La separatista presidenta de parlamento de Cataluña: «Si alguien no quiere escuchar al presidente, ahí tiene la puerta»

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El presidente separatista Artur Mas (Izquierda), dandole un masage a la presidenta del Parlamento catalán, Nuria De Gispert Català (centre) ante la mirada del consejero de presidencia regional Francesc Homs (Derecha), durante una sesión del Parlamento autonómico. Fotoarchivo/Albert García
Lasvocesdelpueblo y Agencias – «Sí alguien no quiere escuchar al presidente, ahí tiene la puerta». Así de contundente se ha sentenciado la separatista excluyente y presidenta del Parlamento de Cataluña, Núria de Gispert Català, en el último pleno del Parlamento regional de la legislatura, en una sesión de control al gobierno de Artur Mas Gavarró que ha sido de alto voltaje por su marcado carácter preelectoral.<Fotografía: El presidente separatista Artur Mas (Izquierda), dandole un masage a la presidenta del Parlamento catalán, Nuria De Gispert Català (centre) ante la mirada del consejero de presidencia regional Francesc Homs (Derecha), durante una sesión del Parlamento autonómico. Fotoarchivo/Albert García>.

La fecha del 27 de septiembre para las elecciones catalanas ha sobrevolado en todo momento en el hemiciclo catalán, con acusaciones y reproches entre los grupos de la oposición (PSC, PPC y Ciudadanos (C’s)) y el presidente catalán, Artur Mas, quien ha querido «dar la cara» pese a ir de número cuatro en la lista unitaria separatista ‘Juntos Por el Sí’, pese a lo cual pretende renovar en Generalidad de Cataluña.

En este contexto, la separatista excluyente antiespañola y presidenta del Parlamento regional de Cataluña, Núria de Gispert Català, en el cargo pese a estar suspendida de militancia por el partido que la encumbró (UDC), ha tenido que intervenir en diversas ocasiones durante la sesión de control al gobierno hasta el punto de que, ante la incredulidad de muchos diputados, ha espetado claramente en defensa de Artur Mas: «Si alguien no quiere escucharlo, ahí tienen la puerta», advirtió Català.

Català, que apoya la lista ‘Juntos Por sí’ a la separación de Cataluña con el resto de España de CDC de Artur Mas; ERC de Oriol Junqueras, y los colectivos separatistas ANC, Ómnium Cultural y AMI ha evitado censurar al presidente catalán, Artur Mas, cuando en el pleno ha llamado «ignorante» al presidente de Ciudadanos, Albert Rivera. La queja de la portavoz y actual candidata de Ciudadanos (C’s), Inés Arrimadas, tras la intervención de Artur Mas ha caído en un saco roto: «No le voy a dar la palabra porque no son insultos personales. Un cosa es hablar de la ignorancia -como acababa de hacer Artur Mas- y la otra es considerarlo como un insulto». Así de contundente Nuria de Gispert Català ha rechazado lo que todo el mundo considera insultos al presidente de Ciudadanos, Albert Rivera.

En otro momento del debate, Català ha interrumpido la sesión de nuevo y ha parado el tiempo de la intervención de Artur Mas por el ruido en el hemiciclo que se ha generado cuando el presidente catalán ha dicho que la líder del PPC, Alicia Sánchez-Camacho, ya había sido designada «a dedo» candidata para las elecciones catalanas. «Si alguien no quiere escuchar al presidente, ahí tienen la puerta», ha espetado la presidenta de la cámara catalana a los parlamentarios populares que se quejaban sonoramente.

En el arranque de su intervención, el líder del PSC, Miquel Iceta, uno de los parlamentarios catalanes más veteranos, ha optado por tirar de su habitual ironía ante el arbitraje de la presidenta de parlamento la separatista Gispert Català, pues ha respondido con un «a sus órdenes» cuando la presidenta del Parlamento le ha conminado a esperar a que ella pusiera orden para poder iniciar su intervención. «Así me gusta, disciplinado«, le ha respondido en un par de ocasiones la separatista Català, como si hablara de profesora a alumno.

Todo ello ha sucedido entre los aplausos que ha despertado la ocurrencia del secretario general del PSOE Catalán, Miquel Iceta, que ha contribuido a rebajar una tensión que ha marcado el último pleno de una legislatura con fecha de caducidad tras casi tres años de debate separatista ante el proceso separatista que pilota Artur Mas en tándem con ERC.