Lasvocesdelpueblo y Agencias – El acuerdo de Gobierno de coalición de la XII Legislatura de la Comunidad autónoma de Cataluña entre ERC y JxCat para formar un nuevo Gobierno de coalición de la Generalidad de Cataluña prevé una «confrontación democrática» con España para «forzarlo a una resolución del conflicto» separatista y contempla una posible «intervención de los organismos europeos» para lograr un «referéndum acordado y vinculante» en la Comunidad autónoma de Cataluña. Barcelona (España), martes 18 de mayo de 2021.
El «Acuerdo de Gobierno de la Generalidad de Cataluña para la investidura de Pere Aragonès» es un documento de 46 páginas que, además de detallar la estructura del futuro ejecutivo, sus prioridades programáticas y sus mecanismos de coordinación, incluye un apartado titulado «Estrategia independentista para hacer la República Catalana».
Estos son los puntos principales que contiene el acuerdo:
«CONFRONTACIÓN DEMOCRÁTICA»
ERC y JxCat coinciden en considerar la autodeterminación como «la única vía democrática para la resolución del conflicto político entre Cataluña y España», si bien solo un referéndum «acordado» con el Gobierno de España «puede sustituir el mandato político» del 1-O para «hacer realidad la república catalana».
El texto del acuerdo hace equilibrios entre la «apuesta por el diálogo y la negociación política», en la que suele hacer hincapié ERC, y la «necesidad de una confrontación cívica y pacífica para forzar al Estado a asumir la realidad hasta ahora negada», como acostumbra a reivindicar JxCat.
«Hay que preparar desde todos los resortes al alcance los diversos escenarios de confrontación democrática para ganar el ejercicio efectivo del derecho a la autodeterminación», añade.
UN NUEVO ‘ESTADO MAYOR’ DEL PROCÉS
El acuerdo anuncia la creación de un «espacio de coordinación, consenso y dirección estratégica» integrado por ERC, JxCat, la CUP, la ANC y Òmnium Cultural, que prepare discretamente una estrategia unitaria para «culminar el camino hacia la República Catalana».
Este espacio -inspirado en el ‘Estado Mayor’ del procés que organizó en la sombra el referéndum unilateral del 1-O de 2017- se «coordinará» con el Consejo por la República, entidad que lidera el expresidente de Cataluña Carles Puigdemont desde Bélgica.
Una vez el Consejo por la República «finalice su reformulación» -como exige ERC, que ve este espacio demasiado supeditado a JxCat-, la nueva dirección estratégica del independentismo podrá situarse «en su marco» organizativo.
El «espacio de coordinación, consenso y dirección estratégica» promoverá, «desde el consenso, una unidad de acción» en temas relacionados con el procés en el Parlament, las Cortes y el Parlamento Europeo, coordinará movilizaciones unitarias y tratará de enhebrar un «relato comunicativo» conjunto.
Además de esta «dirección estratégica» -con 2 o 3 representantes por organización- habrá un «comité técnico» -con 1 o 2 miembros por organización- que llevará el día a día de la coordinación y que impulsará grupos de trabajo específicos.
Para remarcar que Aragonès no estará «tutelado» por el Consejo por la República como temía ERC, el acuerdo señala que el presidente solo responderá «ante el Parlament».
NEGOCIACIÓN CON EL ESTADO
ERC y JxCat consideran que el mejor «instrumento para la resolución del conflicto es un referéndum de autodeterminación acordado con el Estado», aunque, ante las «posibilidades de éxito muy limitadas» de esta negociación, defienden «trabajar todas las vías democráticas que permitan forzar democráticamente al Estado» y preparar un «nuevo embate democrático» hacia la independencia.
El acuerdo deja claros los matices: «ERC apuesta por seguir explorando al máximo» la mesa de diálogo con el Estado, aunque «se compromete a no dilatar la mesa innecesariamente», mientras que JxCat muestra su «escepticismo y dudas», aunque no la bloqueará.
Los próximos pasos para fortalecer la posición negociadora del independentismo que plantea el acuerdo son: validar en el Parlament el «inicio del proceso de negociación y constituir una comisión de seguimiento y rendición de cuentas», proclamar desde el Gobierno de la Generalidad de Cataluña su «voluntad de establecer un marco de negociación» con el Ejecutivo central y «trabajar por el Acuerdo Nacional por la Autodeterminación y la Amnistía como espacio amplio y plural de reflexión».
MECANISMOS DE COORDINACIÓN
Por otra parte, además de detallar las 14 consejerías del Gobierno de la Generalidad de Cataluña y anunciar una comisión interdependiente para la gestión de fondos europeos, el acuerdo detalla los mecanismos de coordinación para engrasar la coalición desde la «lealtad» y evitar los constantes encontronazos de la pasada legislatura.
Habrá un «equipo de coordinación parlamentaria» que se reunirá semanalmente, otro de «coordinación gubernamental» con la misma periodicidad y otro de «comunicación», además de un «equipo de seguimiento del acuerdo» -quincenal- y un «Comité de Dirección Política» al más alto nivel para solventar crisis excepcionales.
