El exceso de muerto ocultado en Cataluña durante el COVID 19 eleva la cifra de muertos a más de 43 mil

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FOTOGRAFÍA. BARCELONA (ESPAÑA), ABRIL 01.04. 2020. Un operario del cementerio de Santa Margarida de Montbui (Barcelona) se dispone a introducir un féretro en un nicho, este miércoles, decimoctavo día del estado de alerta que decreto el Gobierno para frenar la pandemia de coronavirus, en la que ya se ha producido más de 8.000 muertes en España. Efe

Redacción.- Barcelona (España), miércoles 27 de mayo de 2020. El Sistema de Monitorización de la Mortalidad Diaria (Sistema MoMo) ha incorporado miles de certificados de defunción que estaban acumulados en los registros civiles, principalmente el de la ciudad de Barcelona, que no notificó casi ningún fallecimiento en los dos últimos meses.

La pasada semana, el sistema MoMo cifraba en algo más de 93.000 las muertes ocurridas en España —independientemente de la causa de defunción— entre el 9 de marzo y el 3 de mayo, cuando más golpeó el coronavirus en nuestro país, lo que representaba un exceso de mortalidad del 50% sobre lo habitual para estas fechas (unas 63.000 muertes), así recoge El Confidencial. 

PDF Informe MoMo

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Sobre el (MoMo)

El Sistema de Monitorización de la Mortalidad Diaria (MoMo), gestionado por el Centro Nacional de Epidemiología del Instituto de Salud Carlos III, tiene por objetivo identificar las desviaciones de mortalidad diaria por todas las causas, observada con respecto a la esperada según las series históricas de mortalidad y comunicar al Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social (MSCBS) las desviaciones significativas de mortalidad para su investigación o para la puesta en marcha de las medidas de control, como fuente de información complementaria a la información meteorológica.

El sistema de monitorización de la mortalidad diaria analiza la información procedente de dos fuentes distintas. Por un lado utiliza datos de mortalidad diaria por todas las causas procedentes del Instituto Nacional de Estadística (INE), disponibles hasta fin de 2015. Los datos de mortalidad diaria recientes se obtienen diariamente del Registro General de Registros Civiles y Notariados del Ministerio de Justicia y, en particular, de los 3820 registros civiles informatizados, que dan servicio a algo más del 92% de la población española.

El Sistema de Monitorización de la Mortalidad Diaria (MoMo), permite ver la evolución del número de defunciones diarias observadas frente a las defunciones esperadas, junto con el número de días consecutivos observados con exceso de mortalidad y la magnitud de dicho exceso. De este modo, MoMo estima los excesos de mortalidad por todas las causas que pueden identificar el impacto de situaciones de riesgo y en consecuencia es, un indicador indirecto de diversos problemas de importancia en salud pública, como pueden ser las temperaturas extremas. Sin embargo este sistema tiene también sus limitaciones, como por ejemplo que es inespecífico al no incluir variables climatológicas ni causa de muerte en el análisis.

Un golpe de 12.000 muertes más durante la pandemia del covid-19

Según El Confidencial en una edición de este miércoles, 27 de mayo de 2020,, el sistema de monitorización de la mortalidad (MoMo) ha aflorado de golpe 12.000 muertes más durante la pandemia del covid-19. Esta actualización eleva ya el exceso de mortalidad a 43.000 fallecimientos durante la pandemia, cuando hasta ahora se estaba manejando la cifra de 30.000.

El sistema ha incorporado miles de certificados de defunción que estaban acumulados en los registros civiles, principalmente el de la ciudad de Barcelona, que no notificó casi ningún fallecimiento en los dos últimos meses.

La pasada semana, el sistema MoMo cifraba en algo más de 93.000 las muertes ocurridas en España —independientemente de la causa de defunción— entre el 9 de marzo y el 3 de mayo, cuando más golpeó el coronavirus en nuestro país, lo que representaba un exceso de mortalidad del 50% sobre lo habitual para estas fechas (unas 63.000 muertes).

Con la nueva actualización de los datos, esta cifra se eleva a las 105.000, suponiendo un exceso de mortalidad del 68%.

Como se aprecia en la siguiente tabla, este aumento de las defunciones registradas se debe especialmente a la incorporación de nuevos datos procedentes de Cataluña, que ha pasado de contabilizar 14.000 muertos en estos dos meses a superar los 21.500, lo que ha elevado el exceso de mortalidad del 39% al 108%. Madrid y Castilla-La Mancha, que han sido golpeadas especialmente por la pandemia, también han visto actualizadas sus cifras de manera importante.

Esta actualización eleva todas las cifras diarias y semanales de mortalidad que estábamos manejando hasta ahora. Por ejemplo, en la peor semana del coronavirus en nuestro país, la del 30 de marzo al 5 de abril, más de 19.000 personas murieron en España, cuando el sistema MoMo situaba esta cifra en las 16.000.

Lo mismo ocurre con el día más negro del covid-19, el 31 de marzo: hasta ahora, conocíamos que al menos 2.500 personas habían fallecido ese día. En realidad, fueron casi 3.000.

Esas nuevas muertes, que hasta ahora no habían sido contabilizadas, surgen del retraso en la notificación de los registros civiles, muchos de ellos colapsados durante lo peor de la pandemia, en los meses de marzo y abril».

Estos días estamos trabajando en introducir en el sistema de MoMo las defunciones con mucho retraso. Prevemos tener a lo largo de la semana esta información en el sistema», explica a El Confidencial la epidemióloga Amparo Larrauri, del Grupo de Vigilancia de Gripe del Instituto de Salud Carlos III.

El MoMo señala en sus informes que «utiliza la información de mortalidad por todas las causas que se obtiene diariamente de 3.929 registros civiles informatizados del Ministerio de Justicia, correspondientes al 93% de la población española y que incluyen todas las provincias». «El Ministerio de Justicia concentra esta información y la notifica diariamente al sistema MoMo», apunta Larrauri.

Si los registros no inscriben los expedientes de defunción, Justicia no obtiene esa información y el MoMo no la utiliza para sus cálculos. Es lo que ha pasado con el Registro Civil de Barcelona. Casi el 100% de las muertes entre el 12 de marzo y el 10 de mayo, unas 4.300, no fue contabilizado por el sistema de monitorización de la mortalidad.

El MoMo ya avisaba en sus informes de que estaba infraestimando «notablemente» los datos de la capital catalana y, como consecuencia, los de la comunidad. «Cabe destacar que desde el 12 de marzo, se han notificado 16 defunciones desde los registros civiles, del municipio de Barcelona, que el sistema MoMo contabiliza como 333 defunciones observadas por la corrección por retraso.

La mortalidad esperada desde tal fecha hasta el día actual es de 2.490. Teniendo en cuenta el periodo de exceso generalizado, se estima que se está infraestimando notablemente la mortalidad observada en este municipio y, por tanto, en su comunidad», decía el 10 de mayo.

La cifra de 43.000 es similar a la estimación de un estudio realizado por tres ingenieros de la Universidad Politécnica de Madrid del que informó El Confidencial el 2 de mayo. Rafael Cascón, Miguel Berzal y Francisco Santos calcularon que la mortalidad durante la pandemia había sido bastante superior a la registrada por el MoMo hasta el 29 de abril.

El sistema de monitorización cifraba en esa fecha en 30.662 el exceso de muertes, mientras que ellos elevaban los fallecimientos a 42.803.