Lasvocesdelpueblo y Agencias.- Barcelona (España),sábado 11 de septiembre de 2021. El independentismo ha llenado este sábado la Vía Layetana de Barcelona, con una manifestación menos multitudinaria que en los años anteriores a la pandemia -108.000 personas según la Guardia Urbana de Barcelona, 400.000 según datos de la entidad separatista Asamblea Nacional Catalana (ANC)- y con discrepancias estratégicas sobre la mesa de diálogo con España.
Eliminadas las últimas restricciones anticovid del Gobierno de la Generalidad de Cataluña hace tan solo 24 horas, y tras una Diada de 2020 sin apenas movilizaciones por la pandemia, el independentismo ha vuelto a las calles con una manifestación con movimiento, desde la plaza Urquinaona hasta la Estación de Francia, aunque las cifras de asistentes han quedado lejos de las 600.000 personas que la Urbana cifró en 2019, que fue la menos concurrida desde que se inició el procés en 2012.
Para esta convocatoria, la primera desde los indultos a los presos del procés, ANC ha fletado más de 200 autocares hacia Barcelona, una cifra significativamente más baja que la de 2019, cuando se llegó a los 1.300 autocares.
A la cita de este sábado -con muchas mascarillas, poca distancia social y con el conseller de Salud, Josep Maria Argimon, presente- ha acudido el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, recibido con algunos silbidos, contestados por sus partidarios con gritos de «presidente».
La manifestación de la Diada llega en plena división interna en el independentismo sobre cómo encarar la mesa de diálogo con el Gobierno de España, que se reactiva la semana que viene.
Mientras Aragonès y ERC la consideran una oportunidad de oro para plantear las reivindicaciones de amnistía y autodeterminación ante el Gobierno de Pedro Sánchez, para JxCat y la CUP se trata de una pérdida de tiempo.