Barcelona (Reino de España), jueves 11 de julio de 2024 (Lasvocesdelpueblo).- El separatismo y socialismo son 2 caras de la misma moneda o moneda con mucha cara. Asi advirtieron este jueves los 11 de VOX en la Cámara autonómica catalana. VOX vota en contra de la reforma del Reglamento del Parlament y acusa al PSC de ser el «flotador del separatismo». Joan Garriga Doménech: «Esta reforma solo pretende favorecer a golpistas fugados de la justicia, a los quema containers de la CUP y censurar a VOX».
VOX ha votado hoy contra la reforma del reglamento del Parlament de Catalunya y ha acusado al PSC y a Salvador Illa de ser el «flotador» del separatismo e instrumentalizar la Mesa para aprobar una reforma «anticonstitucional y sectaria».
El portavoz del grupo parlamentario de VOX, Joan Garriga Doménech, ha denunciado que la reforma solo pretende facilitar el voto telemático de «golpistas que huyeron de la justicia» como «Carles Puigdemont Casamajó, Lluís Puig Gordi y Rubén Wagensberg Ramón», favorecer a los «quemacontainers de la CUP», para que puedan conformar «grupo propio», e impulsar un «nuevo método para vetar a VOX».
«Y es que el separatismo, pese a estar de capa caída, ha encontrado en el Partido Socialista (PSC) un flotador, un socio fiable para todos sus desmanes que tienen como fin acabar con la normalidad institucional», ha recalcado.
De igual manera, Garriga ha reprochado a las fuerzas políticas proponentes que, en vez de abordar los problemas económicos, la crisis de natalidad y la gravísima crisis de inseguridad e inmigración que vive Cataluña acometan esta reforma.
«Separatismo y socialismo son 2 caras de la misma moneda o moneda con mucha cara», ha dicho el portavoz de VOX tildando la reforma de «inconstitucional y sectaria». Así Garriga ha recordado que el Tribunal Constitucional (TC) ha reiterado constantemente la inconstitucionalidad del voto delegado con la sentencia 93/2022.
El político catalán ha denunciado la «pretensión de aislar a VOX» para que su voto no sea decisivo en la aprobación de las declaraciones institucionales, «vetando así a los 250.000 catalanes que confiaron en VOX».
Por último, se ha mostrado convencido de que Puigdemont acabará en prisión «por todo el daño hecho a los catalanes, que Cataluña es parte indisoluble de España y que solo “con barrios seguros sin inmigración masiva e ilegal, podremos garantizar el futuro de nuestra región, pese a lo que digan el resto de los partidos».