Efe – La ministra de Justicia, Dolores Delgado, ha incidido en que el Tribunal Constitucional ya ha señalado que «los tiempos son los normales» y ha recordado que la huelga de hambre de las personas en prisión es una situación que ya está prevista y contemplada en la doctrina del tribunal de garantías desde 1990, tras la protesta de presos de los Grapo. Ha rechazado por ello hacer más comentarios, pero sí ha querido dejar claro que «en España no hay presos políticos». Madrid (España), lunes 4 de diciembre de 2018. fotografía: MADRID (ESPAÑA), 04.12.2018. La fiscal general del Estado, María José Segarra (i), conversa con el secretario de Estado de Justicia, Manuel Jesús Dolz Lago, durante un desayuno informativo protagonizado por la ministra de Justicia, Dolores Delgado, hoy en Madrid. Efe.
La fiscal general del Estado, María José Segarra, ha expresado hoy su «preocupación» desde el punto de vista personal por la huelga de hambre iniciada por cuatro implicados en la causa del proceso soberanista catalán, pero ha subrayado que no hará variar el criterio del ministerio público.
En declaraciones a los medios tras asistir a un desayuno informativo protagonizado por la ministra de Justicia, Dolores Delgado, Segarra ha recalcado que la Fiscalía, que acusó de rebelión a los dirigentes independentistas procesados en el Tribunal Supremo, seguirá actuando bajo los principios de legalidad y conforme a derecho.
Josep Rull, Joaquim Forn, Jordi Sànchez y Jordi Turull ha iniciado una huelga de hambre para protestar contra lo que consideran un «bloqueo» de sus recursos de amparo en el Tribunal Constitucional, pero este institución, ha apuntado Segarra, «ha manifestado sus tiempos».
Por su parte, Delgado ha incidido en que el TC ya ha señalado que «los tiempos son los normales» y ha recordado que la huelga de hambre de las personas en prisión es una situación que ya está prevista y contemplada en la doctrina del tribunal de garantías desde 1990, tras la protesta de presos de los Grapo.
Ha rechazado por ello hacer más comentarios, pero sí ha querido dejar claro que «en España no hay presos políticos».
Por respeto a la independencia judicial ha rechazado responder a la pregunta de si la prisión preventiva de los implicados en la causa del «procés» dura ya demasiado tiempo y ha evitado también hablar de un hipotético futuro indulto.
«No vamos a hacer justicia ficción», ha afirmado recordando que primero tiene que haber una sentencia firme.
