Empresario investigado de «Púnica» admite ante juez corrupción con el PP desde el 2011

0
777
FOTOGRAFÍA. MADRID (ESPAÑA), AÑO 2018. La expresidente madrileña y presidente del PP Madrid, Esperanza Aguirre. Madrid (España9, 17.09.2019. Un empresario investigado en Púnica ha admitido ante el juez que facturó servicios de publicidad para la campaña del PP de 2011 fuera del periodo electoral, que duraba dos meses, y ha indicado que se reunió con la expresidenta madrileña Esperanza Aguirre para concretar aspectos sobre el diseño de dichos trabajos. Efe

Efe – Un empresario investigado en Púnica ha admitido ante el juez que facturó servicios de publicidad para la campaña del PP de 2011 fuera del periodo electoral, que duraba dos meses, y ha indicado que se reunió con la expresidenta madrileña Esperanza Aguirre para concretar aspectos sobre el diseño de dichos trabajos. Madrid (España), martes 17 de septiembre de 2019. 

El empresario Carlos Holemans ha sido el único de los tres citados esta tarde que ha declarado ante el juez de la Audiencia Nacional Alejandro Abascal; los otros dos, José Luis de Rojas y Celia Caño, también empresarios, han pedido el aplazamiento de su declaración para instruirse en la causa.

Según fuentes presentes en la declaración, el empresario ha señalado que él ejercía funciones de creativo en su empresa El Laboratorio de Almagro, que realizó servicios electorales para el PP madrileño, y ha dicho que estos se facturaron durante ocho meses, si bien el periodo electoral comprendía dos, del 28 de marzo al 27 de mayo.

También ha explicado que tuvo varias reuniones con la entonces presidenta y candidata Esperanza Aguirre, a las que también acudió su sucesor, Ignacio González; y los exconsejeros Francisco Granados y Borja Sarasola.

En ellas, ha dicho, se concretaron aspectos relativos el diseño del trabajo que su empresa realizó para el PP de Madrid si bien ha asegurado que él nunca se encargó de la gestión económica, algo que le ha atribuido a su entonces socia María Luis Madariaga, también imputada, que, según él, es quien tenía el contacto con los clientes.

Según el juez, su empresa realizó servicios electorales para el PP de Madrid por un importe de 1,2 millones de euros, de los que 992.754 fueron «abonados subrepticiamente desde la cuenta corriente de funcionamiento» del partido.

Es decir, el juez cree que sobrepasó el techo de gasto electoral para conseguir «una campaña fastuosa».

Y para pagar esos 992.754 euros, según la investigación, Madariaga y otros investigados utilizaron varias empresas, entre ellas Paqui Palla, que se hacía pasar por proveedora de servicios no electorales y maquillaba así la verdadera prestación y su naturaleza electoral, emitiendo facturas «bajo conceptos irreales» y fechas anteriores al trabajo.

Respecto a esto, Holemans ha dicho que fue Madariaga quien le indicó que cobrar de esta forma era más rápido, si bien él ha negado saber la procedencia del dinero, pues se ha desvinculado completamente de los asuntos económicos.