Readacción – «Indiscutiblemente y de pie, mi solidaridad entera ante un Estado neurótico», xenofóbico -demofòbic-, «autoritario y inquisitorial», español. «imputaciones del 9 de noviembre». Así ha manifestado este martes el extremista de la batasuna catalana y líder de CUP, David Fernández a través de su cuenta Twitter en las redes sociales; tras conocer la imputación de los delincuentes catalanes: el diputado electo y presidente en función de Cataluña, Artur Mas Gavarró, su ex-vicepresidenta, Joana Ortega, y la actual consejera de Enseñanza de Cataluña, Irene Rigau. Barcelona, 29 de septiembre 2015. <Fotografía: El candidato de CUP al 27-s, Antonio Baños Boncompain (i) abrazando al líder de CUP, David Fernández, tras los resultados del 27-s. Foto archivo>.
«La CUP rechaza de plano la imputación contra Artur Mas, Irene Rigau y Joana Ortega para poner las urnas el 9N», así ha reaccionado de 
entrada el partido extremista catalán en un comunicado hoy. «La CUP entiende que estamos ante un nuevo ataque contra las instituciones del país por parte de un estado demofòbic que utiliza políticamente las instancias judicial para intentar doblegar la voluntad del pueblo de catalán», puntualizan.
La formación extremista alerta al «Estado que la desobediencia vivida el 9N será una práctica habitual en adelante por parte de las instituciones catalanas y más después del mandato claro expresado el pasado 27 de septiembre en las urnas». En este sentido, finalizan el comunicado exigiendo «el archivo de las actuaciones contra Mas, Rigau y Ortega ya que han sido imputados por su condición de representantes institucionales de Cataluña que cumplían con un mandato popular de celebrar un referéndum», sentencian fuentes del partido de los amigos de la batasuna vasca.
Incontestablement i dempeus, la meua solidaritat sencera davant un Estat neuròtic, demofòbic, autoritari i inquisitorial. Imputacions #9N — DavidCUP #Tram92#όχι (@HiginiaRoig) septiembre 29, 2015
