Agencias – El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez Pérez-Castejón, ha terminado este viernes su ronda de contactos con los dirigentes territoriales del partido antes de que este sábado el Comité Federal fije la hoja de ruta de los socialistas tras las elecciones generales y ante la intención de Mariano Rajoy de contar con su apoyo para gobernar. Todos los barones defienden que se dé un «no rotundo» al líder del PP y descartan también la abstención aunque de cara al futuro hay matices. Madrid (España), viernes 8 de julio de 2016. Fotografía: La presidente del PSOE andaluz, Susana Díaz, a su llegada a Ferraz para reunirse con Sánchez. Efe
Los más críticos con Sánchez abren la puerta a una posible abstención en el futuro si cambian las actuales circunstancias, mientras que los afines respaldan que el líder socialista intente ser presidente si Rajoy fracasa.
Pedro Sánchez intervendrá por primera vez tras el 26J ante el Comité Federal para criticar, como ya han hecho los dirigentes autonómicos, que Rajoy esté esperando a que otros le resuelvan la investidura, en alusión al PSOE, en lugar de buscar apoyos para su investidura entre sus «afines ideológicos», entre los que sitúan a Ciudadanos, Convergencia (CDC) y el PNV.
La presidenta de Andalucía, Susana Díaz, ha sido la última en reunirse esta tarde con Sánchez en una reunión de apenas media hora, una de las más cortas. A su salida ha insistido en que no ha cambiado de opinión: el PSOE debe estar en la oposición y «no ser cómplice» de un gobierno del PP. A su llegada a Ferraz se ha limitado a señalar que venía a escuchar «la valoración del secretario general y la hoja de ruta que tiene prevista», según recoge Efe.
El presidente de Castilla-La Mancha y líder de los socialistas en la región, Emiliano García-Page, es de los que cree que el PSOE debe quedarse en la oposición, sin nuevas intentonas de gobierno y ha pedido un ‘no’ a Rajoy «claro ahora y en un futuro inmediato», matizando que sea así mientras se den las actuales condiciones, «porque nunca hay nada definitivo en la vida». Para él, los socialistas tienen la «obligación de encabezar la oposición y construir una alternativa».
García-Page, tras reunirse con el líder del PSOE para trasladarle su posición antes del Comité Federal del sábado, ha opinado que los socialistas no pueden «buscar el poder a cualquier precio, ni esperar a que Rajoy se estrelle» para intentar otra vez formar con gobierno con Podemos y Ciudadanos.
Tras su encuentro cara a cara con Sánchez, el secretario general de los socialistas castellano-manchegos ha dicho que «el PSOE no actúa ni con acosos ni con complejos ni va a regalar a nadie ser la alternativa», y ha advertido al PP de que ni Sánchez ni el PSOE se sienten «acosados» por su estrategia de presionarles para que se abstengan en la investidura de Rajoy y de que el «acoso es el peor camino para trazar la vía del consenso en el país».
Así lo ha dicho después de que esta mañana, en declaraciones a Antena 3, explicara que si el presidente del Gobierno en funciones se presenta a la investidura habiendo conseguido el apoyo de otros partidos, el PSOE podría analizar su posición «con otro sosiego y con otro concepto».
En todo caso, ha dejado claro que no le gusta la idea de «prestar» un diputado para que salga adelante la investidura. Se refería así a la postura del presidente de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, quien ha propuesto una «abstención mínima» con los diputados estrictamente necesarios para que salga adelante.
Precisamente tras reunirse también este viernes con Pedro Sánchez, Fernández Vara ha explicado que le ha dado su apoyo para votar no a la investidura de Rajoy, aunque sin descartar una abstención de última hora, si este logra acuerdos con otros partidos. «El PSOE irá a resolver problemas cuando Rajoy sea activo, no diletante», ha dicho.
Fernández Vara sostiene que, si Rajoy ofrece una negociación a los socialistas avalado por un acuerdo previo con Ciudadanos y Coalición Canarias, que sumaría 170 diputados, el PSOE «estará a la altura de la historia general de España». «Lo que no se nos puede pedir es que eso (la abstención) sea el primer plato», ha exigido el presidente extremeño al PP, tras considerar abusivo que Rajoy esté «tranquilamente en la Moncloa», mientras los socialistas soportan una «presión ciudadana de primera magnitud».
Fernández-Vara, que ha hecho estas declaraciones a la salida de la reunión que ha mantenido con el líder de su partido, Pedro Sánchez, para trasladarle su posición de cara al Comité Federal de este sábado, se ha mostrado convencido de que habrá «unanimidad» en ese órgano en cuanto a votar en contra de la investidura de Rajoy y en que el PSOE tiene que «irse a la oposición».
El presidente de la Generalitat valenciana, Ximo Puig, y las líderes del partido en Euskadi, Idoia Mendia, y Madrid, Sara Hernández, no cerraban tampoco la puerta a que los socialistas puedan abstenerse y evitar unas nuevas elecciones, una opción directamente recomendada por el expresidente Felipe González y también por el exvicepresidente Alfonso Guerra, ambos de gran ascendiente en las filas socialistas.
A este respecto, la presidenta de la gestora del PSOE en Galicia, Pilar Cancela, ha afirmado que en el PSOE «la voz cualificada es la del secretario general y su Ejecutiva, que nos representan», y que los ciudadanos «han querido colocar al partido socialista en la oposición», por lo que deberán actuar como «la alternativa del PP» y no apoyar la investidura de Rajoy ni con el voto a favor ni con la abstención.
También el secretario general del PSOE de Castilla y León, Luis Tudanca, se ha alineado con los «barones» que defienden que su partido «nunca» debe facilitar con su apoyo o con la abstención un gobierno del PP, pero, a diferencia de García-Page, sí cree que, si Rajoy fracasa en su intento de formar gobierno, debe intentarlo Pedro Sánchez.
«Será que la tramontana también sopla en Burgos, pero yo creo que si Rajoy vuelve a fracasar, Pedro tiene el derecho y el deber de intentarlo por el bien de los españoles», ha replicado Tudanca al presidente de Aragón, Javier Lambán, que el jueves consideró «un producto de la tramontana, que en determinadas épocas del año altera las mentes» la idea impulsada por la balear Francina Armengol de que Sánchez intente un «gobierno alternativo» si Rajoy no lo consigue, un plan que tampoco descarta el primer secretario del PSC, Miquel Iceta.
Luis Tudanca, junto a Armengol unos de los dirigentes autonómicos más cercanos a Sánchez, ha advertido a los que dentro del partido rechazan esa opción de que, a su juicio, «es la posición inmensamente mayoritaria de los militantes» del PSOE y de que «si alguien duda, la mejora manera de resolverlo es consultarles».
Desestima así las consideraciones de los portavoces parlamentarios en el Congreso, Antonio Hernando, y el Senado, Óscar López, quienes creen que no es posible volver a intentar un acuerdo de Gobierno sumando a Podemos y a Ciudadanos, porque ambos partidos ya demostraron después del 20D que se vetan mutuamente y lo siguen haciendo.
