Lasvocesdelpueblo y Agencias – El inspector jefe de Enseñanza del gobierno separatista catalán de Artur Mas Gavarró y una directora de instituto que este jueves 30 de julio 2015 han declarado ante el juez del Tribunal Superior de Justica de Cataluña (TSJC) que investiga al presidente separatista excluyente, Artur Mas, por celebrar el golpe separatista del pasado 9 de noviembre 2014 pese a la suspensión y prohibición del Tribunal Constitucional (TC), han coincidido en declarar que no hubo presiones del gobierno separatista y colectivos separatistas excluyentes para que los directores entregaran las llaves. El magistrado del TSJC ha aplazado hasta septiembre la declaración como testigo de la directora del IES Pedraforca de L’Hospitalet de Llobregat, Dolores Agenjo, que se negó a entregar las llaves de su centro para la votación anti catalana no separatista y contra la unidad de España. <Fotografía: El ex-entrenador de FC Barcelona y actúan candidato en la lista separatista de Artur Mas Gavarró ‘Juntos Por el Sí’, Josep Guardiola Sala, votando el pasado 9 de noviembre 2014. Foto/Cristina Calderer>.
Según ha explicado a los medios la propia directora del IES Pedraforca a la salida del tribunal, el motivo de la suspensión ha sido que la defensa ha pedido más tiempo para estudiar unos correos electrónicos que apoyan su testimonio, que la semana pasada aportó la parte querellante Manos Limpias, a la causa.
Los tres testigos han sido convocados a instancias de la Fiscalía, después de que el pasado 13 de julio la directora de los Servicios Territoriales de Enseñanza en Barcelona admitiera que convocó dos reuniones con directores de instituto, y que dos inspectores advirtieran que algunos responsables de escuelas les aseguraron que en la reunión se les pidió que permitieran la apertura de los centros para la votación.
La directora del IES Pompeu Fabra de Badalona, donde se guardaron urnas el 9N, ha asegurado que no fue presionada y ha explicado que como no había ningún voluntario entre los miembros del claustro, optó por entregar las llaves en la consejería, que se las dio a un voluntario de la consulta que trabajaba allí y a quien conocía.
El motivo de la citación de esta directora es que uno de los dos inspectores que han asegurado que los profesores se habían sentido presionados por el departamento explicó que le remitió una carta en la que le advertía que, para salvar su «responsabilidad», no debía permitir el uso de las instalaciones de su centro si no recibía instrucciones concretas, por escrito, por parte de la Generalitat.
El inspector jefe de Enseñanza, Francesc Güell, que asistió a las dos reuniones que convocó la directora territorial de Barcelona -los días 16 y el 22 de octubre-, para informar a los centros sobre su papel en la consulta alternativa del 9N, ha insistido en la versión que dio la inspectora territorial de Barcelona, Montse Llobe,t y como ésta ha asegurado que estas reuniones se hicieron a petición de los directores que expresaron sus inquietudes y temores pero que nunca hubo presión.
Dolores Agenjo es el único director de instituto que se negó a entregar las llaves del edificio para que el 9 de noviembre se hiciera la consulta y ha asegurado que se sintió presionada para que las entregase. También ha asegurado que la propia la directora territorial de Enseñanza en Barcelona, Montse Llobet, la presionó el 7 de noviembre para que lo hiciera con el argumento de que el edificio es propiedad de la Generalitat, aunque se negó a ordenárselo por escrito, como ella le pedía.
El abogado de Manos Limpias Pedro Muñoz ha señalado que en las declaraciones de los testimonios que se han hecho hasta ahora ha quedado acreditado que los directores de los centros manifestaron «temor y miedo» en las reuniones porque tenían claro que el uso que se iba a dar a los centros de enseñanza no era «un uso social».
Para el abogado de Manos Limpias hay motivos suficientes para procesar al presunto delincuente separatista catalán, Artur Mas. El abogado de la defensa Jordi Pina, por su parte, ha manifestado su satisfacción porque los dos testimonios citados por la fiscalía hoy, hayan reiterado que no hubo presiones por parte del gobierno separatista excluyente de Cataluña.
