos del 1-O.
El teniente fiscal Miguel Ángel Carballo reclama a los tres 11 años de prisión por rebelión, «sin perjuicio de lo que resulte tras iniciarse el juicio oral», según el mismo adelantó al rechazar modificar su acusación a sedición, tal y como planteó la defensa de Trapero antes del juicio a la luz de la sentencia del Supremo.
Esto significa que la Fiscalía puede anunciar esa modificación en cualquier momento del juicio, si bien no se haría efectiva hasta llegado el trámite de presentación de las conclusiones definitivas, según han señalado a Efe fuentes jurídicas.
El juicio, que ha comenzado hoy y se prolongará previsiblemente hasta marzo y está previsto que declaren, además de los acusados, 104 testigos pedidos por la Fiscalía y las defensas.
El más destacado es el exvicepresidente catalán Oriol Junqueras, que cumple en Lledoners la condena a 13 años de cárcel que le impuso el Supremo por malversación y sedición, por lo que aún se desconoce si será trasladado a Madrid para testificar o si lo hará por videoconferencia.
