Redacción – La principal asociación de médicos de Madrid estalla y presenta escrito de demanda ante el juzgado de lo social para que la administración entregue medios a los hospitales de inmediato, informa el Diario El Confidencial, este martes, 24 de marzo de 2020. En su escrito ante los Tribunales, la Asociación de Médicos y Titulados Superiores de Madrid (AMYTS), dice: «El personal sanitario no podemos quedarnos en casa. El riesgo de exposición pública y privada, después en nuestras casas, hacia el coronavirus es más que obvio porque la forma de contagio es precisamente nuestro ámbito de trabajo». La demanda deja claro que si no se acuerdan las medidas cauterices solicitadas, «se estará poniendo en grave riesgo la salud de los trabajadores de la sanidad y de los propios ciudadanos que acuden a los centros asistenciales». Una advertencia que está basada en cifras oficiales: España es el país que peor protege a sus sanitarios en la crisis global del Covid-19 y el contagio de los sanitarios ya supera el 12% del total de infectados. Barcelona (España), miércoles 25 de marzo de 2020.
La Asociación de Médicos y Titulados Superiores de Madrid (AMYTS), el sindicato médico de la Comunidad, ha presentado un escrito de demanda con petición de cautelarísimas «inaudita parte» ante el juzgado de lo social para exigir a la consejería de Sanidad que entregue material sanitario urgente a los hospitales de toda la región en un máximo de 24 horas, así como a los centros con pacientes institucionalizados y otros lugares asistenciales. Públicos y privados. En concreto, la exigencia se refiere a los medios que ya escasean o son inexistentes en algunos casos: batas impermeables, mascarillas FFP2 Y FPP3, gafas de protección y contenedores de grandes residuos.
La demanda coincide con el peor martes desde que estalló la epidemia y el peor dato para los sanitarios: 5.400 profesionales de toda España están afectados. La confederación nacional a la que pertenece AMYTS (CESM) presentará el mismo escrito a nivel nacional contra el Ministerio de Sanidad. Fuentes del sindicado madrileño insisten en que “ya no puede dejarse para mañana porque el problema es demasiado serio».
Denuncian el «menosprecio de la administración» que, además de protegerles insuficientemente, reconocen la situación como enfermedad común para estos profesionales.
«El personal sanitario no podemos quedarnos en casa. El riesgo de exposición pública y privada, después en nuestras casas, hacia el coronavirus es más que obvio porque la forma de contagio es precisamente nuestro ámbito de trabajo», insisten los médicos.
La demanda, deja claro que si no se acuerdan las medidas cauterices solicitadas, «se estará poniendo en grave riesgo la salud de los trabajadores de la sanidad y de los propios ciudadanos que acuden a los centros asistenciales». Una advertencia que está basada en cifras oficiales: España es el país que peor protege a sus sanitarios en la crisis global del Covid-19 y el contagio de los sanitarios ya supera el 12% del total de infectados.
El escrito presentado en el juzgado de lo social hace hincapié en las recomendaciones de la OMS y del propio Ministerio de Sanidad, así como de la Comunidad madrileña, que «son claras en orden a la necesidad de que ha de proveerse a los profesionales sanitarios de todo un conjunto de medidas y elementos necesarios para que puedan realizar su trabajo en condiciones mínimas de seguridad» y no verse así «contagiados por los pacientes o aumentar el riesgo que los mismos sufren, y evitar la propagación de la enfermedad».
Como publica hoy este diario, profesionales del Hospital Ramón y Cajal, uno de los principales centros hospitalarios de Madrid, se han plantado ante la falta de material y en vista de que la dirección del propio centro niega a sus sanitarios medidas básicas de protección.
Denuncian la improvisación de protocolos en función de los medios que reciben y que desde el último viernes ya consisten en utilizar mascarillas quirúrgicas en vez de las FPP2 para tratar con pacientes con coronavirus. Los mismos sanitarios denuncian que llevan siete días reciclando una misma mascarilla antes la escasez, a pesar de que la indicación es utilizarla un máximo de 8 horas.
