Galicia da la espalda a Ciudadanos de Albert Rivera por su engaño tras el 26J, gana el PP

0
694
Fotografía: El candidato a la presidencia autonómica del País Vasco por Ciutadans Partido de la Ciudadanía Ciudadanos (C's), Nicolás de Miguel (i), la líder de C's en cataluña, Inés arrimadas (c) y el líder Nacional de C's, Albert Rivera (d), hoy durante el mitin d ela formación naranja en Vitoria (País Vasco), España. lasvocesdelpueblo.

Lasvocesdelpueblo y agencias – Feijóo repite mayoría absoluta en Galicia y En Marea liderará la oposición. Noche de luto en el partido naranja; el País Vasco y Galicia han rechazado la propuesta de Ciutadans de Inés Arrimadas y su jefe Albert Rivera Díaz. Ciudadanos no se estrenará ni en el parlamento autonómico del país Vasco ni en el de Galicia. Cero escaño tiene Ciudadanos con el 93% del escrutinio. El PP mantiene su hegemonía y aumenta su porcentaje de voto respecto a 2012. En Marea rebasa al PSOE tras tres décadas al frente de la oposición. El BNG amortigua su caída y se queda con 6 escaños; C’s no logra ninguno. Santiago de Compostela (España), domingo 25 de septiembre de 2016. Fotografía: Fotografía: El candidato a la presidencia autonómica del País Vasco por Ciutadans Partido de la Ciudadanía Ciudadanos (C’s), Nicolás de Miguel (i), la líder de C’s en cataluña, Inés arrimadas (c) y el líder Nacional de C’s, Albert Rivera (d), hoy durante el mitin d ela formación naranja en Vitoria (País Vasco), España. Archivo lasvocesdelpueblo.

Ciudadanos, que en las encuestas más favorables aspiraba incluso a dos diputados en el Parlamento gallego, se ha quedado a las puertas de un escaño en Pontevedra sin hueco en la Cámara autonómica, con apenas el 3,34% de los votos y poco más de 44.000 votos, muy lejos del 8,63%, casi 134.000 sufragios, que sumaron en las elecciones generales de junio.

Finalmente, su discurso reformista y su propuesta de ser la palanca de cambio y control al ‘inevitable’ gobierno del PP no ha encontrado eco entre el electorado gallego a la hora de conformar su Parlamento autonómico.

El presidente de la Junta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, conseguiría una tercera mayoría absoluta consecutiva en las elecciones gallegas con 41 escaños para el PP, su partido, los mismos que en 2012, con el 93% de los votos escrutados. En Marea tendría 14 diputados, los mismos que el PSOE, mientras que el BNG lograría seis escaños. En tanto que Ciudadanos se quedaría sin representación en la Cámara gallega; una catástrofe naranja fruto de las negociaciones post-electorales con el candidato del PP, Mariano Rajoy. El pacto PP-Ciudadanos ya está pasando factura a Ciudadanos.

Feijóo repite mayoría absoluta en Galicia y En Marea liderará la oposición

El PP ha vuelto a ganar las elecciones gallegas y de nuevo por una clara mayoría absoluta. El actual presidente autonómico y candidato a la reelección, Alberto Núñez Feijóo, ha cumplido los pronósticos y por tercera vez consigue presidir la Xunta de Galicia, con 41 escaños -la mayoría absoluta está en 38-. La sorpresa ha venido al consumarse el llamado ‘sorpasso’ de En Marea en votos, aunque no en escaños, a los socialistas gallegos -14 diputados para ambos-, que ceden la segunda plaza tras tres décadas liderando la oposición al PP.

A grandes rasgos, las elecciones del 25S han confirmado que el PP es el partido hegemónico en Galicia, y pervive como la única comunidad autónoma en la que hay un Ejecutivo con mayoría absoluta. Feijóo, que pedía un resultado «diáfano» que le permitiera gobernar al día siguiente de los comicios, ha logrado de hecho mejorar su resultado electoral, con un 47,8% de los votos, cuando obtuvo el 45,8% en 2012.

Los ‘populares’ ganan con claridad en las cuatro provincias gallegas -supera el 53% de los votos en Lugo y Ourense- y Alberto Núñez Feijóo, que estuvo cerca de no presentarse a estas elecciones y no ha dejado de sonar nunca en las cábalas acerca de la sucesión del presidente del PP, Mariano Rajoy, renueva ahora su compromiso político con su tierra para los próximos cuatro años y da al líder de su partido una importante victoria que esgrimir en sus aspiración a la Moncloa o, en su caso, al granero de votos en unas terceras elecciones generales.

El PSOE, desbancado por En Marea

Un balance opuesto al del PSOE, que se ha visto superado en su pugna por la segunda plaza. Joaquín Fernández Leiceaga, debutante como cabeza de lista, no ha conseguido aguantar el tipo y se ha dejado cuatro escaños, de 18 a 14 escaños, y se ha quedado con el 17,89% de los votos, cuando en 2012 obtuvo el 20,6%.

Los socialistas han perdido escaños en todas las provincias, se han visto desplazados como segunda fuerza en A Coruña y Pontevedra -allí donde las Mareas son más fuertes-. En Marea ha sabido capitalizar el discurso de oposición a las políticas económicas y sociales, en contra de los recortes y la corrupción, que ya le llevó a alcaldías tan importantes como La Coruña, Santiago de Compostela y Ferrol en las elecciones municipales de 2015.

La unión de las mareas, Podemos y otras formaciones locales a las siglas AGE (EU-Anova) en 2012 ha incrementado su poder político, al lograr el 18,85% de los votos y 14 escaños, mejorando el 13,9% de los votos y nueve escaños de la anterior votación. Luís Villares, que dejaba su toga de juez para presentarse como candidato del partido instrumental, será ahora el líder de la oposición en la Cámara autonómica.

Sigue el declive del BNG

La evolución de las mareas ha desplazado en el arco parlamentario al BNG, que ahora es la cuarta fuerza más votada, si bien sale mejor parada de lo que preveían los sondeos y se quedará con el 8,35% de los votos y seis escaños (en 2012 obtuvo el 10,1% y siete escaños), lo que le permitirá conservar su grupo parlamentario en la Cámara, para lo que precisaba al menos de cinco diputados.

De todos modos, el resultado ahonda en el decaimiento de la siglas de la histórica formación nacionalista, que desde la escisión de Anova en 2012 no ha conseguido frenar la pérdida de apoyos.

Ciudadanos, que en las encuestas más favorables aspiraba incluso a dos diputados en el Parlamento gallego, se ha quedado a las puertas de un escaño en Pontevedra sin hueco en la Cámara autonómica, con apenas el 3,34% de los votos y poco más de 44.000 votos, muy lejos del 8,63%, casi 134.000 sufragios, que sumaron en las elecciones generales de junio.

Finalmente, su discurso reformista y su propuesta de ser la palanca de cambio y control al ‘inevitable’ gobierno del PP no ha encontrado eco entre el electorado gallego a la hora de conformar su Parlamento autonómico.