El delincuente Bárcenas pide su reingreso en su partido como trabajador pero la dirección del PP lo rechaza

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el ladrón del pp

El delincuente corrupto del Partido Popular de Mariano Rajoy Brey, Bárcenas, dejó de ser militante en 2010 a raíz del caso Gürtel. Estuvo trabajando más de 20 años controlando las finanzas del PP. Al no aceptar su reingreso, ha presentado una demanda. Habrá acto de conciliación entre Bárcenas y el PP el 29 de mayo 2015. El extesorero y exsenador delincuente corrupto del Partido Popular, Luis Bárcenas, ha pedido su reingreso como trabajador en la formación en la que ya estuvo trabajando más de 20 años pero la dirección del partido le ha denegado esa solicitud, según han informado a Europa Press y Efe fuentes ‘populares’. Desde el PP «dan por resuelto» el tema, aunque no han dado más explicaciones al respecto. Tan solo el coordinador de la campaña nacional del PP, Pablo Casado, ha hablado de ello en una entrevista en La Sexta, recogida por Europa Press, en la que ha advertido que a Bárcenas debería preocuparle «cuándo va a volver a la cárcel» y no «cuándo va a regresar al PP», ya que «nunca» lo va a hacer.

Casado ha remarcado que el Partido Popular «le ha cesado, expulsado», y además se presentó como acusación particular en el caso (aunque el juez terminó expulsándolo). Bárcenas, que dejó de ser militante del PP en abril de 2010, al hilo del escándalo por el caso Gürtel, abandonó el pasado mes de enero la prisión de Soto del Real. Fue tesorero del PP desde junio de 2008 hasta su dimisión el 8 de abril de 2010, cuando solicitó su baja temporal en el partido, aunque el partido continuó pagándole hasta enero de 2013. Fue lo que el PP denominó «indemnización en diferido».

Ante la negativa del PP a aceptar su reingreso como trabajador en el PP, el extesorero ha presentado una nueva demanda contra la formación. Por lo pronto, ya hay fijado un acto de conciliación para el 29 de mayo en el Servicio de Mediación, Arbitraje y Conciliación (SMAC), han confirmado fuentes jurídicas. Desde que arrancó el caso Gürtel en 2009, uno de los asuntos más criticados fue la llamada indemnización en diferido acordada con el extesorero. La oposición criticó duramente que si en 2010 se extinguió la relación laboral se le siguiera pagando las cuotas de la Seguridad Social. La dirección del PP defendió entonces ese acuerdo y rechazó que hubiera fraude de ley por pagar sus cuotas a la Seguridad Social tras ser despedido.

Este asunto acabó en los tribunales. Bárcenas presentó una demanda por despido improcedente y pidió ser indemnizado por haber causado baja en el Partido Popular sin su consentimiento ni autorización, pero la demanda fue desestimada. Recurrió posteriormente ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM). Y hace precisamente dos semanas, el TSJM aseguró que el Partido Popular «simuló» una relación laboral con Bárcenas y no es razonable pagarle 21.300 euros al mes sin trabajar.

En concreto, en su auto el tribunal concluye que el PP y Bárcenas «simularon» una relación laboral entre el 16 de abril de 2010 y el 31 de enero de 2013 y que «no puede aceptarse como mínimamente razonable» que la formación se «permitiera» pagarle durante ese periodo 21.300 euros mensuales y le proporcionara un chófer, una secretaria personal o cestas en Navidad «sin recibir ninguna contraprestación» por ello. Con esta sentencia de la Sala de lo Social se desestimaba el recurso presentado por Bárcenas contra la resolución del Juzgado de lo Social número 16 de Madrid, que también desestimaba su demanda contra el PP por despido improcedente y su petición de ser indemnizado con 905.353 euros.

El caso Gürtel saltó a la luz en 2009. Bárcenas fue imputado por presuntos delitos de cohecho y delito fiscal al año siguiente y el 8 de abril de 2010 solicitó su baja temporal como militante del PP. También entonces dejó definitivamente sus funciones como tesorero nacional del partido. El 19 de abril de 2010, Bárcenas anunciaba también que dejaba su escaño en el Senado, al tiempo que aseguraba entonces que su marcha de la política era irrevocable y no volvería «jamás» a aspirar por un cargo público.

<redacción – lasvocesdelpueblo y agencias>