4 encapuchados armados roban y destruyen la furgoneta con todo el material informático de la familia Pujol 

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FOTOGRAFÍA. CATALUÑA (ESPAÑA), AÑO 2018. En la imagen, los separatistas, el expresidente de Gobierno de la Generalidad de Cataluña y de Convergencia, Jordi Pujol Soley, y su esposa conocida en investigaciones policiales como «La Madre Superiora», Marta Ferrusola, padres de la «organización criminal» 'Familia Pujol' este año 2018, tras los golpes de estado separatistas perpetrados por el separatismo en Cataluña. ACN

Lasvocesdelpueblo y Agencias. Barcelona (España), jueves 11 de noviembre de 2021. La llamada ‘Familia Pujol» (Jordi Pujol Soley, expresidente de Gobierno de la Generalidad de Cataluña; su esposa, conocida en investigaciones policiales como «La Madre Superiora», Marta Ferrusola; y sus hijos, todos integrantes de una «organización criminal», pendientes de un Juicio en la Audiencia Nacional) ha sido víctima de un supuesto «robo» que solo se ve en película de ficción. Así ha informado la radiotelevisión pública regional catalana TV3 este jueves, 11 de noviembre de 2021. Al parecer, un grupo de personas supuestamente armadas robaron curiosamente y destruyeron inmediatamente una furgoneta con «todo el material informático incautado a la Familia Pujol desde el 2014, en la investigación por supuesto blanqueo».

«23 de noviembre de 2020: Los abogados de la Familia Pujol Ferrusola habían contratado un Servicio a la compañía de transporte de mercancías MRW». «Dentro de una furgoneta, se había colocado todo el material informático incautado desde el 2014 en la investigación en la Audiencia Nacional por supuesto blanqueo de capitales». «Ordenadores, pendrives, tabletas y teléfonos móviles del expresident Jordi Pujol y de sus siete hijos», recoge TV·.

Finalmente, habían conseguido que la justicia les devolviera todo este material, que ya había sido analizado al por menor. Debía realizar el trayecto de Madrid a Barcelona.

Pero nunca llegó a su destino. Así lo ha destapado el colaborador del programa «Todo se mueve», Carlos Quílez, y ha sido confirmado, después, por los Servicios Informativos de TV3.

«19:45 horas; Barrio de Puente de Vallecas, en Madrid: La furgoneta con todo el material informático de la familia Pujol se detiene en un semáforo». «Otro vehículo, un todoterreno negro con los cristales tintados, se cruza». «Salen cuatro hombres encapuchados y armados con pistolas». «Rompen los cristales de una ventana de la furgoneta». «Y sacan al conductor a la fuerza». «Y huyen con los dos vehículos».

Poco después, la furgoneta robada aparece totalmente calcinada en un descampado.

Todo el material informático de los Pujol ha sido destruido o extraviado. Son 15 pendrives, 8 ordenadores y varios monitores, teléfonos móviles, tarjetas de memoria, tabletas y varios DVD.

El juzgado de instrucción número 8 de Madrid sigue sus investigaciones. Intenta averiguar con qué objetivo se produjo el robo. ¿Querían conseguir los ordenadores de los Pujol? ¿O buscaban otras mercancías que también transportaba la furgoneta y que no tenían nada que ver con su familia?

El conductor de la furgoneta declaró que prácticamente todo lo que llevaba era el material informático de los Pujol, pero explicó que también llevaba una pequeña caja con varios relojes de alta gama.

En el programa «Todo se mueve», el periodista que ha destapado el caso, Carlos Quílez, ha calificado los hechos así: «Que el 2% o el 5% de las mercancías que llevara fueran estos relojes de alta gama y que se montara ese robo tan de película por cuatro relojes, por muy de alta gama que fueran, no deja de ser extraño».

Ocurre justo cuando todo está listo para que la Audiencia Nacional fije la fecha para juzgar al expresidente separatista Jordi Pujol Soley y a sus siete hijos por supuesta asociación ilícita y por blanqueo de capitales, entre otros delitos.

El juicio deberá determinar la procedencia del dinero que la familia Pujol Ferrusola tuvo en cuentas en Andorra y sin declarar durante más de 20 años .

Para las defensas, el origen de ese dinero es la deja o el legado del abuelo Florenci . Un dinero que tenía en Suiza y que quiso dejar a Marta Ferrusola ya sus siete nietos. La defensa sostiene que, en los años 90, ese dinero se transfirió a Andorra, que Jordi Pujol Ferrusola los invirtió, los hizo crecer y los repartió entre sus hermanos.

También explican que, poco antes de la confesión pública del expresidente el 25 de julio de 2014 , este dinero se transfirió a España y se regularizó.

La Audiencia Nacional y las acusaciones no se creen esa versión. Sostienen que el dinero en Andorra procede de la corrupción.

En concreto, de comisiones ilegales a cambio de adjudicaciones de concursos públicos que se habrían ocultado en el extranjero y que, después, se habrían blanqueado.