Lasvocesdelpueblo y Agencias – La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha rechazado este lunes la propuesta del presidente de la Generalidad de Cataluña, Carles Puigdemont, de exponer en el Congreso el referéndum de autodeterminación en Cataluña sin someter la cuestión a una votación, porque «el Congreso no es un salón de actos para dar una conferencia». Madrid (España), martes 13 de junio de 2017. Fotografía: La vicepresidenta del Gobierno en funciones, Soraya Sáenz de Santamaría, durante la rueda de prensa. Efe.
En una entrevista en ‘Los Desayunos’ de TVE, Sáenz de Santamaría también ha acusado al Gobierno y los partidos separatistas de querer imponer un «discurso único» en Cataluña, y ha atribuido el acto de este domingo en una «estrategia de tensión «por parte del separatismo por» provocar «una respuesta del Estado.
Según la vicepresidenta, en los próximos meses los separatistas desplegarán esta «estrategia de tensión» que busca «aglutinar» los convencidos ante las «diferencias graves» entre «la antigua Convergencia y ERC».
«Necesitan provocar el Estado para una estrategia de confrontación que movilice», ha dicho la vicepresidenta, que ha acusado a las fuerzas separatistas de buscar el «victimismo».
Según Sáenz de Santamaría, esta estrategia choca con la realidad social en Cataluña, donde la gente «está cansada» de este «rollo» y de la «matraca del separatismo que no lleva a ninguna parte».
Ha insistido en que su gobierno actuará «sin una palabra más alta que la otra» y «no permitirá que el referéndum se celebre», porque «es contrario a la democracia». En este marco, Sáenz de Santana acusó a los separatistas de faltar a las libertades democráticas de los ciudadanos.
«Es vergonzoso como no se deja hablar a la gente que piensa otra cosa, y cómo se quiere marcar un discurso único», ha afirmado la vicepresidenta.
Respecto a la petición del presidente de la Generalidad de asistir al Congreso para exponer el referéndum sin que ello se traduzca después en una votación, Sáenz de Santamaría ha ironizado sobre la contradicción, que a su entender, implica pedir «que vote todo el mundo» y pretender «prohibir que votamos en el Congreso».
«El congreso de los diputados no es un salón de actos para dar una conferencia, y él no puede pretender que el Congreso haya sólo los que le aplauden», ha dicho.
En este sentido, ha asegurado que Puigdemont se ha «acostumbrado a actos donde llevan» los separatistas «en autobuses».
«El congreso es un lugar donde se debate y se sacan conclusiones. Es curioso que quien pide votar quiere que no vote el Congreso».
En todo caso, reiteró que el presidente de la Generalidad tiene una «invitación» para debatir la cuestión en el Congreso y someterla a debate.
Puigdemont, ha dicho, puede «exponer sus argumentos» y «oír lo que opina el conjunto del pueblo español que es a quien corresponde tomar decisiones de esta naturaleza».
Sáenz de Santamaría también ha asegurado que su gobierno tiene en marcha medidas para impedir la celebración del referéndum ilegal.
Recordó la causa contra la consejera de Gobernación, Meritxell Borràs, y las actuaciones del Tribunal de Cuentas contra Mas, Ortega, Rigau y Homs.
«El gobierno ya trabaja para que se respete la legalidad», afirmó antes de reclamar a los funcionarios que «pidan las órdenes por escrito».
Según Sáenz de Santamaría, a pesar del mensaje del Gobierno el referéndum «no se celebrará» y todo ello responde a un clima de precampaña electoral.
«Yo espero que el resultado de estas elecciones permita abrir una senda de diálogo racional», afirmó
