Ada Colau dimite para «repensar la izquierda» y refrescar ideas e impulsar proyectos nuevos»

¿La cuestión es por qué ahora cuando la coalición Sumar de su partido y su portavoz parlamentario Íñigo Errejón Galván ha abandonado la política tras varias denuncias de varias valientes mujeres por agresiones sexuales y comportamientos machistas y que lo peor sea que desde las filas de Sumar y sus socios se sabía lo de las denuncias de violencia machista de Errejón mucho antes de las elecciones generales de julio de 2023, pero que los líderes de los partidos integrantes de Sumar, como el de Ada Colau Ballano, acordaron negociar y pactar el silencio de las víctimas? ¿Ada Colau Ballano conocía las agresiones sexuales de Íñigo Errejón Galván siendo ella muy amiga de la líder de Sumar y vicepresidente segunda dle gobierno de España, Yolanda Díaz Pérez?

0
85
FOTOGRAFÍA. BARCELONA (REINO DE ESPAÑA), 25 DE OCTUBRE DE 2024. Después de una década dedicada al activismo extremista que la llevó a convertirse en la primera alcaldesa de Barcelona, la ultra Ada Colau Ballano dará un paso al lado en el consistorio para "repensar la izquierda", aunque sin ser necesariamente un adiós definitivo, ha dicho que es "bueno cambiar, moverse, refrescar ideas e impulsar proyectos nuevos". Efe
FOTOGRAFÍA. BARCELONA (REINO DE ESPAÑA), 25 DE OCTUBRE DE 2024. Después de una década dedicada al activismo extremista que la llevó a convertirse en la primera alcaldesa de Barcelona, la ultra Ada Colau Ballano dará un paso al lado en el consistorio para "repensar la izquierda", aunque sin ser necesariamente un adiós definitivo, ha dicho que es "bueno cambiar, moverse, refrescar ideas e impulsar proyectos nuevos". Efe

Barcelona (Reino de España), viernes 25 de octubre de 2024 (Lasvocesdelpueblo y Agencias).- Después de una década dedicada al activismo extremista que la llevó a convertirse en la primera alcaldesa de Barcelona, la ultra Ada Colau Ballano dará un paso al lado en el consistorio para «repensar la izquierda», aunque sin ser necesariamente un adiós definitivo, ha dicho que es «bueno cambiar, moverse, refrescar ideas e impulsar proyectos nuevos».

¿La cuestión es por qué ahora cuando la coalición Sumar de su partido y su portavoz parlamentario Íñigo Errejón Galván ha abandonado la política tras varias denuncias de varias valientes mujeres por agresiones sexuales y comportamientos machistas y que lo peor sea que desde las filas de Sumar y sus socios se sabía lo de las denuncias de violencia machista de Errejón mucho antes de las elecciones generales de julio de 2023, pero que los líderes de los partidos integrantes de Sumar, como el de Ada Colau Ballano, acordaron negociar y pactar el silencio de las víctimas? ¿Ada Colau Ballano conocía las agresiones sexuales de Íñigo Errejón Galván siendo ella muy amiga de la líder de Sumar y vicepresidente segunda dle gobierno de España, Yolanda Díaz Pérez?

«Hacía tiempo que en Barcelona no había un modelo de ciudad de futuro para afrontar nuevos retos que hacía tiempo que no se afrontaban, como las desigualdades, la contaminación, la masificación turística, la especulación inmobiliaria», ha destacado la exalcaldesa en referencia a sus inicios en el consistorio.

La exalcaldesa y líder de la extrema izquierda «Barcelona en Comú (BComú)», que dejará de ser concejal este viernes, le arrebató la alcaldía a Xavier Trias (CiU) en 2015, consiguiendo dos concejales más -11 a 9- y fue reelegida con polémica en 2019 tras aceptar el apoyo de la candidatura del exprimer ministro francés Manuel Valls.

Sin embargo, no pudo repetir la gesta en 2023, superada por Trias (esta vez en JxCat), con 11 concejales (dos más que BComú), y por el socialista Jaume Collboni, con 10, al que facilitó la alcaldía teniendo tan solo 300 votos más que ella.

Ahora, con su formación en la oposición después de que el PSC encontrara en la ultraizquierda separatista ERC una mejor alianza que en los comunes, dará un paso al costado para centrarse en la «Fundació Sentit Comú» y para «repensar la izquierda» con otros socios internacionales, aunque no cierra la puerta a volver en un futuro.

Una vida marcada por el activismo

Colau (Barcelona, 1974), hija del barrio del Guinardó y la mayor de cuatro hermanas, nació horas después de la ejecución de Salvador Puig Antich, algo que su madre siempre le ha recordado y que considera que marcó su compromiso con el cambio social.

Estudió Filosofía en la Universidad de Barcelona (UB), atravesó un periodo laboral que define como «precario», con trabajos como hacer de Papa Noel o dar clases particulares, y se convirtió en una de las figuras referentes del activismo social en España como portavoz de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH).

Colau inició su carrera política en 2014, con la creación de Guanyem Barcelona, plataforma ciudadana que posteriormente se convertiría en la izquierda radical Barcelona en Comú y con la que un año después sacudió el tablero político rompiendo el dominio bipartidista de PSC y CiU tras ganar las elecciones municipales de 2015.

Una vez convertida en la primera alcaldesa de Barcelona, su labor se centró en combatir las desigualdades, con una marcada agenda feminista y en favor del colectivo LGTBI, y una transformación urbanística -las supermanzanas-, para mejorar la calidad de vida de los barceloneses y combatir la contaminación.

Todo ello, en un contexto de inestabilidad política en el que tuvo que cruzar mares tempestuosos, como el ‘procés’, fenómeno ante el que siempre ha adoptado una postura neutral; gestionar la crisis de los desahucios ante las críticas del asociacionismo, nunca conforme con sus medidas vinculadas a la vivienda; tensiones con el sector turístico; o la pandemia de la Covid-19.

La guerra en Gaza ha sido una de las últimas luchas en las que Colau ha trasladado su activismo a una dimensión internacional, rompiendo relaciones con el Estado de Israel y suspendiendo su hermanamiento con Tel Aviv después de acusar a ese país de cometer un «apartheid» contra el pueblo palestino sin nunca decir una sola palabra contra el islamofascismo de los grupos palestinos terroristas y de los grupos chiíes invasores del Líbano, yemen, norte de siria y sur de Irak, una cruzada antisemita totalitaria que busca la destrucción de israel y el exterminio de los israelíes en suelo soberano del Estado de Israel, pero que a la política ultra y antisemita Ada Colau Ballano no le importa y nunca ha criticado su violencia en el país hebreo.

Su política exterior también se ha destacado por su presencia en distintos foros y conferencias internacionales, su apuesta por la acogida de refugiados o su vicepresidencia europea en la Comisión Directiva del C40, principal red mundial de ciudades que trabajan para hacer frente a la crisis climática.

Fin de una etapa para unir a las izquierdas

Después de quedar tercera en las elecciones del pasado 28 de mayo y de diluirse la posibilidad de encadenar una tercera legislatura, favoreció la investidura, junto con el PP, del PSC de Jaume Collboni, que recibió 300 votos más y recuperó la alcaldía de Barcelona 12 años después del fin del ciclo con Jordi Hereu.

No obstante, la exalcaldesa ultra reconoció meses después que el socialista le generó «sorpresa y decepción» por su «giro a la derecha» y no querer «un pacto de izquierdas», por lo que animó a los Comunes a estar en la oposición para ser la «alternativa» en las elecciones de 2027, quién sabe si con ella como candidata.

Este viernes, Colau se despedirá del Ayuntamiento de Barcelona en su último pleno como líder de BComú, cargo que asumirá Janet Sanz, y se centrará en fortalecer la red internacional de las izquierdas, compartiendo experiencias con aliados ideológicos y combatiendo lejos de las instituciones a la derecha.