Maduro pide cambiar la Constitución y la oposición llama a la rebelión contra el golpe

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Caracas (Venezuela), 1 mayo de 2017 (EFE).- El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, convocó hoy a iniciar un proceso para modificar la Carta Magna, un movimiento que la oposición ha calificado de golpe de Estado y por el que ha llamado a los venezolanos a "rebelarse" para evitar la disolución de la república. Fotografía cedida por la oficina prensa del Palacio de Miraflores en la que se registró al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro (i), durante una marcha de simpatizantes chavistas por el Día Internacional del Trabajador, en Caracas (Venezuela). Efe.

Agencias – El presidente del Parlamento de Venezuela, el opositor Julio Borges, denuncia el nuevo «golpe» del presidente Nicolás Maduro en el país: «Lo que ha hecho Nicolás Maduro es tratar de destruir el voto en Venezuela convocando a un parapeto, a un fraude, a una estafa poniéndole la etiqueta de Constituyente, no es una Constituyente, es un fraude y el mundo entero y el pueblo venezolano tiene que estar claro». Caracas (Venezuela 2 de mayo de 2017. Fotografía: Fotografía cedida por la oficina prensa del Palacio de Miraflores en la que se registró al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro (i), durante una marcha de simpatizantes chavistas por el Día Internacional del Trabajador, en Caracas (Venezuela). Efe.

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, convocó este lunes 1 de mayo de 2017 a iniciar un proceso para modificar la Carta Magna, un movimiento que la oposición ha calificado de golpe de Estado y por el que ha llamado a los venezolanos a «rebelarse» para evitar la disolución de la república.

En Venezuela se realizaron este lunes marchas a favor y en contra del Gobierno en el marco del Día Internacional del Trabajador y Maduro aprovechó su tarima, cuando se cumple un mes de protestas antigubernamentales, para convocar a una Asamblea Nacional Constituyente que pidió que sea conformada por la clase obrera, comunal y popular, y que será elegida por el voto.

La oposición antichavista, reunida en la coalición Mesa de la Unidad Democrática (MUD), llamó a nuevas protestas de calle y consideró que estas deben hacerse con más motivos tras el anuncio de Maduro.

Además, señaló que la Asamblea Nacional (AN, Parlamento) de mayoría opositora realizará hoy, martes 2 de mayo de 2017, una sesión para analizar el «golpe de Estado más grave de la historia de Venezuela».

Maduro dijo este lunes 1 de mayo de 2017: «Yo convoco al poder constituyente originario para lograr la paz que necesita la república, para derrotar al golpe fascista y para que sea el pueblo con su soberanía quien imponga la paz, la armonía, el diálogo nacional verdadero».

Según el presidente, desde hace un mes se ha puesto en marcha un plan para derrocarlo del que forman parte las protestas antigubernamentales de calle a las que ha convocado la oposición para pedir que se restituya el «hilo constitucional» y que se convoque a elecciones, entre otras exigencias.

Maduro dijo hoy que con esta convocatoria que ha hecho se transformará el Estado, «sobre todo esa Asamblea Nacional podrida que está ahí», y señaló que la Constitución actual, creada a instancias del fallecido presidente Hugo Chávez en 1999, debe ser «fortalecida».

«Va a ser una Constituyente electa con voto directo del pueblo para elegir a unos 500 constituyentistas aproximadamente, unos 200, 250 electos por la base de la clase obrera, de las comunas, de las misiones, de los indígenas», dijo.

Además, pidió a los dirigentes chavistas salir a las calles para explicar a los ciudadanos en qué consiste esta convocatoria y anunció que designó una comisión presidencial para ello que estará presidida por el ministro de Educación, Elías Jaua, y en la que participarán otros oficialistas como la canciller, Delcy Rodríguez, y la primera dama, Cilia Flores.

Poco más tarde, el presidente firmó el decreto en el palacio presidencial de Miraflores, donde señaló que este es un «desencadenante histórico» para una nueva etapa del país.

El abogado constitucionalista venezolano Hermann Escarrá, designado por Maduro para una comisión presidencial para explicar al pueblo de qué se trata la convocatoria, aseguró que con esta Constituyente no se prevé aplicar «modificaciones sustanciales» a la Constitución vigente.

Tras el anuncio de Maduro sobre esta Constituyente, la MUD lo calificó de «estafa» y convocó a un cacerolazo, a una protesta de cierre de calles para la mañana de este martes y a una nueva gran marcha para el próximo miércoles.

El presidente del Parlamento, Julio Borges, anunció como vocero de la MUD que hoy, martes 2 de mayo de 2017, se realizará una sesión especial de la Cámara para discutir el «golpe» que, aseguran, dio el gobernante con este anuncio y aseveró que ya varios países de la región le han manifestado su alarma por la situación de Venezuela.

«Lo que ha hecho Nicolás Maduro es tratar de destruir el voto en Venezuela convocando a un parapeto, a un fraude, a una estafa poniéndole la etiqueta de Constituyente, no es una Constituyente, es un fraude y el mundo entero y el pueblo venezolano tiene que estar claro», dijo.

El diputado pidió a la Fuerza Armada que se pronuncie, así como «a las otras instituciones, a la fiscal (Luisa Ortega), a los magistrados, a quienes tengan todavía conciencia y les duela el país, no se hundan con este golpe de Estado, es el momento de la conciencia, rebélense».

También señaló que el mismo pueblo chavista también debe rebelarse porque Maduro los «engañó» y «destruye la Constitución» que promovió Chávez y fue apoyada por sus seguidores.

«Al final Nicolás Maduro va a lograr algo muy importante, unir a Venezuela, todos contra él, y destruir el legado chavista completamente», dijo Borges.

Por su parte, el primer vicepresidente de la AN, Freddy Guevara, afirmó en la misma rueda de prensa de la MUD que la convocatoria de Maduro «es una movida de una persona acorralada que quiere huir hacia adelante» y aseguró que este será «el último error del dictador».

El chavismo y la oposición polarizan de nuevo las calles de Caracas

 Miles de chavistas y opositores partieron este 1 de mayo de 2017 de nuevo en dos la capital con sendas marchas multitudinarias que muestran la división entre quienes respaldan al Gobierno de Nicolás Maduro, y quienes piden «elecciones ya», las dos visiones de un país cada vez más polarizado.

Con la jornada de hoy se completa exactamente un mes de la escalada de tensión política en el país detonada por la sentencia del Tribunal Supremo de Justicia que dejaba sin poder al Parlamento venezolano, el único de los poderes públicos en manos de la oposición.

La marcha opositora, que partió desde varias zonas de Caracas, fue disuelta por los cuerpos de seguridad cuando intentaba llegar hasta las sedes del Tribunal Supremo de Justicia y el Consejo Nacional Electoral, al primero para protestar su decisión contra el Parlamento, y al segundo para reclamar una actuación imparcial en unas futuras elecciones.

En una de las marchas, que partió desde el oeste de la capital, resultó herido en la cabeza un diputado opositor, y la multitud fue dispersada con gases lacrimógenos.

Caracas (Venezuela), 1 mayo de 2017. (EFE).- Miles de chavistas y opositores partieron hoy, 1 de mayo de 2017, de nuevo en dos la capital con sendas marchas multitudinarias que muestran la división entre quienes respaldan al Gobierno de Nicolás Maduro, y quienes piden «elecciones ya», las dos visiones de un país cada vez más polarizado. Manifestantes opositores se enfrentan con la Policía Nacional Bolivariana (PNB) hoy, lunes 1 de mayo de 2017, en Caracas (Venezuela). Efe.

Lo mismo ocurrió con la marcha que partía desde el este y que fue disuelta por los efectivos de seguridad cuando pretendía tomar una de las principales avenidas de la ciudad que conecta con el oeste.

Al mismo tiempo, otra multitudinaria manifestación chavista recorría el centro de Caracas para llegar hasta la Avenida Bolívar y dar su respaldo a Maduro, eje del gobierno de la llamada «revolución bolivariana», símbolo de la continuidad del legado del fallecido presidente venezolano Hugo Chávez.

A pesar de la amenaza de lluvia, los simpatizantes del Gobierno se congregaron en varios puntos de Caracas, resguardados por funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana (PNB, policía militar).

Varias tarimas fueron escenarios para la organización y logística y para que los dirigentes chavistas transmitieran sus palabras a los presentes.

Uno de ellos fue el exparlamentario Freddy Bernal, quien desde una tarima en La Campiña, en el este de la ciudad, pidió marchar con «convicción» y «con la misma lealtad a Chávez y al presidente Nicolás Maduro».

En consonancia con Bernal, una trabajadora de una filial de la estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa) dijo a Efe que celebraba la fecha como «un día de honra» y de «dignificación» de aquellos venezolanos que, según ella, fueron «visibilizados» gracias a Hugo Chávez.

Las convocatorias oficialistas respondían también al llamado del Gobierno venezolano a manifestarse en favor de la paz y en rechazo a la violencia que, asegura, promueve la oposición.

Maduro anunció a los asistentes la convocatoria del «poder constituyente originario» de «la clase obrera», una fórmula para conformar una Asamblea Nacional Constituyente como la única alternativa, según dijo, de lograr la paz en el país y vencer el supuesto «golpe de Estado» en su contra.

La Asamblea Constituyente requiere de la elección de representantes de la ciudadanía para reformular el Estado con la modificación de, al menos, partes de la actual Constitución vigente en el país desde 2000.

El anuncio de Maduro generó enseguida el rechazo de la oposición, reunida en la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), que llamó al «pueblo» a «rebelarse» ante la convocatoria «fraudulenta» del presidente a modificar la Constitución, una movida que consideró es otro «golpe de Estado».

«Lo que ha pasado hoy (…) es el golpe de Estado más grave en la historia venezolana, es Nicolás Maduro disolviendo la democracia y disolviendo la república, frente a eso la Unidad Democrática y los diputados de la Asamblea Nacional llamamos a rebelarse al pueblo de Venezuela», dijo el presidente de la Cámara, Julio Borges, como vocero de la MUD.

Los opositores han respondido a la decisión de Maduro con nuevas convocatorias de protesta callejera.

Para esta noche, la MUD instó a un cacerolazo masivo en todo el país, sobre todo para los que viven en el oeste de la capital, donde se ubica el palacio presidencial de Miraflores, dijo Borges.

Mañana, anunció, también se realizará una sesión en la Asamblea Nacional (AN, Parlamento) en la que se discutirá «lo que significa este golpe de Estado» y se darán detalles para una «mega acción de calle» para el próximo miércoles.

Las protestas y manifestaciones que se han dado en el país durante el último mes, a favor y en contra del Gobierno, muchas de ellas con desenlaces de violencia, han dejado un saldo de 29 muertos, centenares de lesionados y detenidos.