Redacción El País – La dirección de Podemos mantuvo este viernes el apoyo incondicional al Gobierno de Alexis Tsipras después de que el presidente griego haya dimitido y convocado elecciones anticipadas, y tras la decisión de la corriente radical de Syriza de presentar su propia lista para los comicios. El secretario de Política de Podemos, Íñigo Errejón, defendió la «lección de coraje, responsabilidad y de confianza en su pueblo» que, en su opinión, ha dado el presidente griego con la convocatoria electoral, y descartó la posibilidad de escisiones como la de Syriza en su partido. Al mismo tiempo que la cúpula trataba de ahuyentar el fantasma de la división, algunos dirigentes de Podemos como la líder andaluza, Teresa Rodríguez, o el fundador Juan Carlos Monedero, se desmarcaron de la postura oficial y expresaron su incomodidad con las decisiones de Tsipras. <Fotografía: El secretario de Política de Podemos, Íñigo Errejón, durante la rueda de prensa este viernes. Foto imágenes del El País>.
Errejón hizo equilibrios para defender, por un lado, que el memorando que acompaña al tercer rescate a Grecia es «un intento de golpe de Estado financiero» y, por otro, respaldar que Tsipras lo haya aceptado. El Gobierno griego, sostuvo, «ha marcado las diferencias entre quien gobierna al servicio de su pueblo o de los privilegiados», dijo y citó su reforma fiscal «para que paguen más quienes más tienen» o los planes de rescate ciudadano. El político reconoció, no obstante, que hay carencias en la actuación del partido hermano: «Somos conscientes de que [el Gobierno griego] no ha dado todos los pasos», admitió.
El número dos de Podemos señaló que conservan sus «simpatías y relación de fraternidad con quienes se han atrevido con una política valiente en defensa de la soberanía popular», incluso aunque una parte del partido de Gobierno griego haya reprobado la decisión de Tsipras de aceptar el tercer rescate después de que los ciudadanos lo rechazaran en referéndum. «Nosotros vamos a seguir apoyando a quienes son valientes sabiendo que el camino no es sencillo y que algunos quieren hacer el juego cínico de zancadillear el cambio político y después decir: ‘¿veis? si es que no se puede», señaló Errejón, quien reconoció que la división en el seno del partido hermano «no es una buena noticia» pero no tendrá su reflejo en Podemos. «Aquí habrá una candidatura de cambio unida», apostilló.
«Temblor de piernas»
Pero algunos dirigentes del partido expresaron dudas acerca de las decisiones del presidente griego. La líder andaluza, Teresa Rodríguez, aseguró el jueves que teme que a su partido le «tiemblen las piernas» como a Tsipras “tras haber conseguido un no claro de la ciudadanía para ser desobedientes a la Troika». «Tengo miedo de que eso nos pase a nosotros», dijo. La diputada andaluza rectificó después sus palabras para que no se “utilicen” contra Grecia. «Lo que me aterroriza es que la Troika se convierta en un sicario a sueldo de la banca», escribió este viernes en su perfil en la red social Facebook al tiempo que defendía que «se le dé la palabra» a los griegos.
El fundador de Podemos Juan Carlos Monedero reconoció que no le «emociona» el adelanto electoral de Tsipras, porque está «invitando a la ciudadanía a votar en un escenario de la resignación». «Tsipras ha cometido un error y es que no puede ir a matar dragones con un cazamariposas», señaló Monedero en referencia a que Grecia ha podido hacer frente a las decisiones del Eurogrupo. En el país heleno, expuso, «se ha roto la unidad popular», y eso «no debe ocurrir en España», advirtió el exmiembro de la cúpula de Podemos, que actúa ahora como una suerte de representante de la conciencia crítica del partido.
Errejón respondió a las críticas del Gobierno y el PSOE, que rápidamente salieron a vincular las elecciones griegas con un fracaso del populismo: el problema es que Rajoy «trata de tapar sus vergüenzas» con la política europea, apuntó. El número dos de Podemos defendió que su vinculación con el Ejecutivo griego no va a pasarles factura electoralmente. «España no es Grecia ni por la situación política ni económica. Los españoles son mayores de edad y van a acudir a las urnas en clave nacional», concluyó.
El dirigente de Podemos entiende que el proyecto europeo está «secuestrado» por las élites y por tanto «amenazado», y propone para «salvarlo» una reforma del BCE que lo asemeje a la Reserva Federal estadounidense, políticas de inversión y una conferencia sobre la deuda.