Lasvocesdelpueblo y Agencias – El presidente independentista que ocupa la Generalidad de Cataluña, Quim Torra Pla, ha vuelto a colgar este lunes, 27 de 2019, en el balcón del Palacio del Gobierno regional de todos los vecinos de Cataluña su pancarta a favor de los criminales presos y huidos de la Justicia, líderes del golpismo en Cataluña, donde se puede leer: «presos políticos y exiliados», con un lazo amarillo, una vez terminado el ciclo electoral. Dice el presidente Torra, «exiliados», en referencia a los huidos Carles Puigdemont y parte de su gobierno, a quienes les faltó coraje en la hora de asumir su responsable o de sacar a la calles en Cataluña a las bandas armas de los Mozos independentistas, que lidera el agente de ese cuerpo, Albert Donaire Malagelada, un policía separatista imputado por «calumnias» -confirmó el propio Donaire Malagelada-, o bien proteger a su Declaración Unilateral de Independencia de Cataluña (DUI) con los grupos organizados del terrorismo callejero en Cataluña: Comités de Defensa de la República Catalana (CDR) y Antifascistas. Barcelona (España), martes 28 de mayo de 2019.
Esta pancarta con el lema «Libertad presos políticos y exiliados», en dialecto catalán e inglés, junto con un lazo amarillo, fue motivo de polémica cuando la Junta Electoral Central ordenó retirarla, al inicio del ciclo electoral de los comicios del 28A y 26M, argumentado que durante este periodo no se podían exhibir lemas partidistas en edificios públicos.
Torra desoyó inicialmente la orden y no retiró la pancarta al término del plazo que dio la JEC, el pasado 21 de marzo, lo que le acarreó días después una querella de la Fiscalía por desobediencia, por la que ya ha tenido que declarar ante el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña.
Cuando ya había expirado el plazo que le había dado la JEC, Torra optó por tapar primero la pancarta con otra con el mismo lema y un lazo blanco con franja roja, en lugar del color amarillo.
Una alternativa que fue vetada de nuevo por la JEC y que dio lugar a una tercera pancarta, que decía «Libertad de opinión y expresión», que sí fue autorizada en este caso y que se ha mantenido en el balcón del Palau de la Generalitat durante todo el periodo electoral.
