España| La comunista Yolanda Díaz Pérez impulsa la ultraizquierda «SUMAR» sin la extrema izquierda «Podemos»

0
328
FOTOGRAFÍA. MADRID (ESPAÑA), 08.07.2022. La ministra de Trabajo y Economía Social desde enero de 2020 y vicepresidente segunda del Gobierno de coalición socialcomunista de España desde julio de 2021 y miembro destacado del Partido Comunista de España (PCE), Yolanda Díaz Pérez, durante la presentación de la nueva marca electoral de la ultraizquierda en España, que ha bautizado «SUMAR», su proyecto político con el que concurriría a las próximas elecciones municipales y generales, hoy, viernes 8 de julio, en el espacio cultural El Matadero, en Madrid. Efe.

Lasvocesdelpueblo y Agencias.- Madrid (España), viernes 8 de julio de 2022. La ministra de Trabajo y Economía Social desde enero de 2020 y vicepresidente segunda del Gobierno de coalición socialcomunista de España desde julio de 2021, que preside Pedro Sánchez Pérez Castejón (PSOE), y miembro destacado del Partido Comunista de España (PCE), Yolanda Díaz Pérez, no ha invitado a los líderes de los principales partidos de la izquierda radical en España al despegue de la nueva marca electoral de la ultraizquierda en España, que ha bautizado «SUMAR», su proyecto político con el que concurriría a las próximas elecciones municipales y generales. Díaz, que quita así al Partido Comunista de españa de la coalición ultra Unidas Podemos, ha querido que todo el protagonismo esté en los colectivos sociales para intentar recuperar el voto que en su día logró Podemos ocultando su verdadera cara de alta traición al pueblo español y a los obreros españoles, al pactar y aliarse más adelante con la élite burguesa globalistas, con el brazo político de la banda terrorista ETA (EH Bildu) llegando a afirmar su líder Pablo manuel Iglesias Turrión que «entiende de ETA la política» o afirmar que el asesino terrorista jefe de ETA durante la masacre de Hipercor (Barcelona) «es un hombre de paz», además de justificar la violencia contra las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, entregar el proyecto Podemos al separatismo en Cataluña, llegando a exigir en su programa electoral la celebración de un Referéndum de independencia en Cataluña o afirmar su líder Iglesias que «yo no puedo decir» la palabra «‘España'» sino el «Estado español«.

«Una enorme generosidad»

Ensanchar la democracia e impedir el paso a las derechas es el mensaje que ha lanzado este viernes Yolanda Díaz Pérez en el estreno de su proyecto político ante casi 5.000 personas, según los organizadores, que han abarrotado la plaza del Matadero de Madrid.

Construir una propuesta para la próxima década en la que el protagonismo es de la ciudadanía y no de los partidos es el objetivo de esta iniciativa que llevará a Díaz por toda España durante seis meses, antes de decidir si da el paso de liderar una candidatura electoral siempre y cuando -ha dejado claro- tenga el apoyo para hacerlo y ha insistido que para afrontar este proyecto en el que cabe todo el mundo se requiere «una enorme generosidad».

Durante su intervención ha repetido varias veces que esto no va de siglas, que esto va de «sumar, dialogar, tender la mano y después ser capaces de llegar a acuerdos para cambiar la vida de la gente, porque para eso vale la política».

GALERÍA
España| La comunista Yolanda Díaz Pérez impulsa la ultraizquierda "SUMAR" sin la extrema izquierda "Podemos"
Y como la nueva marca electoral «SUMAR» de Yolanda Díaz Pérez no va de partidos, trasladó expresamente a la secretaria general de Podemos, Ione Belarra Urteaga, que los de esta formación no acudieran al acto, aunque sí estaban representadas casi todas las fuerzas de ultraizquierda, incluidos los morados. Eso sí, de perfil bajo y caras poco conocidas, salvo el ultra exlíder de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares Trigo; Juan Carlos Monedero, uno de los fundadores de Podemos; y el secretario general del Partido Comunista de España (PCE), Enrique Fernando Santiago Romero, entre otros.

El lanzamiento de este movimiento ultraizquierdista SUMAR, que lo ha hecho coincidir con la Semana del Orgullo como un gesto hacia la diversidad que quiere transmitir, se celebra después de varios meses aplazándolo por las complicaciones que le han ido surgiendo a la ministra de Trabajo, primero con las negociaciones de la reforma laboral y luego las derivadas de la invasión rusa de Ucrania.

Al margen de estas vicisitudes, Díaz ha tenido que lidiar con el malestar de Podemos, que se ha sentido marginado de todo este proyecto que empezó a fraguarse después de que Pablo Iglesias la designara como su sucesora, una decisión que luego ha cuestionado en el marco del distanciamiento que marca desde hace meses las relaciones entre ambos.

Para Podemos, cuya marca está muy desgastada, Díaz supone una tabla de salvación y por ahora la dejan hacer y deshacer sin choques abiertos, pero no se resignan a dejar de ser una pieza clave en una eventual candidatura de la vicepresidente comunista de España, teniendo en cuenta que son la fuerza mayoritaria en la alianza electoral de la izquierda radical Unidas Podemos.

Todo apunta a que cuando llegue ese momento, no será fácil, como ocurrió con las negociaciones de la coalición de la ultraizquierda «Por Andalucía«, en las que tanto se tensó la cuerda que Podemos después de estar exigiendo más poder, cedió en los últimos momentos pero llegó tarde a la Junta Electoral de Andalucía y su registro en «Por Andalucía» fue rechazado por la Junta Electoral. Entonces, los de Ione Belarra Urteaga quedaron fuera de la candidatura, aunque finalmente se mantuvo el acuerdo político entre las formaciones de la izquierda radical que tampoco no sirvió ni para frenar a VOX ni para impedir un Gobierno del PP porque VOX creció hasta 97.000 votos y un escaños más mientras el PP sorprendió con una mayoría absoluta no por mérito propio sino por la campaña antiVOX de todas las formaciones del consenso progre contra la candidatura liderada por la vecina de Salobreña (Granada), Macarena Olona Choclán, tanto en los tribunales como en los medios de comunicación, debate electorales y en la Junta Electoral. Lo que provocó una abstención masiva de los votantes de la extrema izquierda y de la izquierda y el voto útil se paso casi en su totalidad al PP de Juan Manuel Moreno Bonilla. Cs, que se sumó con todas sus fuerzas a la campaña antiVOX desapareció, mientras la ultraizquierda y la izquierda se hundieron tras cosechar un desastre electoral en las urnas.

Y aparte, los resultados fueron muy malos para este primer ensayo del proyecto de Díaz porque si bien la ministra de Trabajo lo desvinculó por completo de sus planes, ella se implicó hasta el fondo incluso con la designación de la candidata d ela ultraizquierda, Inmaculada Nieto Castro.

Es en este contexto en el que surge este «proyecto de país» -siempre evitando la palabra «España» y sustituyendola con «país» o «Estado español»- que quiere «sumar inteligencias colectivas» y no siglas de partidos de la izquierda radical porque al juicio de Díaz ya sólo engañan a muy poca gente con sus marcas ya conocidas (Unidas Podemos, Podemos, Izquierda Unida, Partido Comunista de España, Equo, los Comunes, etc.) para volver a conectar con lel votante d ela ultraizquierda, ha dicho la ministra, en un momento «muy difícil» y en el que hay una gran desafección de la ciudadanía, ha reconocido Díaz al recalcar que «la política ha desconectado de la gente, la ha dejado atrás». Y por eso, «el reto es enorme».