Efe – El presidente de ERC, Oriol Junqueras, que permanece encarcelado en la prisión de Estremera (Madrid), ha sugerido hoy un plan B para Carles Puigdemont, combinando una presidencia «simbólica» con otra «efectiva», mientras que la CUP ha exigido cumplir la investidura acordada con JxCat y ERC. Madrid (España), viernes 2 de enero 2018. Fotografía: El preso golpista Oriol Junqueras, alias el ‘osito’. Archivo ACN.
En medio de las especulaciones sobre la posibilidad de que Puigdemont acabe dando un paso atrás para facilitar la investidura de un candidato alternativo de JxCat, Diario16.com ha publicado una entrevista con Junqueras, que respondió a las preguntas dictándolas a sus abogados y que dice esperar que Cataluña no se vea abocada a unas nuevas elecciones.
A la pregunta de si «es posible presidir la Generalitat desde el exilio», en alusión a Puigdemont, Junqueras razona: «La cuestión es si el Parlament puede investir a un diputado electo. Ahí radica un principio democrático elemental, lo que no quita que las circunstancias puedan obligar o impedir que esa presidencia sea efectiva. Y que se deba combinar una presidencia legítima, aunque simbólica, con una ejecutiva».
A su juicio, un problema parecido se plantearía si se planteara que fuera él quien presidiera el Govern: «La prisión tiene muchas limitaciones. Vendría a ser lo mismo en el fondo», ha afirmado.
Junqueras ha expresado «respeto» hacia la postura de Puigdemont desde Bélgica, aunque ha admitido que «eso no quita que no haya distintos puntos de vista».
«Hay que poner las luces largas, a menudo las cortas no te dejan ver todo el recorrido ni un horizonte», ha recalcado Junqueras, que ha reconocido haberse sentido «dolido» por no haber podido participar en la campaña electoral del 21D.
Por su parte, el presidente del Parlament, Roger Torrent, ha subrayado en Rac1 que Puigdemont «es y continuará siendo» su candidato a la presidencia de la Generalitat, aunque sólo convocará la sesión de investidura si tiene garantías de que será «efectiva».
Más tarde, en declaraciones a La Sexta, Torrent ha introducido un matiz: ha emplazado a las fuerzas soberanistas a buscar una salida al actual bloqueo: «Pido a los grupos políticos y a los partidos que trabajen en esa solución política que permita garantizar una investidura que efectivamente conlleve la toma de posesión, un gobierno y que este gobierno pueda gobernar».
Y mientras sobrevuela la posibilidad de un plan B, la CUP, que encajó con malestar la decisión de Torrent de aplazar la investidura de Puigdemont, ha lanzado hoy una advertencia a través de su diputado Vidal Aragonés: «Si alguien piensa que cuando tiene un acuerdo con la CUP se puede echar atrás, que se prepare».
«Que se prepare para una campaña en la calle de denuncia, que se prepare para no tener los cuatro votos de la CUP», ha alertado Aragonés en declaraciones a La Xarxa.
Mientras tanto, el ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha dado por hecho que Puigdemont y los exmiembros del Govern en prisión o en Bruselas serán en primavera inhabilitados para ostentar un cargo público una vez el juez del Supremo Pablo Llarena dicte auto de procesamiento por rebelión.
En declaraciones a Antena 3, Catalá ha explicado que después de que Llarena firme dentro de unos dos meses el auto de procesamiento y antes de que haya sentencia firme «para otoño o final de año», la ley de Enjuiciamiento Criminal establece que, en delitos como el de rebelión, los procesados «se sacan de la escena de la representación pública y de ejercer actividades políticas».
Catalá también ha advertido de que se tiene que volver a poner «el reloj en marcha» para que en el plazo máximo de dos meses haya una investidura o la convocatoria de nuevas elecciones, porque no se puede mantener «sine die» la situación actual.
El delegado del Gobierno en Cataluña, Enric Millo, ha afirmado que Cataluña necesita «cuanto antes» un «gobierno legal y sólido que se ponga a trabajar para resolver los problemas de la sociedad catalana».
Por su parte, la líder de Ciudadanos en Cataluña, Inés Arrimadas, ha afirmado que los mensajes filtrados de Puigdemont al exconseller Antoni Comín demuestran que no solo «se ha acabado» el ‘procés’, también su carrera política, y ha considerado que el independentismo «está fracturado» aunque «oculten» o «maquillen».
La alcaldesa de L’Hospitalet de Llobregat (Barcelona), la socialista Núria Marín, ha instado a los partidos independentistas a presentar una candidatura «realizable» y ha replicado a Junqueras que Cataluña necesita un presidente que «presida» y «mire por el interés general y no el partidista».
