Paulatina vuelta a la normalidad en Cataluña

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FOTOGRAFÍA. BARCELONA (ESPAÑA), 25.04.2020. Un menor en bicicleta detrás de un familiar durante el confinamiento por covid 19 en Cataluña. Efe

Efe – La Generalitat y el Gobierno preparan una paulatina vuelta a la normalidad y gracias a la disminución de nuevos contagios los menores de 14 años podrán salir a la calle, aunque el cómputo global confirma los más negros pronósticos del Govern, 135.861 enfermos o sospechosos de coronavirus y 9.186 personas fallecidas desde el inicio de la pandemia. Barcelona (España), domingo 26 de abril de 2020. 

Un informe del departamento de Salud conocido hace hoy un mes, el 24 de marzo, preveía dos escenarios del desarrollo de la COVID-19 en Cataluña y el más pesimista anunciaba 121.000 enfermos y unos 13.000 fallecidos, una situación que se acerca bastante a la realidad actual.

Los enfermos diagnosticados como positivos por coronavirus o sospechosos ascienden a fecha de hoy a 135.861, superando el máximo que Salud esperaba (121.000), mientras que las personas fallecidas no llegan a las 13.000 esperadas aunque el dato real es terrible, ya que se sitúan en las 9.186.

La situación cambia si se tienen en cuenta sólo los datos de fallecidos en hospitales (con la que trabaja el Ministerio de Sanidad), que ascienden en Cataluña a 5.396, y los enfermos positivos confirmados, 46.629.

Sin embargo, la evolución de la enfermedad y la progresiva disminución de nuevos contagios -según los datos de ayer en Cataluña el incremento de nuevos casos fue de 772, muy por debajo de los 1.000 de días atrás- permiten comenzar a pensar en las medidas a adoptar de forma paulatina para poner fin al confinamiento.

La portavoz del Govern, Meritxell Budó, ha pedido al Gobierno que practique «la colaboración y no la imposición» para definir un plan de desconfinamiento que permita a la población volver a salir a la calle una vez remita el coronavirus.

«Para encarar el desconfinamiento, volvemos a ofrecer al Gobierno español la colaboración para trabajar juntos, de forma leal, para luchar contra esta pandemia. Pero pedimos que se nos escuche y que no se nos impongan las decisiones. Pedimos colaboración y no imposición ni uniformización», ha dicho durante la sesión de control de este viernes en el Parlament.

El plan de desconfinamiento que prepara la Generalitat se basará en el documento de propuestas que el epidemiólogo Oriol Mitjà trasladó al ejecutivo catalán el pasado martes y contempla una apertura en cinco fases, test masivos y abre la puerta a la creación de un certificado de inmunidad.

El Govern espera aprobar el plan en un consejo ejecutivo extraordinario que podría celebrarse mañana sábado, si bien el pasaporte o certificado inmunitario ha generado discrepancias entre los dos socios de gobierno, JxCat y ERC, lo que habría retrasado su aprobación, ya que todavía no se ha decidido si se incorporará o no al plan definitivo.

La capital catalana también prepara el regreso paulatino a la normalidad y el teniente de alcalde de Prevención y Seguridad, Albert Batlle, ha informado de que el Ayuntamiento de Barcelona prevé «modular» y «adaptar a la realidad» de la ciudad el decreto que permitirá a los menores de 14 años salir a la calle y extender este permiso hasta los 18 años.

Los niños de hasta 14 años podrán salir a partir del domingo a dar paseos después de que el Gobierno rectificara la medida aprobada previamente que solo permitía las salidas de los menores para acompañar a un adulto en actividades como ir al supermercado, a la farmacia o al banco.

En el terreno del debate político, la consellera de Salud, Alba Vergès, ha defendido este viernes el criterio por el que se traslada únicamente a las personas mayores de las residencias a hospitales cuando existe «posibilidad de mejora», criterios que, ha dicho, no se pueden poner en duda porque son «clínicos».

Tanto Vergès como el conseller de Trabajo, Asuntos Sociales y Familia, Chakir El Homrani, han defendido en el Parlament la gestión respecto a las residencias en la crisis por COVID-19 en Cataluña, si bien han apuntado que deberán «extraerse lecciones» para el futuro y reflexionar sobre un sector vulnerable que se ha visto gravemente afectado.

La consellera de Salud ha asegurado también que «ni un sólo paciente se ha quedado a las puertas de un hospital sin ser atendido» porque «el sistema sanitario lo está dando todo» en la crisis por el coronavirus.